"Emma"

TERCERA PARTE

CHAPTER 41.

CAPÍTULO PRIMERO

DORA′S AUNTS

LAS TÍAS DE DORA

At last, an answer came from the two old ladies. They presented their compliments to Mr. Copperfield, and informed him that they had given his letter their best consideration, ′with a view to the happiness of both parties′—which I thought rather an alarming expression, not only because of the use they had made of it in relation to the family difference before-mentioned, but because I had (and have all my life) observed that conventional phrases are a sort of fireworks, easily let off, and liable to take a great variety of shapes and colours not at all suggested by their original form. The Misses Spenlow added that they begged to forbear expressing, ′through the medium of correspondence′, an opinión on the subject of Mr. Copperfield′s communication; but that if Mr. Copperfield would do them the favour to call, upon a certain day (accompanied, if he thought proper, by a confidential friend), they would be happy to hold some conversation on the subject. Por fin recibí contestación de las dos ancianas. Saludaban a míster Copperfield y le informaban de haber leído con la mayor atención su carta, «teniendo en cuenta el interés de ambas partes». Aquella frase me alarmó bastante, no sólo porque sabía que la habían empleado en la ocasión del disgusto de familia antes mencionado, sino porque siempre he observado que las frases convencionales son una especie de fuegos de artificio, de los que al empezar no se puede prever la variedad de formas ni de colores que los hacen cambiar en absoluto de su forma primitiva. Mistres Spenlow añadían que era difícil dar por escrito una opinión sobre el asunto de que trataba míster Copperfield; pero que si míster Copperfield les hacía el honor de visitarlas en un día que señalaban de antemano, acompañado, si le parecía bien, de un amigo de confianza, tendrían mucho gusto en discutir con él el asunto.
To this favour, Mr. Copperfield immediately replied, with his respectful compliments, that he would have the honour of waiting on the Misses Spenlow, at the time appointed; accompanied, in accordance with their kind permission, by his friend Mr. Thomas Traddles of the Inner Temple. Having dispatched which missive, Mr. Copperfield fell into a condition of strong nervous agitation; and so remained until the day arrived. Ante semejante favor, míster Copperfield contestó inmediatamente a misses Spenlow que las saludaba respetuosamente y que tendría el honor de visitarlas el día designado, en compañía, como le indicaban, de su amigo míster Thomas Traddles, del Templo Inner. Una vez enviada aquella carta, míster Copperfield cayó en un estado de agitación nerviosa que duró hasta el día indicado.
It was a great augmentation of my uneasiness to be bereaved, at this eventful crisis, of the inestimable services of Miss Mills. But Mr. Mills, who was always doing something or other to annoy me—or I felt as if he were, which was the same thing—had brought his conduct to a climax, by taking it into his head that he would go to India. Why should he go to India, except to harass me? To be sure he had nothing to do with any other part of the world, and had a good deal to do with that part; being entirely in the India trade, whatever that was (I had floating dreams myself concerning golden shawls and elephants′ teeth); having been at Calcutta in his youth; and designing now to go out there again, in the capacity of resident partner. But this was nothing to me. However, it was so much to him that for India he was bound, and Julia with him; and Julia went into the country to take leave of her relations; and the house was put into a perfect suit of bills, announcing that it was to be let or sold, and that the furniture (Mangle and all) was to be taken at a valuation. So, here was another earthquake of which I became the sport, before I had recovered from the shock of its predecessor! Lo que aumentaba mucho mi inquietud era no poder, en una crisis tan importante, recurrir a los inestimables servicios de miss Mills. Pero míster Mills, que se dedicaba a llevarme la contraria (al menos a mí me lo parecía, lo que es lo mismo), míster Mills, repito, había decidido marcharse a la India. Y díganme ustedes: ¿para qué se iba a la India si no era para fastidiarme? Claro que podrán contestarme: ¿Y por qué no a la India mejor que a otra parte cualquiera, sobre todo si se tiene en cuenta que la India le podía interesar más porque comerciaba con ella? Yo no estaba muy enterado de sobre qué comerciaba; pero tengo idea de que se trataba de chales de tisú de oro y colmillos de elefante. Había estado en Calcuta en su juventud, y quería volver allí a establecerse como asociado residente. Pero todo aquello me era indiferente; lo importante era que al partir se llevaba a Julia y que Julia se había tenido que it al campo a despedirse de su familia; su casa estaba en venta o en alquiler, y el mobiliario (con lixiviadora y todo) se subastaba. Era, por lo tanto, un nuevo terremoto bajo mis pies antes de que estuviera re puesto del anterior.
I was in several minds how to dress myself on the important day; being divided between my desire to appear to advantage, and my apprehensions of putting on anything that might impair my severely practical character in the eyes of the Misses Spenlow. I endeavoured to hit a happy medium between these two extremes; my aunt approved the result; and Mr. Dick threw one of his shoes after Traddles and me, for luck, as we went downstairs. Me preocupaba mucho el pensar cómo me vestiría el día solemne; pues por un lado quería ir lo mejor posible y por otro temía que cualquier detalle de mi ropa pudiera perjudicar mi reputación de seriedad a los ojos de misses Spenlow. Intenté un feliz término medio, que mi tía aprobó, y míster Dick, para asegurar el éxito de nuestra empresa, arrojó un zapato tras de nosotros mientras bajábamos la escalera.
Excellent fellow as I knew Traddles to be, and warmly attached to him as I was, I could not help wishing, on that delicate occasion, that he had never contracted the habit of brushing his hair so very upright. It gave him a surprised look—not to say a hearth-broomy kind of expression—which, my apprehensions whispered, might be fatal to us. A pesar del cariño y el afecto que sentía por Traddles no pude por menos desear en aquella ocasión tan delicada que nunca hubiera tenido la costumbre de peinarse con cepillo, pues sus cabellos tiesos le daban una expresión como asustada; hasta podría decir que parecía una escoba de crin, y mis aprensiones me hacían temer que aquello nos fuera fatal.
I took the liberty of mentioning it to Traddles, as we were walking to Putney; and saying that if he WOULD smooth it down a little— En el camino me tomé la libertad de decírselo y de insinuarle que tratara de aplastárselos un poco...
′My dear Copperfield,′ said Traddles, lifting off his hat, and rubbing his hair all kinds of ways, ′nothing would give me greater pleasure. But it won′t.′ -Me querido Copperfield --dijo Traddles quitándose el sombrero y alisándose los cabellos en todas las direccio nes-, nada podría serme más agradable; pero no quieren.
′Won′t be smoothed down?′ said I. -¿No quieren quedarse aplastados?
′No,′ said Traddles. ′Nothing will induce it. If I was to carry a half-hundred-weight upon it, all the way to Putney, it would be up again the moment the weight was taken off. You have no idea what obstinate hair mine is, Copperfield. I am quite a fretful porcupine.′ -No -dijo Traddles-, nada puede convencerlos. Aunque me pusiera encima de la cabeza un peso de cincuenta libras y fuera con él hasta Putney no lo conseguiría: volverían a ponerse de puma en cuanto quitase- el peso. No puedes ha certe idea de su terquedad, Copperfield. Parezco un puercoespín constantemente encolerizado.
I was a little disappointed, I must confess, but thoroughly charmed by his good-nature too. I told him how I esteemed his good-nature; and said that his hair must have taken all the obstinacy out of his character, for he had none. Debo confesar que me quedé un poco desconcertado, aunque al mismo tiempo me encantaba su sencillez. Le dije todo lo que estimaba su buen carácter y que pensaba que toda la terquedad se le había ido a los cabellos y que por eso a él no te quedaba ni rastro.
′Oh!′ returned Traddles, laughing. ′I assure you, it′s quite an old story, my unfortunate hair. My uncle′s wife couldn′t bear it. She said it exasperated her. It stood very much in my way, too, when I first fell in love with Sophy. Very much!′ -¡Oh! -repuso Traddles riéndose-. Es ya antigua la historia de mis desgraciados cabellos. La mujer de mi tío no los podía resistir; decía que la exasperaban. Y también me han perjudicado mucho al principio, cuando me enamoré de Sofia. ¡Oh, sí, mucho!
′Did she object to it?′ -¿No le gustaban tus cabellos?
′SHE didn′t,′ rejoined Traddles; ′but her eldest sister—the one that′s the Beauty—quite made game of it, I understand. In fact, all the sisters laugh at it.′ -A ella sí -repuso Traddles-; pero su hermana mayor (la que es una belleza) no los podía tomar en serio. ¡Y todas las hermanas se han reído con ganas de ellos!
