"Emma"

CHAPTER 11.

CAPÍTULO XI

I BEGIN LIFE ON MY OWN ACCOUNT, AND DON′T LIKE IT

EMPIEZO A VIVIR POR MI CUENTA, Y NO ME GUSTA

I know enough of the world now, to have almost lost the capacity of being much surprised by anything; but it is matter of some surprise to me, even now, that I can have been so easily thrown away at such an age. A child of excellent abilities, and with strong powers of observation, quick, eager, delicate, and soon hurt bodily or mentally, it seems wonderful to me that nobody should have made any sign in my behalf. But none was made; and I became, at ten years old, a little labouring hind in the service of Murdstone and Grinby. Conozco el mundo lo bastante para haber perdido casi la facultad de sorprenderme demasiado; sin embargo, aún ahora es motivo de sorpresa para mí el pensar cómo pude ser abandonado de aquel modo a semejante edad. Un niño de excelentes facultades, observador, ardiente, afectuoso, delicado de cuerpo y de espíritu .... parece inverosímil que no hubiera nadie que interviniera en favor mío. Pero nadie hizo nada, y a los diez años entré de obrero al servicio de la casa Murdstone y Grimby.
Murdstone and Grinby′s warehouse was at the waterside. It was down in Blackfriars. Modern improvements have altered the place; but it was the last house at the bottom of a narrow street, curving down hill to the river, with some stairs at the end, where people took boat. It was a crazy old house with a wharf of its own, abutting on the water when the tide was in, and on the mud when the tide was out, and literally overrun with rats. Its panelled rooms, discoloured with the dirt and smoke of a hundred years, I dare say; its decaying floors and staircase; the squeaking and scuffling of the old grey rats down in the cellars; and the dirt and rottenness of the place; are things, not of many years ago, in my mind, but of the present instant. They are all before me, just as they were in the evil hour when I went among them for the first time, with my trembling hand in Mr. Quinion′s. Los almacenes de Murdstone y Grimby estaban situados muy cerca del río en Blackfriars. Ahora han mejorado y modernizado aquello; pero entonces era la última casa de una ca lleja estrecha que iba a parar al río, con unos escalones al final que servían de embarcadero. Era una casa vieja, que por un lado daba al agua cuando estaba la marea alta y al fango cuando bajaba. Materialmente, estaba invadida por las ratas. Las habitaciones cubiertas de molduras descoloridas por el humo y el polvo de más de cien años, los escalones medio de rrengados, los gritos y luchas de las ratas grises en las madrigueras, el verdín y la suciedad de todo, lo conservo en mi espíritu, no como cosa de hace muchos años, sino de ahora mismo. Todo lo veo igual que lo veía en la hora fatal en que llegué aquel día con mi mano temblorosa en la de mister Quinion.
Murdstone and Grinby′s trade was among a good many kinds of people, but an important branch of it was the supply of wines and spirits to certain packet ships. I forget now where they chiefly went, but I think there were some among them that made voyages both to the East and West Indies. I know that a great many empty bottles were one of the consequences of this traffic, and that certain men and boys were employed to examine them against the light, and reject those that were flawed, and to rinse and wash them. When the empty bottles ran short, there were labels to be pasted on full ones, or corks to be fitted to them, or seals to be put upon the corks, or finished bottles to be packed in casks. All this work was my work, and of the boys employed upon it I was one. La casa Murdstone y Grimby se dedicaba a negocios muy distintos; pero una de sus ramas de mayor importancia era el abastecer de vinos y licores a ciertas compañías de barcos. He olvidado ahora cuáles eran, pero creo que tenían varios que iban a las Indias Orientales y a las Occidentales, y sé que una gran cantidad de botellas vacías eran la consecuencia de aquel tráfico, y que cierto número de hombres y muchachos estábamos dedicados a examinarlas al trasluz, a tirar las que estaban agrietadas y a limpiar bien las otras. Cuando ya no quedaban botellas vacías, había que poner etiquetas a las llenas, cortar corchos para ellas, cerrarlas y meterlas en cajones. A este trabajo me dedicaron con otros varios chicos.
There were three or four of us, counting me. My working place was established in a corner of the warehouse, where Mr. Quinion could see me, when he chose to stand up on the bottom rail of his stool in the counting-house, and look at me through a window above the desk. Hither, on the first morning of my so auspiciously beginning life on my own account, the oldest of the regular boys was summoned to show me my business. His name was Mick Walker, and he wore a ragged apron and a paper cap. He informed me that his father was a bargeman, and walked, in a black velvet head-dress, in the Lord Mayor′s Show. He also informed me that our principal associate would be another boy whom he introduced by the—to me—extraordinary name of Mealy Potatoes. I discovered, however, that this youth had not been christened by that name, but that it had been bestowed upon him in the warehouse, on account of his complexion, which was pale or mealy. Mealy′s father was a waterman, who had the additional distinction of being a fireman, and was engaged as such at one of the large theatres; where some young relation of Mealy′s—I think his little sister—did Imps in the Pantomimes. Éramos tres o cuatro, contándome a mí. Me habían colocado en un rincón del almacén, donde míster Quinion podía desde su despacho verme a través de una ventana. Allí, el primer día que debía empezar la vida por mi propia cuenta me enviaron al mayor de mis compañeros para enseñarme lo que debía hacer. Se llamaba Mick Walker; llevaba un delantal rojo y un gorro de papel. Me contó que su padre era barquero y que se paseaba con un traje de terciopelo negro al paso del cortejo del lord mayor. También me dijo que teníamos otro compañero, a quien me presentó con el extraño nombre de Fécula de patata. Más tarde descubrí que aque l no era su nombre; pero que se lo habían puesto a causa de la semejanza del color pálido de su rostro con el de la patata. El padre de Fécula era aguador, y unía a esta profesión la distinción de ser bombero en uno de los teatros más grandes de la ciudad, donde otros parientes de Fécula, creo que su hermana, hacía de enano en las pantomimas.
No words can express the secret agony of my soul as I sunk into this companionship; compared these henceforth everyday associates with those of my happier childhood—not to say with Steerforth, Traddles, and the rest of those boys; and felt my hopes of growing up to be a learned and distinguished man, crushed in my bosom. The deep remembrance of the sense I had, of being utterly without hope now; of the shame I felt in my position; of the misery it was to my young heart to believe that day by day what I had learned, and thought, and delighted in, and raised my fancy and my emulation up by, would pass away from me, little by little, never to be brought back any more; cannot be written. As often as Mick Walker went away in the course of that forenoon, I mingled my tears with the water in which I was washing the bottles; and sobbed as if there were a flaw in my own breast, and it were in danger of bursting. Ninguna palabra puede expresar la secreta agonía de mi alma al verme entre aquellos compañeros, cuando los comparaba con los compañeros de mi dichosa infancia, sin contar con Steerforth, Traddles y el resto de los chicos. Nada puede expresar lo que sentía viendo desvanecidas todas mis esperanzas de ser algún día un hombre distinguido y culto. El profundo sentimiento de mi abandono, la vergÜenza de mi situación, la desesperación de mi joven corazón al creer que día tras día todo lo que había aprendido y pensado y deseado y todo lo que había excitado mi imaginación y mi inteligencia se borraría poco a poco para no volver nunca. No puede describirse. Tan pronto como Mick Walker se iba, yo mezclaba mis lágrimas con el agua de fregar las botellas, y sollozaba como si también hubiera una grieta en mi pecho y estuviera en peligro de estallar.
The counting-house clock was at half past twelve, and there was general preparation for going to dinner, when Mr. Quinion tapped at the counting-house window, and beckoned to me to go in. I went in, and found there a stoutish, middle-aged person, in a brown surtout and black tights and shoes, with no more hair upon his head (which was a large one, and very shining) than there is upon an egg, and with a very extensive face, which he turned full upon me. His clothes were shabby, but he had an imposing shirt-collar on. He carried a jaunty sort of a stick, with a large pair of rusty tassels to it; and a quizzing-glass hung outside his coat,—for ornament, I afterwards found, as he very seldom looked through it, and couldn′t see anything when he did. El reloj del almacén marcaba las doce y media y todos se preparaban para irse a comer, cuando míster Quinion dio un golpe en la ventana y me hizo seña de que pasara a verle. Fui, y allí me encontré con un caballero de mediana edad, algo grueso, con americana oscura y pantalón negro, sin más cabellos sobre su cabeza, que era enorme y presentaba una superficie brillante, que los que pueda tener un huevo. Se volvió hacia mí. Su ropa estaba muy raída, pero el cuello de su camisa era imponente. Llevaba una especie de bastón adornado con dos bellotas y unas lentes pendían fuera de su americana; pero más tarde descubrí que eran decorativas, pues no las utilizaba y no veía nada en absoluto si las ponía delante de sus ojos.
′This,′ said Mr. Quinion, in allusion to myself, ′is he.′ -Este es --dijo míster Quinion señalándome.
′This,′ said the stranger, with a certain condescending roll in his voice, and a certain indescribable air of doing something genteel, which impressed me very much, ′is Master Copperfield. I hope I see you well, sir?′ -¿Este -dijo el desconocido con cierta condescendencia en la voz y cierta indescr iptible pretensión de estar haciendo algo muy distinguido, lo que me impresionó- es míster Copperfield? ¿Sigue usted bien?
I said I was very well, and hoped he was. I was sufficiently ill at ease, Heaven knows; but it was not in my nature to complain much at that time of my life, so I said I was very well, and hoped he was. Le dije que estaba muy bien y que esperaba que él también lo estuviera. Estaba bastante mal e incómodo, Dios lo sabe; pero no era natural en mí quejarme en aquella época de mi vida. Así, dije que me encontraba bien y que esperaba que él también lo estuviera.
′I am,′ said the stranger, ′thank Heaven, quite well. I have received a letter from Mr. Murdstone, in which he mentions that he would desire me to receive into an apartment in the rear of my house, which is at present unoccupied—and is, in short, to be let as a—in short,′ said the stranger, with a smile and in a burst of confidence, ′as a bedroom—the young beginner whom I have now the pleasure to—′ and the stranger waved his hand, and settled his chin in his shirt-collar. -Muy bien, muchas gracias -dijo el desconocido- He recibido un a carta de míster Murdstone en la que me dice desearía recibiera en una habitación de mi casa que está ahora desocupada, en una palabra, que está para alquilar -dijo con una sonrisa y en un arranque de confianza - como alcoba, al joven principiante a quien tengo ahora el gusto... Y el desconocido, levantando la mano, metió la barbilla en el cuello de su camisa.
′This is Mr. Micawber,′ said Mr. Quinion to me. -Es míster Micawber -me dijo míster Quinion.
′Ahem!′ said the stranger, ′that is my name.′ -Así es --dijo el desconocido-; ése es mi nombre.
′Mr. Micawber,′ said Mr. Quinion, ′is known to Mr. Murdstone. He takes orders for us on commission, when he can get any. He has been written to by Mr. Murdstone, on the subject of your lodgings, and he will receive you as a lodger.′ -Míster Micawber -dijo míster Quinion-; es cono cido de míster Murdstone y recibe comisiones para nosotros cuando puede. Ahora míster Murdstone le ha escrito sobre tu alojamiento, y te recibirá en su casa.