′Agreeable!′ said I. -¡Qué agradable!
′Yes,′ returned Traddles with perfect innocence, ′it′s a joke for us. They pretend that Sophy has a lock of it in her desk, and is obliged to shut it in a clasped book, to keep it down. We laugh about it.′ -¡Oh, sí! -repuso Traddles con perfecta inocencia-. Es una diversión para nosotros. Dicen que Sofia tiene un mechón de mis cabellos en su cajón, y que para tenerlos aplastados se ve obligada a meterlos en un libro con broches. ¡Nos reímos mucho, ya lo creo!
′By the by, my dear Traddles,′ said I, ′your experience may suggest something to me. When you became engaged to the young lady whom you have just mentioned, did you make a regular proposal to her family? Was there anything like—what we are going through today, for instance?′ I added, nervously. -A propósito, mi querido Traddles, tu experiencia podrá serme muy útil. Cuando te comprometiste con la muchacha de que me hablas, ¿tuviste que hacer a la familia una proposición formal? Por ejemplo: ¿has tenido que cumplir la ceremonia por que vamos a pasar hoy nosotros? -añadí nerviosamente.
′Why,′ replied Traddles, on whose attentive face a thoughtful shade had stolen, ′it was rather a painful transaction, Copperfield, in my case. You see, Sophy being of so much use in the family, none of them could endure the thought of her ever being married. Indeed, they had quite settled among themselves that she never was to be married, and they called her the old maid. Accordingly, when I mentioned it, with the greatest precaution, to Mrs. Crewler—′ -¿Sabes? --dijo Traddles poniéndose serio-. Mi caso ha sido muy complicado, Copperfield, y que me ha hecho sufrir mucho. Sofía es tan útil en su casa, que no podían hacerse a la idea de que se casara. Hasta habían decidido entre ellos que no se casaría nunca, y la llamaban siempre la «solterona». Así es que cuando empecé a hablar a mistress Crewler, con todas las precauciones imaginables...
′The mama?′ said I. -¿La mamá?
′The mama,′ said Traddles—′Reverend Horace Crewler—when I mentioned it with every possible precaution to Mrs. Crewler, the effect upon her was such that she gave a scream and became insensible. I couldn′t approach the subject again, for months.′ -Sí. El padre es el reverendo Horace Crewler, de quien ya te he hablado. Cuando empecé a hablar a mistress Crewler, a pesar de todas mis precauciones para prepararla, lanzó un grito y se desvaneció. Tuve que esperar meses antes de poder abordar el mismo asunto.
′You did at last?′ said I. -¿Pero por fin lo hiciste?
′Well, the Reverend Horace did,′ said Traddles. ′He is an excellent man, most exemplary in every way; and he pointed out to her that she ought, as a Christian, to reconcile herself to the sacrifice (especially as it was so uncertain), and to bear no uncharitable feeling towards me. As to myself, Copperfield, I give you my word, I felt a perfect bird of prey towards the family.′ -Fue el reverendo Horace quien lo hizo --dijo Traddles-, que es el hombre más excelente y ejemplar en todos sentidos. Le hizo ver que, como cristiana, debía aceptar aquel sacrificio, tanto más porque no lo era, y desechar todo sentimiento contrario a la caridad conmigo. Yo, te doy mi palabra de honor, Copperfield, me daba horror a mí mismo; me parecía un pájaro de presa que había caído sobre aquella familia.
′The sisters took your part, I hope, Traddles?′ -¿Espero que las hermanas estuvieran a tu favor, Tradd les?
′Why, I can′t say they did,′ he returned. ′When we had comparatively reconciled Mrs. Crewler to it, we had to break it to Sarah. You recollect my mentioning Sarah, as the one that has something the matter with her spine?′ -No del todo, pues cuando mistress Crewler ya se había hecho un poco a la idea tuvimos que anunciárselo a Sarah. ¿Recuerdas lo que te he dicho de Sarah? Es la que tiene algo en la espina dorsal.
′Perfectly!′ -¡Ah, sí, perfectamente!
′She clenched both her hands,′ said Traddles, looking at me in dismay; ′shut her eyes; turned lead-colour; became perfectly stiff; and took nothing for two days but toast-and-water, administered with a tea-spoon.′ -Pues Sarah cruzó las manos, mirándome con angustia; después cerró los ojos y se puso verde; su cuerpo estaba tieso como un palo, y durante dos días no pudo comer más que agua con pan, a cucharaditas.
′What a very unpleasant girl, Traddles!′ I remarked. -¿Debe de ser una chica insoportable, Traddles?
′Oh, I beg your pardon, Copperfield!′ said Traddles. ′She is a very charming girl, but she has a great deal of feeling. In fact, they all have. Sophy told me afterwards, that the self-reproach she underwent while she was in attendance upon Sarah, no words could describe. I know it must have been severe, by my own feelings, Copperfield; which were like a criminal′s. After Sarah was restored, we still had to break it to the other eight; and it produced various effects upon them of a most pathetic nature. The two little ones, whom Sophy educates, have only just left off de-testing me.′ -Perdona, Copperfield; pero es una chica encantadora. ¡únicamente tiene tanta sensibilidad! Todas son lo mismo. Sofía me dijo después que no podía figurarme los remordimientos que tenía, mientras cuidaba a Sarah. Y estoy seguro de que debió de sufrir mucho, Copperfield; lo juzgo por mí, pues yo me consideraba como un verdadero criminal. Cuando Sarah se restableció hubo que anunciárselo a las otras ocho, y en todas se produjo el efecto más conmovedor. Las dos pequeñas, a quienes Sofía educa, empiezan ahora a no odiarme tanto.
′At any rate, they are all reconciled to it now, I hope?′ said I. -¿Pero habrán terminado por hacerse a la idea?
′Ye-yes, I should say they were, on the whole, resigned to it,′ said Traddles, doubtfully. ′The fact is, we avoid mentioning the subject; and my unsettled prospects and indifferent circumstances are a great consolation to them. There will be a deplorable scene, whenever we are married. It will be much more like a funeral, than a wedding. And they′ll all hate me for taking her away!′ -Sí..., sí; al menos creo que están resignadas -dijo Traddles en tono de duda---. A decir verdad, evitamos hablar de ello, y lo que las consuela mucho es la incertidumbre de mi porvenir y mis escasos medios. Pero si nos casamos será una escena deplorable y más parecerá un funeral que una boda; además me odiarán a muerte por habérsela arrebatado.
His honest face, as he looked at me with a serio-comic shake of his head, impresses me more in the remembrance than it did in the reality, for I was by this time in a state of such excessive trepidation and wandering of mind, as to be quite unable to fix my attention on anything. On our approaching the house where the Misses Spenlow lived, I was at such a discount in respect of my personal looks and presence of mind, that Traddles proposed a gentle stimulant in the form of a glass of ale. This having been administered at a neighbouring public-house, he conducted me, with tottering steps, to the Misses Spenlow′s door. Su rostro tenía una expresión ingenua, seria y cómica a la vez, cuyo recuerdo quizá me impresiona ahora más que entonces, pues estaba en un estado tal de ansiedad a inquietud, que era incapaz de fijarme en nada. A medida que nos acercábamos a la casa de misses Spenlow me sentía más intranquilo respecto a mi aspecto externo y a mi presencia de ánimo; tanto es así, que Traddles me propuso, para animarme, beber algo que me repusiera un poco: un vaso de cerveza, por ejemplo. Me condujo a un café cercano, y al salir de allí me dirigí con paso tembloroso hacia la puerta de aquellas mujeres.