′My address,′ said Mr. Micawber, ′is Windsor Terrace, City Road. I—in short,′ said Mr. Micawber, with the same genteel air, and in another burst of confidence—′I live there.′ -Mi dirección -dijo míster Micawber --es Windsor Terrace, City Road; en una palabra -añadió con el mismo aire distinguido y en otro arranque de confianza-, vivo allí.
I made him a bow. Le saludé.
′Under the impression,′ said Mr. Micawber, ′that your peregrinations in this metropolis have not as yet been extensive, and that you might have some difficulty in penetrating the arcana of the Modern Babylon in the direction of the City Road,—in short,′ said Mr. Micawber, in another burst of confidence, ′that you might lose yourself—I shall be happy to call this evening, and install you in the knowledge of the nearest way.′ -Bajo la impresión -dijo míster Micawber- de que quizá sus peregrinaciones por esta metrópoli no han sido todavía muy extensa y de que pueda usted encontrar alguna dificultad para penetrar en el arcano de la moderna Babilonia; en resumen -dijo míster Micawber en un nuevo gesto de confianza-: como podría usted perderse, tendré mucho gusto en venir esta noche a buscarle para enseñarle el camino más corto.
I thanked him with all my heart, for it was friendly in him to offer to take that trouble. Le di las gracias de todo corazón por la amistosa molestia que se quería tomar por mí.
′At what hour,′ said Mr. Micawber, ′shall I—′ -¿A qué hora -dijo míster Micawber- podré ...?
′At about eight,′ said Mr. Quinion. -A eso de las ocho --dijo míster Quinion.
′At about eight,′ said Mr. Micawber. ′I beg to wish you good day, Mr. Quinion. I will intrude no longer.′ -Estaré a era hora -dijo míster Micawber-. Le deseo muy buenos días, míster Quinion, y no quiero entretenerle más.
So he put on his hat, and went out with his cane under his arm: very upright, and humming a tune when he was clear of the counting-house. Se puso el sombrero y salió con el bastón debajo del brazo, muy tieso y canturreando en cuanto estuvo fuera de l almacén.
Mr. Quinion then formally engaged me to be as useful as I could in the warehouse of Murdstone and Grinby, at a salary, I think, of six shillings a week. I am not clear whether it was six or seven. I am inclined to believe, from my uncertainty on this head, that it was six at first and seven afterwards. He paid me a week down (from his own pocket, I believe), and I gave Mealy sixpence out of it to get my trunk carried to Windsor Terrace that night: it being too heavy for my strength, small as it was. I paid sixpence more for my dinner, which was a meat pie and a turn at a neighbouring pump; and passed the hour which was allowed for that meal, in walking about the streets. Míster Quinion me aconsejó entonces muy seriamente que trabajara todo lo más posible en la casa, y me dijo que se me pagarían seis chelines por semana (no estoy seguro de si eran seis o siete; mi inseguridad me hace creer que primero debieron de ser seis, y después siete). Me pagó una semana por adelantado (creo que de su bolsillo particular), de lo que di seis peniques a Fécula para que llevara aquella misma noche mi maleta a Windsor Terrace; tan pequeña como era, pesaba demasiado para mis fuerzas. También gasté otros seis peniques en mi almuerzo, que consistió en una empanada de came y un trago de agua en una bomba de la vecindad, y pasé la hora que dejaban libre para las comidas paseando por las calles.
At the appointed time in the evening, Mr. Micawber reappeared. I washed my hands and face, to do the greater honour to his gentility, and we walked to our house, as I suppose I must now call it, together; Mr. Micawber impressing the name of streets, and the shapes of corner houses upon me, as we went along, that I might find my way back, easily, in the morning. Aquella noche, a la hora fijada, apareció mister Micawber. Me lavé la cara y las manos para corresponder a su elegancia, y nos fuimos juntos hacia nuestra casa, como supongo que la llamaré desde ahora. Mister Micawber, durance el camino, me hacía fijarme en los nombres de las calles, en las fachadas de las casas y en las esquinas, para que pudiera encontrar fácilmente el camino a la mañana siguiente.
Arrived at this house in Windsor Terrace (which I noticed was shabby like himself, but also, like himself, made all the show it could), he presented me to Mrs. Micawber, a thin and faded lady, not at all young, who was sitting in the parlour (the first floor was altogether unfurnished, and the blinds were kept down to delude the neighbours), with a baby at her breast. This baby was one of twins; and I may remark here that I hardly ever, in all my experience of the family, saw both the twins detached from Mrs. Micawber at the same time. One of them was always taking refreshment. Llegamos a su casa de Windsor Terrace (que me pareció tan mezquina como él y con sus mismas pretensiones); me presentó a su señora, una mujer delgada y pálida, nada joven ya, que estaba sentada en una habitación (el primer piso estaba ya sin muebles y tenían echados los estores para engañar a los vecinos), dando de mamar a un niño. Este niño era uno de los dos mellizos, y puedo asegurar que nunca en toda mi intimidad con la familia vi a los dos mellizos fuera de los brazos de su madre al mismo tiempo. Uno de ellos siempre tenía que mamar.