I had a vague sensation of being, as it were, on view, when the maid opened it; and of wavering, somehow, across a hall with a weather-glass in it, into a quiet little drawing-room on the ground-floor, commanding a neat garden. Also of sitting down here, on a sofa, and seeing Traddles′s hair start up, now his hat was removed, like one of those obtrusive little figures made of springs, that fly out of fictitious snuff-boxes when the lid is taken off. Also of hearing an old-fashioned clock ticking away on the chimney-piece, and trying to make it keep time to the jerking of my heart,—which it wouldn′t. Also of looking round the room for any sign of Dora, and seeing none. Also of thinking that Jip once barked in the distance, and was instantly choked by somebody. Ultimately I found myself backing Traddles into the fireplace, and bowing in great confusion to two dry little elderly ladies, dressed in black, and each looking wonderfully like a preparation in chip or tan of the late Mr. Spenlow. Tuve como una vaga sensación de que habíamos llegado cuando vi a una doncella que nos abría la puerta. Me pareció que entraba tambaleándome en un vestíbulo donde había un barómetro y que daba a un saloncito en el primer piso. El salón se abría sobre un bonito y pequeño jardín. Después creo que me senté en un diván, que Traddles se quitó el sombrero, y que sus cabellos se enderezaron, haciéndole parecer una de esas figuritas con sorpresa que salen de una caja cuando se levanta la tapa. Creo haber oído el tic tac de un viejo reloj rococó que adornaba la chimenea, y traté de poner mi corazón al unísono; pero ¡latía demasiado! Creo que buscaba con los ojos algo que me recordase a Dora; pero no vi nada. Creo también que oí ladrar a Jip a lo lejos, y que al momento ahogaron sus ladridos, y, en fin, estuve a punto de lanzar a Traddles a la chimenea al hacer una reverencia, muy confuso, a dos diminutas señoras vestidas de negro que parecían dos miniaturas del difunto míster Spenlow.
′Pray,′ said one of the two little ladies, ′be seated.′ -Siéntese, se lo ruego -dijo una de las dos señoras.
When I had done tumbling over Traddles, and had sat upon something which was not a cat—my first seat was—I so far recovered my sight, as to perceive that Mr. Spenlow had evidently been the youngest of the family; that there was a disparity of six or eight years between the two sisters; and that the younger appeared to be the manager of the conference, inasmuch as she had my letter in her hand—so familiar as it looked to me, and yet so odd!—and was referring to it through an eye-glass. They were dressed alike, but this sister wore her dress with a more youthful air than the other; and perhaps had a trifle more frill, or tucker, or brooch, or bracelet, or some little thing of that kind, which made her look more lively. They were both upright in their carriage, formal, precise, composed, and quiet. The sister who had not my letter, had her arms crossed on her breast, and resting on each other, like an Idol. Cuando dejé de empujar a Traddles y conseguí sentarme, por fin, en una silla (primero me había sentado encima de un gato), recobré el suficiente aplomo para darme cuenta de que míster Spenlow debía de ser seguramente el más joven de la familia: debía de haber seis a ocho años de diferencia entre las dos hermanas. La más joven parecía ser la que llevaba la voz cantante, pues tenía mi carta en la mano (con qué temor la reconocí) y la consultaba de vez en cuando con sus lentes. Las dos hermanas iban vestidas igual; pero la más joven llevaba algo que le daba un aire más coquetón; no sé si alguna puntilla más en el cuello, o un broche, o un braza lete, pero algo así, que le daba un aspecto más juvenil. Las dos eran tiesas, tranquilas y acompasadas. La que no tenía mi carta llevaba los brazos cruzados sobre el pecho, como un ídolo.
′Mr. Copperfield, I believe,′ said the sister who had got my letter, addressing herself to Traddles. -¿Mister Copperfield, supongo? -dijo la que tenía mi carta en la mano dirigiéndose a Traddles.
This was a frightful beginning. Traddles had to indicate that I was Mr. Copperfield, and I had to lay claim to myself, and they had to divest themselves of a preconceived opinión that Traddles was Mr. Copperfield, and altogether we were in a nice condition. To improve it, we all distinctly heard Jip give two short barks, and receive another choke. Era un modo de empezar terrible. ¡Traddles teniendo que explicar que míster Copperfield era yo, y yo teniendo que reclamar mi personalidad, mientras ellas a su vez se veían obligadas a deshacerse de la opinión preconcebida de que Traddles era míster Copperfield! ¡Una situación deliciosa! Además oírnos claramente los ladridos de Jip y que de nuevo le hacían callar.
′Mr. Copperfield!′ said the sister with the letter. -¡Mister Copperfield! -dijo la hermana que tenía la carta.
I did something—bowed, I suppose—and was all attention, when the other sister struck in. No sé lo que hice; probablemente saludé; después presté la atención más sostenida a lo que me dijo la otra hermana.
′My sister Lavinia,′ said she ′being conversant with matters of this nature, will state what we consider most calculated to promote the happiness of both parties.′ -Como mi hermana Lavinia es más competente que yo en semejantes materias, ella le dirá lo que nos parece más oportuno, teniendo en cuenta el interés de ambas partes.
I discovered afterwards that Miss Lavinia was an authority in affairs of the heart, by reason of there having anciently existed a certain Mr. Pidger, who played short whist, and was supposed to have been enamoured of her. My private opinión is, that this was entirely a gratuitous assumption, and that Pidger was altogether innocent of any such sentiments—to which he had never given any sort of expression that I could ever hear of. Both Miss Lavinia and Miss Clarissa had a superstition, however, that he would have declared his passion, if he had not been cut short in his youth (at about sixty) by over-drinking his constitution, and over-doing an attempt to set it right again by swilling Bath water. They had a lurking suspicion even, that he died of secret love; though I must say there was a picture of him in the house with a damask nose, which concealment did not appear to have ever preyed upon. Más adelante supe que miss Lavinia era una autoridad en los asuntos del corazón porque hacía mucho tiempo había existido un tal míster Pidger que jugaba al whist y que, según creían, había estado enamorado de ella. Mi opinión es que aquello era una suposición completamente gratuita y que míster Pidger había sido inocente de semejante sentimiento; el caso es que nunca lo había demostrado. Pero miss Lavinia y miss Clarissa creían como artículo de fe que le hubiera declarado su pasió n si la muerte no se le hubiera llevado en la flor de la edad (a los sesenta años), a consecuencia del abuso del alcohol, corregido con poca oportunidad con el abuso de las aguas de Bath. Y hasta sospechaban las dos hermanas que su secreto amor era la causa de su muerte. Debo decir que en el retrato que conservaban de él tenía una nariz roja que no hubiera hecho sospechar semejante cosa.
′We will not,′ said Miss Lavinia, ′enter on the past history of this matter. Our poor brother Francis′s death has cancelled that.′ -No haremos historia del pasado -dijo miss Lavinia-; la muerte de nuestro pobre hermano Francis lo ha borrado todo.
′We had not,′ said Miss Clarissa, ′been in the habit of frequent association with our brother Francis; but there was no decided division or disunion between us. Francis took his road; we took ours. We considered it conducive to the happiness of all parties that it should be so. And it was so.′ -No nos tratábamos mucho con nuestro hermano -dijo miss Clarissa-; pero no había ninguna querella entre nosotros; Francis seguía su camino y nosotras el nuestro, porque nos pareció que era lo mejor que se podía hacer en interés de ambas partes, y era verdad.
Each of the sisters leaned a little forward to speak, shook her head after speaking, and became upright again when silent. Miss Clarissa never moved her arms. She sometimes played tunes upon them with her fingers—minuets and marches I should think—but never moved them. Las dos hermanas se inclinaban del mismo modo hacia adelante para hablar; después sacudían la cabeza y se erguían cuando habían terminado. Miss Clarissa no movía nunca los brazos. Tocaba encima de ellos con sus dedos marchas y minuetos, pero sus brazos permanecían inmóviles.
′Our niece′s position, or supposed position, is much changed by our brother Francis′s death,′ said Miss Lavinia; ′and therefore we consider our brother′s opinions as regarded her position as being changed too. We have no reason to doubt, Mr. Copperfield, that you are a young gentleman possessed of good qualities and honourable character; or that you have an affection—or are fully persuaded that you have an affection—for our niece.′ -La posición de nuestra sobrina, al menos la posición que se le suponía, ha cambiado mucho desde la muerte de nuestro hermano Francis. Por lo tanto, debemos creer -dijo miss Lavinia- que la opinión de nuestro hermano sobre la posición de su hija ya no tiene la misma importancia. No tenemos motivos para dudar, míster Copperfield, de que usted tenga una reputación honorable y un carácter excelente, ni de que quiera usted a nuestra sobrina, o al menos de que lo cree usted firmemente.
I replied, as I usually did whenever I had a chance, that nobody had ever loved anybody else as I loved Dora. Traddles came to my assistance with a confirmatory murmur. Respondí, como hacía siempre, sin dejar escapar la ocasión, que nunca se había amado a nadie como yo amaba a Dora. Traddles vino en mi ayuda con un murmullo de afirmación.
Miss Lavinia was going on to make some rejoinder, when Miss Clarissa, who appeared to be incessantly beset by a desire to refer to her brother Francis, struck in again: Miss Lavinia iba a hacer alguna observación, cuando miss Clarissa, que parecía perseguida por la necesidad de aludir a su hermano Francis, tomó la palabra.
′If Dora′s mama,′ she said, ′when she married our brother Francis, had at once said that there was not room for the family at the dinner-table, it would have been better for the happiness of all parties.′ Si la madre de Dora nos hubiera dicho, el día que se casó con nuestro hermano Francis, que no había sitio para nosotras en su mesa, hubiera sido mejor para ambas partes.
′Sister Clarissa,′ said Miss Lavinia. ′Perhaps we needn′t mind that now.′ -Hermana Clarissa -dijo miss Lavinia-, quizá sería mejor no ocuparse de eso.
′Sister Lavinia,′ said Miss Clarissa, ′it belongs to the subject. With your branch of the subject, on which alone you are competent to speak, I should not think of interfering. On this branch of the subject I have a voice and an opinión. It would have been better for the happiness of all parties, if Dora′s mama, when she married our brother Francis, had mentioned plainly what her intentions were. We should then have known what we had to expect. We should have said "Pray do not invite us, at any time"; and all possibility of misunderstanding would have been avoided.′ -Hermana Lavinia --dijo miss Clarissa-, esto se refiere al asunto. Yo no me atrevería a mezclarme en la parte del asunto que te corresponde, pues sólo tú eres competente para tratarla. Pero en esta otra parte del asunto me reservo mi voz y mi opinión, y hubiera valido más, en interés de ambas partes, que la mamá de Dora nos hubiera expresado claramente sus intenciones el día en que se casó con nuestro hermano Francis. Hubiéramos sabido a qué atenernos y le hubiéramos dicho: «Que no se molestase en invitarnos nunca a nada». Así no hubiera habido equívocos.
When Miss Clarissa had shaken her head, Miss Lavinia resumed: again referring to my letter through her eye-glass. They both had little bright round twinkling eyes, by the way, which were like birds′ eyes. They were not unlike birds, altogether; having a sharp, brisk, sudden manner, and a little short, spruce way of adjusting themselves, like canaries. Cuando miss Clarissa terminó de sacudir la cabeza, miss Lavinia tomó la palabra, consultando mi carta a través de sus lentes. Las dos hermanas tenían los ojitos pequeños, redondos y brillantes; parecían ojos de pájaro. En general tenían mucho de pajaritos. En su tono breve, pronto y brusco y en la limpieza y cuidado de su ropa había algo que hacía recordar a los canarios.
Miss Lavinia, as I have said, resumed: Miss Lavinia tomó la palabra:
′You ask permission of my sister Clarissa and myself, Mr. Copperfield, to visit here, as the accepted suitor of our niece.′ -¿Usted nos pide a mi hermana y a mí, míster Copperfield, autorización para venir a visitarnos como novio de nuestra sobrina?
′If our brother Francis,′ said Miss Clarissa, breaking out again, if I may call anything so calm a breaking out, ′wished to surround himself with an atmosphere of Doctors′ Commons, and of Doctors′ Commons only, what right or desire had we to object? None, I am sure. We have ever been far from wishing to obtrude ourselves on anyone. But why not say so? Let our brother Francis and his wife have their society. Let my sister Lavinia and myself have our society. We can find it for ourselves, I hope.′ -Si le ha convenido a nuestro hermano Francis -dijo miss Clarissa estallando de nuevo (si es que se puede llamar estallar a una interrupción hecha con la mayor tranquilidad)-; si ha querido rodearse de la atmósfera del Tribunal de Doctores, ¿teníamos acaso nosotras el derecho ni el deseo de oponernos? No, de verdad. Nunca hemos tratado de imponemos a nadie. Pero, ¿por qué no decirlo?, mi hermano Francis y su mujer eran muy dueños de elegir sus amistades, como mi hermana Clarissa y yo de elegir las nuestras. ¡Tenemos edad para poder hacerlo, me parece!
As this appeared to be addressed to Traddles and me, both Traddles and I made some sort of reply. Traddles was inaudible. I think I observed, myself, that it was highly creditable to all concerned. I don′t in the least know what I meant. Como aquello parecía dirigirse a Traddles y a mí, nos creímos obligados a contestar algo. Traddles habló demasiado bajo y no se le entendió; yo creo que dije que aquello hacía mucho honor a todos; pero no sé lo que quería decir con aquello.
′Sister Lavinia,′ said Miss Clarissa, having now relieved her mind, ′you can go on, my dear.′ -Hermana Lavinia -dijo miss Clarissa después de desahogarse-, continúa.
Miss Lavinia proceeded: Miss Lavinia continuó:
′Mr. Copperfield, my sister Clarissa and I have been very careful indeed in considering this letter; and we have not considered it without finally showing it to our niece, and discussing it with our niece. We have no doubt that you think you like her very much.′ -Míster Copperfield, mi hermana Clarissa y yo hemos reflexionado mucho sobre su carta, y antes de reflexionar hemos empezado por enseñársela a nuestra sobrina y por discutirla con ella. No dudamos de que usted está convencido de quererla mucho.
′Think, ma′am,′ I rapturously began, ′oh!—′ -¡Sí creo quererla! ¡Señoras! ¡!Oh!... 
But Miss Clarissa giving me a look (just like a sharp canary), as requesting that I would not interrupt the oracle, I begged pardon. Iba a extasiarme; pero miss Clarissa me lanzó tal mirada (exactamente la de un canario) como para rogarme que no interrumpiera al oráculo, que me callé pidiendo que me dispensaran. 
′Affection,′ said Miss Lavinia, glancing at her sister for corroboration, which she gave in the form of a little nod to every clause, ′mature affection, homage, devotion, does not easily express itself. Its voice is low. It is modest and retiring, it lies in ambush, waits and waits. Such is the mature fruit. Sometimes a life glides away, and finds it still ripening in the shade.′ - El afecto -dijo miss Lavinia mirando a su hermana como pidiéndole una aprobación, que miss Clarissa no dejaba de darle al fin de cada frase con un ligero movimiento-, el afecto, verdad, el respeto, la abnegación, ¡cuesta tanto trabajo expresarlo! Su voz es débil. Modesto y reservado, el amor se oculta y espera, espera siempre. Es como un fruto que espera estar maduro. A veces pasa la vida mientras él continúa madurando en la sombra. 
Of course I did not understand then that this was an allusion to her supposed experience of the stricken Pidger; but I saw, from the gravity with which Miss Clarissa nodded her head, that great weight was attached to these words. Naturalmente, yo entonces no comprendí que era una alusión a los presuntos sufrimientos del desgraciado Pidger; únicamente me daba cuenta, al ver la gravedad con que miss Clarissa movía la cabeza, de que había un gran sentido encerrado en aquellas palabras. 
′The light—for I call them, in comparison with such sentiments, the light—inclinations of very young people,′ pursued Miss Lavinia, ′are dust, compared to rocks. It is owing to the difficulty of knowing whether they are likely to endure or have any real foundation, that my sister Clarissa and myself have been very undecided how to act, Mr. Copperfield, and Mr.—′ -Las inclinaciones ligeras (pues no podría compararlas con los sentimientos profundos de que hablo) -continuó miss Lavinia-, las inclinaciones ligeras de los jovencitos no son, al lado de eso, más de lo que el polvo es al lado de la roca. Y es tan difícil saber si tienen un fundamento sólido, que mi hermana Clarissa y yo verdaderamente no sabíamos qué hacer, míster Copperfield y usted, caballero... 
′Traddles,′ said my friend, finding himself looked at. -Traddles -dijo mi amigo viendo que le miraban. 
′I beg pardon. Of the Inner Temple, I believe?′ said Miss Clarissa, again glancing at my letter. -Usted me dispense, ¿Traddles del Templo Inner, según creo? -dijo miss Clarissa volviendo a mirar la carta. 
Traddles said ′Exactly so,′ and became pretty red in the face. -Sí -dijo Traddles poniéndose rojo.