There were two other children; Master Micawber, aged about four, and Miss Micawber, aged about three. These, and a dark-complexioned young woman, with a habit of snorting, who was servant to the family, and informed me, before half an hour had expired, that she was ′a Orfling′, and came from St. Luke′s workhouse, in the neighbourhood, completed the establishment. My room was at the top of the house, at the back: a close chamber; stencilled all over with an ornament which my young imagination represented as a blue muffin; and very scantily furnished. También tenían otros dos niños, uno de cua tro años y una niña, todo lo más, de tres. También había en la casa una muchacha muy morena que les servía. Tenía costumbre de resoplar, y me informó antes de media hora de que era huérfana y había salido del orfelinato de San Lucas para ir allí. Mi habitación estaba en el último piso, en la parte de atrás; una habitación pequeña, cubierta de un papel que parecía de obleas azules, y muy escasamente amueblada.
′I never thought,′ said Mrs. Micawber, when she came up, twin and all, to show me the apartment, and sat down to take breath, ′before I was married, when I lived with papa and mama, that I should ever find it necessary to take a lodger. But Mr. Micawber being in difficulties, all considerations of private feeling must give way.′ -Nunca hubiera pensado -dijo mistress Micawber, cuando subió con niño y todo a enseñarme mi habitación, y sentándose para tomar aliento- antes de mi matrimonio, cuando vivía con papá y mamá, que me vería en la necesidad de tomar un huésped. Pero míster Micawber está pa sando por circunstancias tan difíciles, que toda consideración de otro género debe ser desechada.
I said: ′Yes, ma′am.′ Yo dije: -Sí, señora.
′Mr. Micawber′s difficulties are almost overwhelming just at present,′ said Mrs. Micawber; ′and whether it is possible to bring him through them, I don′t know. When I lived at home with papa and mama, I really should have hardly understood what the word meant, in the sense in which I now employ it, but experientia does it,—as papa used to say.′ -Las dificultades de míster Micawber -prosiguió son casi insuperables por ahora, y no sé si conseguirá salir de ellas. Cuando yo vivía con papá y mamá no llegaba a comprender lo que quería decir la palabra pobreza en el sentido en que ahora la empleo; pero la experiencia es maestra, como acostumbraba a decir mi papá.
I cannot satisfy myself whether she told me that Mr. Micawber had been an officer in the Marines, or whether I have imagined it. I only know that I believe to this hour that he WAS in the Marines once upon a time, without knowing why. He was a sort of town traveller for a number of miscellaneous houses, now; but made little or nothing of it, I am afraid. Por más que pienso no consigo recordar si me dijo que míster Micawber había sido oficial de Marina, o si lo inventé yo; únicamente sé que ahora estoy convencido de que en alguna época había pertenecido a la Marina, pero no sé por qué. En aquella época era viajante de diferentes casas de co mercio; pero me temo que aquello le daba muy poco o casi nada.
′If Mr. Micawber′s creditors will not give him time,′ said Mrs. Micawber, ′they must take the consequences; and the sooner they bring it to an issue the better. Blood cannot be obtained from a stone, neither can anything on account be obtained at present (not to mention law expenses) from Mr. Micawber.′ -Si los acreedores de mi marido no quieren esperar -dijo mistress Micawber-, peor para ellos. Para nosotros, cuanto antes terminen las cosas, mejor. No se puede sangrar a una piedra, y nada podrán sacar en la actualidad de míster Micawber, aparte de los gastos que eso les ocasionaría.
I never can quite understand whether my precocious self-dependence confused Mrs. Micawber in reference to my age, or whether she was so full of the subject that she would have talked about it to the very twins if there had been nobody else to communicate with, but this was the strain in which she began, and she went on accordingly all the time I knew her. Nunca he podido comprender del todo si mi precoz independencia confundía a mistress Micawber respecto de mi edad, o si era que estaba tan preocupada por el asunto que habría hablado de él a los mellizos de no haber tenido otra persona a mano. Pero aquella conversación con que empezó nuestra amistad fue el asunto de todas las que siguieron.
Poor Mrs. Micawber! She said she had tried to exert herself, and so, I have no doubt, she had. The centre of the street door was perfectly covered with a great brass-plate, on which was engraved ′Mrs. Micawber′s Boarding Establishment for Young Ladies′: but I never found that any young lady had ever been to school there; or that any young lady ever came, or proposed to come; or that the least preparation was ever made to receive any young lady. The only visitors I ever saw, or heard of, were creditors. THEY used to come at all hours, and some of them were quite ferocious. One dirty-faced man, I think he was a boot-maker, used to edge himself into the passage as early as seven o′clock in the morning, and call up the stairs to Mr. Micawber—′Come! You ain′t out yet, you know. Pay us, will you? Don′t hide, you know; that′s mean. I wouldn′t be mean if I was you. Pay us, will you? You just pay us, d′ye hear? Come!′ Receiving no answer to these taunts, he would mount in his wrath to the words ′swindlers′ and ′robbers′; and these being ineffectual too, would sometimes go to the extremity of crossing the street, and roaring up at the windows of the second floor, where he knew Mr. Micawber was. At these times, Mr. Micawber would be transported with grief and mortification, even to the length (as I was once made aware by a scream from his wife) of making motions at himself with a razor; but within half-an-hour afterwards, he would polish up his shoes with extraordinary pains, and go out, humming a tune with a greater air of gentility than ever. Mrs. Micawber was quite as elastic. I have known her to be thrown into fainting fits by the king′s taxes at three o′clock, and to eat lamb chops, breaded, and drink warm ale (paid for with two tea-spoons that had gone to the pawnbroker′s) at four. On one occasion, when an execution had just been put in, coming home through some chance as early as six o′clock, I saw her lying (of course with a twin) under the grate in a swoon, with her hair all torn about her face; but I never knew her more cheerful than she was, that very same night, over a veal cutlet before the kitchen fire, telling me stories about her papa and mama, and the company they used to keep. ¡Pobre mistress Micawber! Decía que había intentado ganar dinero por todos los medios, y no lo dudo. Sin ir más lejos, en la puerta de la calle había una gran placa en la que se leía: «Pensión de mistress Micawber, fundada para señoritas»; pero nunca llegó a estudiar allí ninguna señorita; ninguna pensó en ir ni lo intentó, y en la casa nunca hubo que hacer preparativos