Now, although I had not received any express encouragement as yet, I fancied that I saw in the two little sisters, and particularly in Miss Lavinia, an intensified enjoyment of this new and fruitful subject of domestic interest, a settling down to make the most of it, a disposition to pet it, in which there was a good bright ray of hope. I thought I perceived that Miss Lavinia would have uncommon satisfaction in superintending two young lovers, like Dora and me; and that Miss Clarissa would have hardly less satisfaction in seeing her superintend us, and in chiming in with her own particular department of the subject whenever that impulse was strong upon her. This gave me courage to protest most vehemently that I loved Dora better than I could tell, or anyone believe; that all my friends knew how I loved her; that my aunt, Agnes, Traddles, everyone who knew me, knew how I loved her, and how earnest my love had made me. For the truth of this, I appealed to Traddles. And Traddles, firing up as if he were plunging into a Parliamentary Debate, really did come out nobly: confirming me in good round terms, and in a plain sensible practical manner, that evidently made a favourable impression. No era que me hubieran animado positivamente; pero me parecía observar que las dos hermanitas, y sobre todo miss Lavinia, se complacían con aquella cuestión de interés doméstico y que trataban de sacar el mayor partido posible de ella y de hacerlo durar cuanto pudieran, lo que me daba buenas esperanzas. Me parecía que a miss Lavinia le entusiasmaba la idea de manejar a dos jóvenes enamorados como Dora y yo, y que a su hermana casi le complacía tanto el verla manejarnos, permitiéndose de vez en cuando disertar sobre la parte de la cuestión que se había reservado. Esto me animó a declarar con el mayor calor que amaba a Dora más de lo que podía expresarse ni creerse; que todos mis amigos sabían cómo la amaba; que mi tía, Agnes, Traddles, todos los que me conocían sabían cómo me había vuelto de formal aquel amor. Acudí al testimonio de Traddles. Y Traddles se lanzó en un verdadero debate parlamentario, viniendo noblemente en mi ayuda; es evidente que sus palabras sencillas y sensatas produjeron una impresión favorable.
′I speak, if I may presume to say so, as one who has some little experience of such things,′ said Traddles, ′being myself engaged to a young lady—one of ten, down in Devonshire—and seeing no probability, at present, of our engagement coming to a termination.′ -Si me permiten decirlo, tengo alguna experiencia en esta materia --dijo Traddles-, pues estoy prometido a una joven (la mayor de diez hermanas, en Devonshire); y es más, no hay ninguna probabilidad de que podamos realizar nuestras esperanzas en mucho tiempo.
′You may be able to confirm what I have said, Mr. Traddles,′ observed Miss Lavinia, evidently taking a new interest in him, ′of the affection that is modest and retiring; that waits and waits?′ -Entonces estará usted de acuerdo con lo que yo he dicho -replicó miss Lavinia (a quien evidentemente inspiró desde aquel momento un interés nuevo)- sobre el afecto, modesto y silencioso, que sabe esperar, esperar siempre. 
′Entirely, ma′am,′ said Traddles. -Por completo, señora -dijo Traddles.
Miss Clarissa looked at Miss Lavinia, and shook her head gravely. Miss Lavinia looked consciously at Miss Clarissa, and heaved a little sigh. ′Sister Lavinia,′ said Miss Clarissa, ′take my smelling-bottle.′ Miss Clarissa miró a miss Lavinia con un movimiento de cabeza lleno de gravedad. Miss Lavinia miró a miss Clarissa con una expresión sentimental y lanzando un ligero suspiro. -Hermana Lavinia -dijo miss Clarissa-, toma mi frasco de sales.
Miss Lavinia revived herself with a few whiffs of aromatic vinegar—Traddles and I looking on with great solicitude the while; and then went on to say, rather faintly: Miss Lavinia se reconfortó con las sales de su hermana y después continuó, con voz más débil, mientras Traddles y yo la mirábamos solícitos.
′My sister and myself have been in great doubt, Mr. Traddles, what course we ought to take in reference to the likings, or imaginary likings, of such very young people as your friend Mr. Copperfield and our niece.′ -Hemos tenido muchas dudas mi hermana y yo, míster Traddles, sobre lo que convendría hacer respecto al afecto, o al menos al afecto supuesto, de dos niños como su amigo Copperfield y nuestra sobrina.
′Our brother Francis′s child,′ remarked Miss Clarissa. ′If our brother Francis′s wife had found it convenient in her lifetime (though she had an unquestionable right to act as she thought best) to invite the family to her dinner-table, we might have known our brother Francis′s child better at the present moment. Sister Lavinia, proceed.′ -La hija de nuestro hermano Francis - hizo observar miss Clarissa-. Si la mujer de nuestro hermano Francis hubiera juzgado conveniente (aunque tenía derecho para obrar como quisiera) el invitar a la familia a comer a su casa, hoy conoceríamos mejor a la hija de nuestro hermano Francis. Hermana Lavinia, continúa.
Miss Lavinia turned my letter, so as to bring the superscription towards herself, and referred through her eye-glass to some orderly-looking notes she had made on that part of it. Miss Lavinia dio la vuelta a mi carta para mirar la dirección, y después recorrió con sus lentes algunas notas bien alineadas que había escrito allí.
′It seems to us,′ said she, ′prudent, Mr. Traddles, to bring these feelings to the test of our own observation. At present we know nothing of them, and are not in a situation to judge how much reality there may be in them. Therefore we are inclined so far to accede to Mr. Copperfield′s proposal, as to admit his visits here.′ -Nos parece prudente, míster Traddles --dijo-, el juzgar por nosotras mismas la profundidad de estos sentimientos. De momento no sabemos ni podemos saber cómo son realmente, y todo lo que creemos poder hacer es autorizar a míster Copperfield para que venga a vernos.
′I shall never, dear ladies,′ I exclaimed, relieved of an immense load of apprehension, ′forget your kindness!′ -¡Nunca podré olvidar su bondad! -exclamé entusiasmado, con el corazón libre de un gran peso.
′But,′ pursued Miss Lavinia,—′but, we would prefer to regard those visits, Mr. Traddles, as made, at present, to us. We must guard ourselves from recognizing any positive engagement between Mr. Copperfield and our niece, until we have had an opportunity—′ -Pero por ahora -repuso miss Lavinia- deseamos que estas visitas sean para nosotras, míster Traddles. No queremos sancionar ningún compromiso serio entre míster Copperfield y nuestra sobrina antes de haber tenido la ocasión...
′Until YOU have had an opportunity, sister Lavinia,′ said Miss Clarissa. -Antes de que tú hayas tenido la ocasión, hermana Lavinia -dijo miss Clarissa.
′Be it so,′ assented Miss Lavinia, with a sigh—′until I have had an opportunity of observing them.′ -Está bien --dijo miss Lavinia con un suspiro--; antes de haber tenido yo ocasión de juzgar.
′Copperfield,′ said Traddles, turning to me, ′you feel, I am sure, that nothing could be more reasonable or considerate.′ -Copperfield -dijo Traddles volviéndose hacia mí-, te darás cuenta de que no podría decirse nada más razonable y más sensato.
′Nothing!′ cried I. ′I am deeply sensible of it.′ -No, de verdad --exclamé-, y lo agradezco muchísimo.
′In this position of affairs,′ said Miss Lavinia, again referring to her notes, ′and admitting his visits on this understanding only, we must require from Mr. Copperfield a distinct assurance, on his word of honour, that no communication of any kind shall take place between him and our niece without our knowledge. That no project whatever shall be entertained with regard to our niece, without being first submitted to us—′ ′To you, sister Lavinia,′ Miss Clarissa interposed. -En el estado actual de las cosas -dijo miss Lavinia, que recurrió de nuevo a sus notas-, y una vez decidido en el plan que autorizamos las visitas de míster Copperfield, le pedimos que nos dé su palabra de honor de que no tendrá con nuestra sobrina ninguna comunicación de ninguna especie sin prevenirnos antes, y que no formará ningún proyecto respecto a nuestra sobrina sin comentárnoslo de antemano... -Sin comentártelo, hermana Lavinia- interrumpió miss Clarissa.
′Be it so, Clarissa!′ assented Miss Lavinia resignedly—′to me—and receiving our concurrence. We must make this a most express and serious stipulation, not to be broken on any account. We wished Mr. Copperfield to be accompanied by some confidential friend today,′ with an inclination of her head towards Traddles, who bowed, ′in order that there might be no doubt or misconception on this subject. If Mr. Copperfield, or if you, Mr. Traddles, feel the least scruple, in giving this promise, I beg you to take time to consider it.′ -Está bien, Clarissa -respondió miss Lavinia en tono resignado-, a mí personalmente... y más débil, mientras Traddles y yo la mirábamos solícitos, sin haber obtenido nuestra aprobación. Hacemos de ello una condición expresa y absoluta, que no debe ser atropellada bajo ningún pretexto. Hemos rogado a míster Copperfield que viniera hoy acompañado de una persona de confianza -se volvió hacia Traddles, al que saludó- con objeto de que no pueda haber dudas ni equívocos sobre este punto. Míster Copperfield, si usted o míster Traddles tiene el menor escrúpulo para hacer esa promesa, le ruego que se tome el tiempo que quiera para reflexionar.
I exclaimed, in a state of high ecstatic fervour, that not a moment′s consideration could be necessary. I bound myself by the required promise, in a most impassioned manner; called upon Traddles to witness it; and denounced myself as the most atrocious of characters if I ever swerved from it in the least degree. En mi entusiasmo, exclamé que no tenía necesidad de reflexionar ni un solo instante. Juré solemnemente y, en el tono más apasionado, apelé al testimonio de Traddles y declaré de antemano que sería el más perverso de los hombres si faltaba en la menor cosa a aquella promesa.
′Stay!′ said Miss Lavinia, holding up her hand; ′we resolved, before we had the pleasure of receiving you two gentlemen, to leave you alone for a quarter of an hour, to consider this point. You will allow us to retire.′ -Espere -dijo miss Lavinia levantando la mano-; antes de tener el gusto de recibirlos habíamos resuelto dejarlos solos un cuarto de hora para que reflexionaran sobre este punto. Permítannos que nos retiremos.
It was in vain for me to say that no consideration was necessary. They persisted in withdrawing for the specified time. Accordingly, these little birds hopped out with great dignity; leaving me to receive the congratulations of Traddles, and to feel as if I were translated to regions of exquisite happiness. Exactly at the expiration of the quarter of an hour, they reappeared with no less dignity than they had disappeared. They had gone rustling away as if their little dresses were made of autumn-leaves: and they came rustling back, in like manner. En vano repetí que no necesitaba reflexionar; ellas insistieron en retirarse durante un cuarto de hora. Los dos pajaritos se fueron saltando con dignidad y nos quedamos solos: yo, transportado a las regiones más deliciosas, y Traddles sin dejar de felicitarme. Al cabo de un cuarto de hora, ni más ni menos, reaparecieron, siempre con la misma dignidad. A su salida, el roce de sus trajes había hecho un ligero ruido, como si estuvieran hechos de hojas secas, y cuando volvieron se oyó el mismo rumor.
I then bound myself once more to the prescribed conditions. Prometí de nuevo observar fielmente la prescripción.
′Sister Clarissa,′ said Miss Lavinia, ′the rest is with you.′ -Hermana Clarissa -dijo miss Lavinia-, el resto es cosa tuya.
Miss Clarissa, unfolding her arms for the first time, took the notes and glanced at them. Miss Clarissa dejó por primera vez de tener los brazos cruzados, para coger sus notas y mirarlas.
′We shall be happy,′ said Miss Clarissa, ′to see Mr. Copperfield to dinner, every Sunday, if it should suit his convenience. Our hour is three.′ -Tendremos mucho gusto --dijo miss Clarissa- en que míster Copperfield venga a comer con nosotros todos los domingos, si le parece bien. Nuestra hora es las tres.
I bowed. Yo saludé.
′In the course of the week,′ said Miss Clarissa, ′we shall be happy to see Mr. Copperfield to tea. Our hour is half-past six.′ -Y en el transcurso de la semana -continuó miss Clarissa- estaremos encantadas si míster Copperfield viene a tomar el té con nosotras. Nuestra hora es las seis y media.
I bowed again. Saludé de nuevo.
′Twice in the week,′ said Miss Clarissa, ′but, as a rule, not oftener.′ -Dos veces por semana es la regla; más a menudo, no.
I bowed again. Saludé de nuevo.
′Miss Trotwood,′ said Miss Clarissa, ′mentioned in Mr. Copperfield′s letter, will perhaps call upon us. When visiting is better for the happiness of all parties, we are glad to receive visits, and return them. When it is better for the happiness of all parties that no visiting should take place, (as in the case of our brother Francis, and his establishment) that is quite different.′ -Miss Trotwood, a quien míster Copperfield menciona en su carta --dijo miss Clarissa-, quizá venga a vernos. Cuando las visitas son útiles en interés de ambas partes estamos encantadas de recibirlas y de devolverlas. Pero cuando en interés de las diferentes partes vale más que no se hagan (como nos ha ocurrido con mi hermano Francis y su familia), entonces es completamente distinto.
I intimated that my aunt would be proud and delighted to make their acquaintance; though I must say I was not quite sure of their getting on very satisfactorily together. The conditions being now closed, I expressed my acknowledgements in the warmest manner; and, taking the hand, first of Miss Clarissa, and then of Miss Lavinia, pressed it, in each case, to my lips. Aseguré que mi tía estaría encantada de conocerlas, aunque debo confesar que no estaba muy seguro de que estuvieran siempre en buena armonía. Como ya estaban todas las condiciones bien claras, expresé con calor mi agradecimiento, y cogiendo la mano primero a miss Clarissa y después a miss Lavinia las llevé a mis labios.
Miss Lavinia then arose, and begging Mr. Traddles to excuse us for a minute, requested me to follow her. I obeyed, all in a tremble, and was conducted into another room. There I found my blessed darling stopping her ears behind the door, with her dear little face against the wall; and Jip in the plate-warmer with his head tied up in a towel. Miss Lavinia se levantó entonces, y rogando a míster Traddles que nos esperase un momento, me rogó que la siguiera. Obedecí temblando y me condujo a otra habitación. Allí encontré a mi adorada Dora al lado de la puerta, con la cara contra la pared, y a Jip encerrado en el aparador, con la cabeza envuelta en una servilleta.
Oh! How beautiful she was in her black frock, and how she sobbed and cried at first, and wouldn′t come out from behind the door! How fond we were of one another, when she did come out at last; and what a state of bliss I was in, when we took Jip out of the plate-warmer, and restored him to the light, sneezing very much, and were all three reunited! ¡Oh qué bonita estaba con su traje de luto! ¡Cómo lloraba y qué trabajo me costó sacarla de su rincón! ¡Y qué dichosos nos sentimos cuando se decidió! ¡Qué alegría sacar a Jip de su encierro y encontramos los tres reunidos!
′My dearest Dora! Now, indeed, my own for ever!′ -Mi querida Dora, ¡ahora eres mía para siempre!
′Oh, DON′T!′ pleaded Dora. ′Please!′ -Déjame --dijo Dora en tono suplicante-, te lo ruego.
′Are you not my own for ever, Dora?′ -¿No eres ya mía para siempre?
′Oh yes, of course I am!′ cried Dora, ′but I am so frightened!′ -Sí, ya lo creo -exclamó Dora- ¡Pero tengo tanto miedo!
′Frightened, my own?′ -¿Miedo, querida mía?
′Oh yes! I don′t like him,′ said Dora. ′Why don′t he go?′ -Sí, no me gusta -dijo Dora- ¿Por qué no se va?
′Who, my life?′ -¿Pero quién, tesoro mío?
′Your friend,′ said Dora. ′It isn′t any business of his. What a stupid he must be!′ -Tu amigo -dijo Dora- ¿A él qué le importa? ¡Qué estúpido es!
′My love!′ (There never was anything so coaxing as her childish ways.) ′He is the best creature!′ -Amor mío (nunca la he visto más seductora en sus movimientos infantiles), ¡si es el mejor muchacho del mundo!
′Oh, but we don′t want any best creatures!′ pouted Dora. -¡Pero no necesitamos para nada a un buen muchacho! -dijo con un mohín.
′My dear,′ I argued, ′you will soon know him well, and like him of all things. And here is my aunt coming soon; and you′ll like her of all things too, when you know her.′ -Querida mía -repliqué-, pronto le conocerás y le querrás mucho. Mi tía también va a venir a verte, y estoy seguro de que la querrás con todo tu corazón.
′No, please don′t bring her!′ said Dora, giving me a horrified little kiss, and folding her hands. ′Don′t. I know she′s a naughty, mischief-making old thing! Don′t let her come here, Doady!′ which was a corruption of David. -¡Oh, no; no la traigas! -dijo Dora dándome un besito muy asustada y juntando las manos-. ¡Sé que es una viejecilla mala! No me la traigas, mi querido Doady. (Era un diminutivo cariñoso de David.)