para recibir a ninguna. Las únicas visitas que tenían (las he visto y oído) eran las de los acreedores. Venían a todas horas, y algunos eran verdaderamente feroces. Un hombre con la cara sucia (creo que el zapatero) solía ponerse en la escalera en cuanto daban las siete de la ma ñana, y desde allí increpaba a míster Micawber. -Vamos, que ahora está usted en casa. ¿Me pagará us ted? ¡No se esconda, es una cobardía! No haría yo una cosa semejante. Págueme; que me pague ahora mismo, ¿me oye? ¡Vamos! No recibiendo contestación a sus insultos, se encolerizaba y llegaba a llamarles ladrones y rateros, y viendo que aquello tampoco producía efecto, salía a la calle y desde allí gritaba hacia las ventanas del segundo piso, que era donde sabía que dormían los Micawber. En aquellas ocasiones, míster Micawber, desesperado por la vergÜenza, hasta había llegado (según comprendí por los gritos de su mujer) a fingir que intentaba matarse con una navaja de afeitar; pero media hora después se limpiaba las botas con cuidado y salía a la calle tarareando con más elegancia que nunca. Mistress Micawber era también de un carácter flexible; la he visto ponerse verdaderamente mala a las tres porque ha bían venido a cobrar los impuestos, y después comer a las cuatro chuletas de cordero empanadas, con un buen vaso de cerveza, todo pagado empeñando dos cucharillas de té. Recuerdo que un día habían venido a embargar la casa, y volviendo yo por casualidad a las seis, me la encontré en el suelo desvanecida (con uno de los mellizos en sus brazos, como es natural, y los cabellos sueltos alrededor de su rostro); pero nunca la he visto más alegre que aquella noche en la cocina, con sus chuletas en la mano, contándome toda clase de historias sobre su papá y su mamá y la gente que recibían en su casa.
In this house, and with this family, I passed my leisure time. My own exclusive breakfast of a penny loaf and a pennyworth of milk, I provided myself. I kept another small loaf, and a modicum of cheese, on a particular shelf of a particular cupboard, to make my supper on when I came back at night. This made a hole in the six or seven shillings, I know well; and I was out at the warehouse all day, and had to support myself on that money all the week. From Monday morning until Saturday night, I had no advice, no counsel, no encouragement, no consolation, no assistance, no support, of any kind, from anyone, that I can call to mind, as I hope to go to heaven! En aquella casa y con aquella familia pasaba yo todos mis ratos de ocio. Para el desayuno compraba un penique de pan y otro de leche, y también me procuraba otro penique de pan y un pedazo de queso, que me servían de cena, cuando volvía por la noche. Esto hacía una buena brecha en los seis o siete chelines, ya lo sé, y hay que tener en cuenta que estaba en el almacén todo el día y tenía que durarme el dinero la semana completa. Desde el domingo por la mañana hasta el sábado por la noche no recibía el menor consejo, la menor palabra de ánimo, el menor consuelo ni la más mínima ayuda ni cariño de nadie, puedo decirlo con la seguridad que espero ir al cielo.
I was so young and childish, and so little qualified—how could I be otherwise?—to undertake the whole charge of my own existence, that often, in going to Murdstone and Grinby′s, of a morning, I could not resist the stale pastry put out for sale at half-price at the pastrycooks′ doors, and spent in that the money I should have kept for my dinner. Then, I went without my dinner, or bought a roll or a slice of pudding. I remember two pudding shops, between which I was divided, according to my finances. One was in a court close to St. Martin′s Church—at the back of the church,—which is now removed altogether. The pudding at that shop was made of currants, and was rather a special pudding, but was dear, twopennyworth not being larger than a pennyworth of more ordinary pudding. A good shop for the latter was in the Strand—somewhere in that part which has been rebuilt since. It was a stout pale pudding, heavy and flabby, and with great flat raisins in it, stuck in whole at wide distances apart. It came up hot at about my time every day, and many a day did I dine off it. When I dined regularly and handsomely, I had a saveloy and a penny loaf, or a fourpenny plate of red beef from a cook′s shop; or a plate of bread and cheese and a glass of beer, from a miserable old public-house opposite our place of business, called the Lion, or the Lion and something else that I have forgotten. Once, I remember carrying my own bread (which I had brought from home in the morning) under my arm, wrapped in a piece of paper, like a book, and going to a famous alamode beef-house near Drury Lane, and ordering a ′small plate′ of that delicacy to eat with it. What the waiter thought of such a strange little apparition coming in all alone, I don′t know; but I can see him now, staring at me as I ate my dinner, and bringing up the other waiter to look. I gave him a halfpenny for himself, and I wish he hadn′t taken it. Era tan pequeño y tenía tan poca experiencia (¿cómo hubiera podido ser de otra manera?) para soportar la carga de mi existencia, que a menudo, yendo hacia el almacén por las mañanas, no podía resistir la tentación de comprar en las pastelerías los dulces de la víspera, que vendían a mitad de precio, y gastaba en aquello el dinero que llevaba para mi comida, y después tenía que quedarme sin comer a medio día, o tomar sólo un pedazo de pudding. Recuerdo dos tiendas de pudding que frecuentaba alternativamente, según el estado de mi bolsillo. Una estaba en un pasaje cerrado por la iglesia de Saint Martin (al que daba la parte de atrás de la iglesia), que ahora es, completamente distinto. El pudding de aquella tienda, hecho con pasas de Corinto, era de primera, pero muy caro: por dos peniques daban un trozo más pequeño que por un penique cuando era de otro más vulgar. Una buena tienda para este último estaba en el Strand, en un sitio que después han reconstruido. Era un pudding algo pesado, con grandes pasas muy separadas unas de otras; pero era alimenticio, y estaba caliente a la hora en que yo iba, y muchos días ésa era toda mi comida. Cuando comía de un modo regular y abundante, compraba un panecillo de un penique y tomaba un plato de carne de cuatro peniques en cualquier restaurante o un plato de pan y queso y un vaso de cerveza en la taberna miserable que había frente al almacén, llamada El León o El León y algo más que he olvidado. Una vez recuerdo que saqué el pan de casa desde por la mañana, y envuelto en un papel como si fuera un libro lo paseé debajo del brazo hasta un restaurante famoso por su carne guisada, cerca de Drury Lane, y pedí media ración de aquel famoso plato. Lo extraño que debió parecerle al camarero mi llegada, pobre criaturita cola, no lo sé; pero me parece que le veo todavía frente a mí, mientras como, y llamando a otro mozo también para que me mirara. Le di medio penique de propina, y ¡deseaba tanto que no me lo aceptara!