Remonstrance was of no use, then; so I laughed, and admired, and was very much in love and very happy; and she showed me Jip′s new trick of standing on his hind legs in a corner—which he did for about the space of a flash of lightning, and then fell down—and I don′t know how long I should have stayed there, oblivious of Traddles, if Miss Lavinia had not come in to take me away. Miss Lavinia was very fond of Dora (she told me Dora was exactly like what she had been herself at her age—she must have altered a good deal), and she treated Dora just as if she had been a toy. I wanted to persuade Dora to come and see Traddles, but on my proposing it she ran off to her own room and locked herself in; so I went to Traddles without her, and walked away with him on air. El predicarle no hubiera servido de nada, y me eché a reír, contemplándola con amor. ¡Qué felicidad! Me enseñó lo bien que sabía Jip estarse en un rincón en dos patas; es verdad que permanecía lo que dura un relámpago y volvía a caer. En fin, no sé el tiempo que hubiera podido pasar así, sin acordarme lo más mínimo de Traddles, si miss Lavinia no hubiera venido a buscarme. Miss Lavinia adoraba a Dora (me dijo que Dora era su vivo retrato de cuando era joven. ¡Cómo debía haber cambiado!) y la trataba como un juguete. Quise convencer a Dora de que saliera a ver a Traddles; pero en cuanto se lo propuse corrió a encerrarse en su habitación; por lo tanto, fui sin ella a reunirme con Traddles, y nos marchamos juntos.
′Nothing could be more satisfactory,′ said Traddles; ′and they are very agreeable old ladies, I am sure. I shouldn′t be at all surprised if you were to be married years before me, Copperfield.′ -No podía haberte salido mejor -dijo Traddles-, y estas dos señoras son muy amables. No me extrañaría nada que te casaras muchos años antes que yo, Copperfield.
′Does your Sophy play on any instrument, Traddles?′ I inquired, in the pride of my heart. -¿Tu Sofía toca algún instrumento, Traddles? -pregunté con orgullo en mi corazón.
′She knows enough of the piano to teach it to her little sisters,′ said Traddles. -El piano lo sabe tocar lo bastante para enseñar a sus hermanitas --dijo Traddles.
′Does she sing at all?′ I asked. -¿Y canta?
′Why, she sings ballads, sometimes, to freshen up the others a little when they′re out of spirits,′ said Traddles. ′Nothing scientific.′ -Algunas veces canta baladas para divertir a las otras cuando no están de buen humor -dijo Traddles-; pero nada extraordinario.
′She doesn′t sing to the guitar?′ said I. -¿Y no canta acompañándose de la guitarra?
′Oh dear no!′ said Traddles. -¡No, Dios mío!
′Paint at all?′ -¿Y pinta? .
′Not at all,′ said Traddles. -No -dijo Traddles.
I promised Traddles that he should hear Dora sing, and see some of her flower-painting. He said he should like it very much, and we went home arm in arm in great good humour and delight. I encouraged him to talk about Sophy, on the way; which he did with a loving reliance on her that I very much admired. I compared her in my mind with Dora, with considerable inward satisfaction; but I candidly admitted to myself that she seemed to be an excellent kind of girl for Traddles, too. Le prometí que oiría cantar a Dora y que le enseñaría las flores que pintaba. Me dijo que le encantaría, y volvimos del brazo muy felices. Yo le animaba a que me hablara de Sofía, y lo hacía con tanta ternura y confianza en ella, que me conmovía. La comparaba con Dora en el fondo de mi corazón, con gran satisfacción para mi amor propio; pero reconociendo que sería una excelente mujer para Traddles.
Of course my aunt was immediately made acquainted with the successful issue of the conference, and with all that had been said and done in the course of it. She was happy to see me so happy, and promised to call on Dora′s aunts without loss of time. But she took such a long walk up and down our rooms that night, while I was writing to Agnes, that I began to think she meant to walk till morning. Como es natural, le conté inmediatamente a mi tía el dichoso resultado de nuestra charla y la puse al corriente de todos los detalles. Se sentía feliz al verme tan dichoso, y me prometió ir cuanto antes a ver a las tías de Dora. Pero aque lla noche, mientras yo escribía a Agnes, se estuvo paseando tanto rato de arriba abajo por la habitación, que estuve a punto de creer que pensaba seguir así hasta la mañana siguiente.
My letter to Agnes was a fervent and grateful one, narrating all the good effects that had resulted from my following her advice. She wrote, by return of post, to me. Her letter was hopeful, earnest, and cheerful. She was always cheerful from that time. Mi carta a Agnes, llena de afecto y reconocimiento, le detallaba todos los buenos resultados de los consejos que me había dado. Me contestó a vuelta de correo con una carta llena de confianza, razonable y contenta; desde aquel día siempre me demostró la misma alegría.
I had my hands more full than ever, now. My daily journeys to Highgate considered, Putney was a long way off; and I naturally wanted to go there as often as I could. The proposed tea-drinkings being quite impracticable, I compounded with Miss Lavinia for permission to visit every Saturday afternoon, without detriment to my privileged Sundays. So, the close of every week was a delicious time for me; and I got through the rest of the week by looking forward to it. Tenía más trabajo que nunca; pero aunque Putney estaba lejos de Highgate, donde tenía que ir todos los días, iba todo lo que podía. Como no me era posible ir a casa de Dora a la hora del té, obtuve por medio de miss Lavinia el permiso para ir todos los sábados después de comer, sin que eso impidiera mi visita del domingo. Por lo tanto, cada semana terminaba con dos días dichosos, y los demás se pasaban dulcemente en espera de aquellos.
I was wonderfully relieved to find that my aunt and Dora′s aunts rubbed on, all things considered, much more smoothly than I could have expected. My aunt made her promised visit within a few days of the conference; and within a few more days, Dora′s aunts called upon her, in due state and form. Similar but more friendly exchanges took place afterwards, usually at intervals of three or four weeks. I know that my aunt distressed Dora′s aunts very much, by utterly setting at naught the dignity of fly-conveyance, and walking out to Putney at extraordinary times, as shortly after breakfast or just before tea; likewise by wearing her bonnet in any manner that happened to be comfortable to her head, without at all deferring to the prejudices of civilization on that subject. But Dora′s aunts soon agreed to regard my aunt as an eccentric and somewhat masculine lady, with a strong understanding; and although my aunt occasionally ruffled the feathers of Dora′s aunts, by expressing heretical opinions on various points of ceremony, she loved me too well not to sacrifice some of her little peculiarities to the general harmony. Me tranquilizó mucho que mi tía y las tías de Dora se entendieron mutuamente mucho mejor de lo que yo había esperado. Mi tía hizo su visita pocos días después de la charla, y unos días más tarde las tías de Dora se la devolvieron en toda regla y con gran ceremonia. Aquellas visitas se renovaron, pero de un modo más amistoso, cada tres semanas. Mi tía revolucionaba todas las ideas de las tías de Dora con su desdén por los coches de alquiler, que no utilizaba nunca, prefiriendo ir a pie hasta Putney, y por su modo despreocupado de juzgar los prejuicios de la civilización, llegando a horas intempestivas, un momento después del desayuno, o un momento antes del té, o porque se ponía el sombrero del modo más extraño, con el pretexto de que le resultaba más cómodo. Pero pronto se acostumbraron las tías de Dora a considerar a mi tía como una persona extravagante, algo hombruna, pero dotada de gran inteligencia; y aunque mi tía expresaba a veces sobre ciertos convencional ismos sociales opiniones heréticas, que aturdían a las tías de Dora, sin embargo, me quería demasiado para no sacrificar por la tranquilidad general algunas de sus singularidades.
The only member of our small society who positively refused to adapt himself to circumstances, was Jip. He never saw my aunt without immediately displaying every tooth in his head, retiring under a chair, and growling incessantly: with now and then a doleful howl, as if she really were too much for his feelings. All kinds of treatment were tried with him, coaxing, scolding, slapping, bringing him to Buckingham Street (where he instantly dashed at the two cats, to the terror of all beholders); but he never could prevail upon himself to bear my aunt′s society. He would sometimes think he had got the better of his objection, and be amiable for a few minutes; and then would put up his snub nose, and howl to that extent, that there was nothing for it but to blind him and put him in the plate-warmer. At length, Dora regularly muffled him in a towel and shut him up there, whenever my aunt was reported at the door. El único miembro de nuestra pequeña sociedad que se negó positivamente a adaptarse a las circunstancias fue Jip. No podía ver a mi tía sin meterse debajo de una silla, rechinando los dientes y gruñendo sin descanso. De vez en cuando dejaba oír un aullido lamentable, como si le pusiera verdaderamente nervioso. Se intentó por todos los medios, acariciándole, regañándole, pegándole, llevándole a Buckingham Street, donde se lanzó inmediatamente contra los dos gatos; pero no se logró que soportara la presencia de mi tía. A veces creíamos que había terminado por vencer su antipatía y llegaba a estar amable un momento; pero pronto encogía su naricilla y aullaba tan fuerte, que había que meterle en el aparador para que no pudiera verla. Por fin Dora decidió tener preparado un paño donde envolverle para meterle en el aparador en el momento en que llegaba mi tía.