We had half-an-hour, I think, for tea. When I had money enough, I used to get half-a-pint of ready-made coffee and a slice of bread and butter. When I had none, I used to look at a venison shop in Fleet Street; or I have strolled, at such a time, as far as Covent Garden Market, and stared at the pineapples. I was fond of wandering about the Adelphi, because it was a mysterious place, with those dark arches. I see myself emerging one evening from some of these arches, on a little public-house close to the river, with an open space before it, where some coal-heavers were dancing; to look at whom I sat down upon a bench. I wonder what they thought of me! Creo que teníamos media hora para tomar el té. Cuando tenía dinero para ello tomaba una taza de café con un pane cillo untado de manteca, y cuando no tenía, acostumbraba a irme a mirar el escaparate de una tienda donde vendían caza en Flee t Street, o llegaba al mercado de Coven Garden y me paraba a mirar las piñas. También era muy aficionado a it por el Adelphi, porque era un lugar misterioso, con sus oscuros arcos. Me veo alguna noche saliendo de uno de aquellos arcos para entrar en alguna taberna de la orilla del río. Había una explanada delante de él donde unos carboneros están bailando; me siento a mirarlos en un banco, y reflexiono en qué pensarán epos al verme.
I was such a child, and so little, that frequently when I went into the bar of a strange public-house for a glass of ale or porter, to moisten what I had had for dinner, they were afraid to give it me. I remember one hot evening I went into the bar of a public-house, and said to the landlord: ′What is your best—your very best—ale a glass?′ For it was a special occasion. I don′t know what. It may have been my birthday. Era tan niño y tan pequeño, que con frecuencia, cuando entraba en el bar de una taberna por primera vez a tomar un vaso de cerveza para refrescarme después de comer, casi no se atrevían a servírmelo. Re cuerdo que en una calurosa noche entré en una taberna y dije al dueño: Era un día señalado, no recuerdo ahora cuál; pero debía de ser mi cumpleaños.
′Twopence-halfpenny,′ says the landlord, ′is the price of the Genuine Stunning ale.′ -Dos peniques y medio --dijo el dueño-; es el precio de la verdadera cerveza de primera calidad.
′Then,′ says I, producing the money, ′just draw me a glass of the Genuine Stunning, if you please, with a good head to it.′ -Entonces -dije yo sacando el dinero- deme un vaso de esa cerveza, y que tenga mucha espuma.
The landlord looked at me in return over the bar, from head to foot, with a strange smile on his face; and instead of drawing the beer, looked round the screen and said something to his wife. She came out from behind it, with her work in her hand, and joined him in surveying me. Here we stand, all three, before me now. The landlord in his shirt-sleeves, leaning against the bar window-frame; his wife looking over the little half-door; and I, in some confusion, looking up at them from outside the partition. They asked me a good many questions; as, what my name was, how old I was, where I lived, how I was employed, and how I came there. To all of which, that I might commit nobody, I invented, I am afraid, appropriate answers. They served me with the ale, though I suspect it was not the Genuine Stunning; and the landlord′s wife, opening the little half-door of the bar, and bending down, gave me my money back, and gave me a kiss that was half admiring and half compassionate, but all womanly and good, I am sure. El dueño del bar me miró de arriba abajo con una extraña sonrisa en su rostro, y en lugar de darme la cerveza, volviéndose hacia dentro dijo algo a su mujer, que salió con su labor en la mano y se puso a su lado a mirarme. Todavía no he olvidado el cuadro. El dueño, en mangas de camisa, apoyándose en el mostrador como en una ventana; su mujer mirando por encima de su hombro, y yo, bastante confuso, mirándoles desde el otro lado del mostrador. Me hicieron muchísimas preguntas de cómo me llamaba, qué edad tenía, dónde vivía, en qué trabajaba y cómo había llegado allí. A todo lo que yo, para no comprometer a nadie, me temo que contesté muchas mentiras. Por fin me sirvieron la cerveza, aunque sospecho que no era de la buena; y la mujer, abriendo la puertecita del mostrador, me devolvió el dinero y me dio un beso con expresión entre admirada y compasiva; pero de un modo femenino y bueno.
I know I do not exaggerate, unconsciously and unintentionally, the scantiness of my resources or the difficulties of my life. I know that if a shilling were given me by Mr. Quinion at any time, I spent it in a dinner or a tea. I know that I worked, from morning until night, with common men and boys, a shabby child. I know that I lounged about the streets, insufficiently and unsatisfactorily fed. I know that, but for the mercy of God, I might easily have been, for any care that was taken of me, a little robber or a little vagabond. Sé que no exagero, ni aun inconsciente o involuntaria mente, la escasez de mis recursos y las dificultades de mi vida. Sé que si míster Quinion me daba alguna vez una propina la gastaba en comer o en tomar el té. Sé que trabajaba desde por la mañana hasta la noche entre hombres y niños de la clase más baja y hecho un desarrapado. Sé que vagaba por aquellas calles con hambre y mal vestido. Y sé que sin la misericordia de Dios estaba tan abandonado, que podía haberme convertido en un ladrón o hacerme un vagabundo.
Yet I held some station at Murdstone and Grinby′s too. Besides that Mr. Quinion did what a careless man so occupied, and dealing with a thing so anomalous, could, to treat me as one upon a different footing from the rest, I never said, to man or boy, how it was that I came to be there, or gave the least indication of being sorry that I was there. That I suffered in secret, and that I suffered exquisitely, no one ever knew but I. How much I suffered, it is, as I have said already, utterly beyond my power to tell. But I kept my own counsel, and I did my work. I knew from the first, that, if I could not do my work as well as any of the rest, I could not hold myself above slight and contempt. I soon became at least as expeditious and as skilful as either of the other boys. Though perfectly familiar with them, my conduct and manner were different enough from theirs to place a space between us. They and the men generally spoke of me as ′the little gent′, or ′the young Suffolker.′ A certain man named Gregory, who was foreman of the packers, and another named Tipp, who was the carman, and wore a red jacket, used to address me sometimes as ′David′: but I think it was mostly when we were very confidential, and when I had made some efforts to entertain them, over our work, with some results of the old readings; which were fast perishing out of my remembrance. Mealy Potatoes uprose once, and rebelled against my being so distinguished; but Mick Walker settled him in no time. A pesar de todo, era de los que mejor estaba en la casa Murdstone y Grimby, pues míster Quinion hacía lo posible por tratarme mejor que a los demás, dentro de lo que podía esperarse de un hombre indiferente, además muy ocupado, y tratándose de una criatura tan abandonada. Yo no había contado a nadie por qué estaba allí, ni les había dejado sospechar mi tristeza por aquella vida. Lo que yo sufría en secreto nadie lo supo. Así mi amor propio sufría menos. Nadie sabía mis penas; por crueles que fueran, me reservaba y hacía mi trabajo. Comprendí desde el primer momento que si no trabajaba igual que los demás me expondría a sus burlas y desprecio. Y pronto fui por lo menos tan hábil y tan activo como mis compañeros. Aunque tenía con ellos un trato fa miliar, mi conducta y modales diferían bastante de los suyos, reteniéndolos a distancia. Tanto ellos como los hombres, por lo general, hablaban de mí como de un señorito y me llamaban el joven Sufolker. Uno de ellos, Gregory, que era el capataz de los embaladores, y otro, llamado Tipp, que era cartero y llevaba una chaqueta roja, me llamaban algunas veces David; pero creo que era en los momentos de mayor confianza y cuando yo me había esforzado en serles agradable contándoles, al mismo tiempo que trabajaba, algunas historias sacadas de mis antiguas lecturas, que cada vez se iban borrando más de mi memoria. Fécula de patata se rebeló alguna vez porque me distinguían; pero Mick Walker le hizo volver al orden.
My rescue from this kind of existence I considered quite hopeless, and abandoned, as such, altogether. I am solemnly convinced that I never for one hour was reconciled to it, or was otherwise than miserably unhappy; but I bore it; and even to Peggotty, partly for the love of her and partly for shame, never in any letter (though many passed between us) revealed the truth. No tenía ninguna esperanza de que me arrancaran de aquella vida horrible, que a mí me parecía vergonzosa, y me sentía enormemente desgraciado. Nunca, ni por un momento, estuve resignado; pero no se lo contaba ni a Peggotty, en parte por cariño a ella, en parte por vergÜenza. Nunca en ninguna carta (aunque se cruzaban bastantes entre nosotros) le revelé la verdad.
Mr. Micawber′s difficulties were an addition to the distressed state of my mind. In my forlorn state I became quite attached to the family, and used to walk about, busy with Mrs. Micawber′s calculations of ways and means, and heavy with the weight of Mr. Micawber′s debts. On a Saturday night, which was my grand treat,—partly because it was a great thing to walk home with six or seven shillings in my pocket, looking into the shops and thinking what such a sum would buy, and partly because I went home early,—Mrs. Micawber would make the most heart-rending confidences to me; also on a Sunday morning, when I mixed the portion of tea or coffee I had bought over-night, in a little shaving-pot, and sat late at my breakfast. It was nothing at all unusual for Mr. Micawber to sob violently at the beginning of one of these Saturday night conversations, and sing about jack′s delight being his lovely Nan, towards the end of it. I have known him come home to supper with a flood of tears, and a declaration that nothing was now left but a jail; and go to bed making a calculation of the expense of putting bow-windows to the house, ′in case anything turned up′, which was his favourite expression. And Mrs. Micawber was just the same. Las dificultades económicas de los Micawber aumentaban la depresión de mi espíritu. En el abandono en que estaba, había empezado a encariñarme con aquella gente, y acostumbraba a hablar de sus asuntos con la señora, calculando sus medios y esperanzas, y después me sentía ago biado por el peso de sus deudas. El sábado por la noche, que era mi mejor día, principalmente porque era una gran cosa volver a casa paseando con seis o siete chelines en el bolsillo y mirando los escaparates y pensando lo que podría comprar con aquella suma, y también porque volvía más temprano. Esos días mistress Micawber me hacía las más desgarradoras confidencias, y también el domingo por la mañana mientras tomaba el té o el café que había comprado la noche antes y guardaba en un tarro de dulce. No era raro que míster Micawber sollozara violentamente al empezar una de aque llas conversaciones del sábado por la noche, terminando con una canción. Le he visto muchas veces volver a casa a comer llorando a lágrima viva y declarando que ya sólo le quedaba it a la cárcel, y después acostarse calculando lo que costaría poner un mirador a las ventanas del primer piso en el caso de que «surgiera algo», como era su expresión favorita. Y mistress Micawber era exactamente igual.