One thing troubled me much, after we had fallen into this quiet train. It was, that Dora seemed by one consent to be regarded like a pretty toy or plaything. My aunt, with whom she gradually became familiar, always called her Little Blossom; and the pleasure of Miss Lavinia′s life was to wait upon her, curl her hair, make ornaments for her, and treat her like a pet child. What Miss Lavinia did, her sister did as a matter of course. It was very odd to me; but they all seemed to treat Dora, in her degree, much as Dora treated Jip in his. Una cosa me inquietaba mucho, aun en medio de aquella vida tan dulce, y era que Dora parecía pasar a los ojos de todo el mundo por un juguete encantador. Mi tía, con la que se había familiarizado poco a poco, la llamaba su «Capullito», y miss Lavinia no sabía qué hacer más que cuidarla, hacerle los bucles, adornarla y la tratarla como a una niña mimada. Todo lo que miss Lavinia hacía lo hacía también por su parte su hermana. Y aquello me parecía singular, pues todo el mundo, hasta cierto punto, parecía tratar a Dora casi como Dora trataba a Jip.
I made up my mind to speak to Dora about this; and one day when we were out walking (for we were licensed by Miss Lavinia, after a while, to go out walking by ourselves), I said to her that I wished she could get them to behave towards her differently. Un día que estábamos solos (pues miss Lavinia, al poco tiempo, nos dejaba pasear solos) me decidí a hablarle de ello, y le dije que me gustaría que convenciese a todos de que la trataran de otro modo.
′Because you know, my darling,′ I remonstrated, ′you are not a child.′ -Porque, querida mía, ya no eres una niña.
′There!′ said Dora. ′Now you′re going to be cross!′ -Vamos -dijo Dora-, ¿es que vas a volverte gruñón?
′Cross, my love?′ -¿Gruñón, amor mío?
′I am sure they′re very kind to me,′ said Dora, ′and I am very happy—′ -A mí me parece que todos son muy buenos para mí -dijo Dora-, y soy muy dichosa.
′Well! But my dearest life!′ said I, ′you might be very happy, and yet be treated rationally.′ -Está muy bien; pero, querida mía, no serías menos dichosa si te trataran como persona razonable.
Dora gave me a reproachful look—the prettiest look!—and then began to sob, saying, if I didn′t like her, why had I ever wanted so much to be engaged to her? And why didn′t I go away, now, if I couldn′t bear her? Dora me lanzó una mirada de reproche. ¡Qué mirada tan encantadora! Y se puso a sollozar, diciendo que «puesto que no la quería, no sabía por qué había deseado tanto ser su novio, y que puesto que no podía soportarla, lo mejor que podía hacer era marcharme».
What could I do, but kiss away her tears, and tell her how I doted on her, after that! ¡Qué otra cosa podía hacer sino besar sus hermosos ojos, llenos de lágrimas, y repetirle que la quería!
′I am sure I am very affectionate,′ said Dora; ′you oughtn′t to be cruel to me, Doady!′ -¡Ser así conmigo, que te quiero tanto! -dijo Dora-. ¡No debías de ser así de cruel conmigo, Doady!
′Cruel, my precious love! As if I would—or could—be cruel to you, for the world!′ -¿Cruel, amor mío? ¡Como si yo pudiera ser cruel contigo! -
′Then don′t find fault with me,′ said Dora, making a rosebud of her mouth; ′and I′ll be good.′ Entonces no me regañes -dijo Dora con aquel mohín que hacía de su boca un capullo- y seré buena.
I was charmed by her presently asking me, of her own accord, to give her that cookery-book I had once spoken of, and to show her how to keep accounts as I had once promised I would. I brought the volume with me on my next visit (I got it prettily bound, first, to make it look less dry and more inviting); and as we strolled about the Common, I showed her an old housekeeping-book of my aunt′s, and gave her a set of tablets, and a pretty little pencil-case and box of leads, to practise housekeeping with. Un instante después estaba encantado al ver que ella misma me pedía el libro de cocina de que le había hablado una vez, y que deseaba te enseñara a llevar las cuentas, como también le había prometido. A la próxima visita le llevé el libro, muy bien encuadernado, para que lo encontrara más simpático, y mientras nos paseábamos por el campo le enseñé también un antiguo cuaderno de cuentas de mi tía, y le di un carné y un lápiz muy bonito, con su caja de minas de plomo, para que fuera ensayándose en las cuentas.
But the cookery-book made Dora′s head ache, and the figures made her cry. They wouldn′t add up, she said. So she rubbed them out, and drew little nosegays and likenesses of me and Jip, all over the tablets. Pero el libro de cocina le daba dolor de cabeza y las cifras te hicieron llorar. No querían sumarse, según decía, por lo que las borró todas, y dibujó en su lugar en el cuadernito ramos de fores y el retrato de Jip y el mío.
Then I playfully tried verbal instruction in domestic matters, as we walked about on a Saturday afternoon. Sometimes, for example, when we passed a butcher′s shop, I would say: Después traté de darle algunos consejos, en nuestros paseos del sábado, sobre las cosas de la casa. Por ejemplo: si pasábamos por delante de la carnicería le decía:
′Now suppose, my pet, that we were married, and you were going to buy a shoulder of mutton for dinner, would you know how to buy it?′ -Veamos, pequeña: si estuviéramos casados y tuvieras que comprar una pierna de cordero para nuestro almuerzo, ¿sabrías comprarla?
My pretty little Dora′s face would fall, and she would make her mouth into a bud again, as if she would very much prefer to shut mine with a kiss. El lindo rostro de Dora se alargaba, y adelantaba los labios como si prefiriera cerrar los míos con uno de sus besos.
′Would you know how to buy it, my darling?′ I would repeat, perhaps, if I were very inflexible. -¿Sabrías comprarla, pequeña? -repetía yo, inflexible.
Dora would think a little, and then reply, perhaps, with great triumph: Dora reflexionaba un momento y después me contestaba triunfante:
′Why, the butcher would know how to sell it, and what need I know? Oh, you silly boy!′ -Pero el carnicero ya sabría vendérmela, ¿qué más da? ¡Oh Doady, qué tonto eres!
So, when I once asked Dora, with an eye to the cookery-book, what she would do, if we were married, and I were to say I should like a nice Irish stew, she replied that she would tell the servant to make it; and then clapped her little hands together across my arm, and laughed in such a charming manner that she was more delightful than ever. En otra ocasión le preguntaba a Dora, mirando el libro de cocina, lo que haría si estuviéramos casados y yo le pidiera para comer uno de aquellos ricos asados a la irlandesa. Y ella me respondió que le diría a la cocinera: « Haga usted un asado». Después palmoteó y se agarró de mi brazo riendo, más encantadora que nunca.
Consequently, the principal use to which the cookery-book was devoted, was being put down in the corner for Jip to stand upon. But Dora was so pleased, when she had trained him to stand upon it without offering to come off, and at the same time to hold the pencil-case in his mouth, that I was very glad I had bought it. En consecuencia, el libro de cocina sólo sirvió para ponerlo en un rincón y que Jip se subiera en dos patas encima. Pero Dora estuvo tan contenta el día que consiguió que Jip permaneciera allí un momento con el lápiz entre los dientes, que no me arrepentí de haberlo comprado.
And we fell back on the guitar-case, and the flower-painting, and the songs about never leaving off dancing, Ta ra la! and were as happy as the week was long. I occasionally wished I could venture to hint to Miss Lavinia, that she treated the darling of my heart a little too much like a plaything; and I sometimes awoke, as it were, wondering to find that I had fallen into the general fault, and treated her like a plaything too—but not often. Volvimos a la guitarra, a los ramos de flores, a las canciones sobre el placer de bailar siempre, tralalá, y toda la semana se pasaba en regocijos. De vez en cuando, me hubiera gustado poder insinuar a miss Lavinia que trataba, dema siado, como un juguete a mi querida Dora; pero terminé por confesarme que también a veces yo caía en falta y la trataba como los demás, aunque no era muy a menudo.