A curious equality of friendship, originating, I suppose, in our respective circumstances, sprung up between me and these people, notwithstanding the ludicrous disparity in our years. But I never allowed myself to be prevailed upon to accept any invitation to eat and drink with them out of their stock (knowing that they got on badly with the butcher and baker, and had often not too much for themselves), until Mrs. Micawber took me into her entire confidence. This she did one evening as follows: Una curiosa igualdad en nuestra amistad, originada sin duda por nuestras respectivas situaciones, se estableció entre aquella gente y yo, a pesar de la inverosímil diferencia de nuestras edades. Sin embargo, no consentí nunca en aceptar la menor invitación a comer con ellos (sabiendo el trabajo que les costaba pagar al panadero y al carbonero y que a menudo no tenían bastante para ellos mismos), hasta que mistress Micawber se confió del todo a mí. Y esto ocurrió una noche como sigue:
′Master Copperfield,′ said Mrs. Micawber, ′I make no stranger of you, and therefore do not hesitate to say that Mr. Micawber′s difficulties are coming to a crisis.′ -Copperfield -me dijo mistress Micawber-, no quiero tratarle como a un extraño, y por eso no dudo en decirle que las dificultades de míster Micawber se acercan a una crisis.
It made me very miserable to hear it, and I looked at Mrs. Micawber′s red eyes with the utmost sympathy. Al oír esto, sentí mucha pena y miré los ojos rojizos de mistress Micawber con la mayor simpatía.
′With the exception of the heel of a Dutch cheese—which is not adapted to the wants of a young family′—said Mrs. Micawber, ′there is really not a scrap of anything in the larder. I was accustomed to speak of the larder when I lived with papa and mama, and I use the word almost unconsciously. What I mean to express is, that there is nothing to eat in the house.′ -Excepto un pedazo de queso de Holanda, que no es suficiente para las necesidades de mi joven familia --dijo mistress Micawber-, realmente no hay ni una miga de nada en la despensa. Estoy acostumbrada a hablar de la despensa de cuando vivía con papá y mamá, y use la palabra inconscientemente. Ahora lo que quiero decir es que no hay nada que comer en casa.
′Dear me!′ I said, in great concern. -¡Dios mío! -dije con gran emoción.
I had two or three shillings of my week′s money in my pocket—from which I presume that it must have been on a Wednesday night when we held this conversation—and I hastily produced them, and with heartfelt emotion begged Mrs. Micawber to accept of them as a loan. But that lady, kissing me, and making me put them back in my pocket, replied that she couldn′t think of it. Tenía dos o tres chelines de mi dinero de la semana en el bolsillo, por lo que deduzco que debíamos de estar a martes por la noche cuando tuvimos aquella conversación. Los saqué prontamente, pidiéndole con toda la emoción de mi alma que no los rechazara; pero ella, besándome y haciéndomelos guardar de nuevo en el bolsillo, me dijo que no pensara en ello.
′No, my dear Master Copperfield,′ said she, ′far be it from my thoughts! But you have a discretion beyond your years, and can render me another kind of service, if you will; and a service I will thankfully accept of.′ -No, mi querido Copperfield; eso está lejos de mi pensamiento. Pero tienes una discreción muy por encima de tu edad y puedes hacerme un gran favor, si quieres; lo aceptaré con reconocimiento.
I begged Mrs. Micawber to name it. Le rogué que me dijera de qué se trataba.
′I have parted with the plate myself,′ said Mrs. Micawber. ′Six tea, two salt, and a pair of sugars, I have at different times borrowed money on, in secret, with my own hands. But the twins are a great tie; and to me, with my recollections, of papa and mama, these transactions are very painful. There are still a few trifles that we could part with. Mr. Micawber′s feelings would never allow him to dispose of them; and Clickett′—this was the girl from the workhouse—′being of a vulgar mind, would take painful liberties if so much confidence was reposed in her. Master Copperfield, if I might ask you—′ -Yo misma he llevado la plata a empeñar -dijo mistress Micawber-; seis cucharillas de té, dos saleros y un par de pinzas para el azúcar; en diferentes ocasiones he sacado dinero de ello, en secreto y con mis propias manos; pero ahora los mellizos me estorban mucho, y el hacerlo me resulta muy triste cuando recuerdo los tiempos de papá y mamá. Todavía quedan algunas cosas de las que se puede sacar partido. Los sentimientos de míster Micawber nunca le han permitido mezclarse en estas cosas, y Cliket (este era el nombre de la criada) tiene un espíritu vulgar y quizá se tomara demasia das libertades si se depositase en ella semejante confianza; por lo tanto, si yo pudiera pedirle a usted...
I understood Mrs. Micawber now, and begged her to make use of me to any extent. I began to dispose of the more portable articles of property that very evening; and went out on a similar expedition almost every morning, before I went to Murdstone and Grinby′s. Comprendí a mistress Micawber y me puse a su disposición, y aquella misma noche empecé por llevar lo más manejable, y todas las mañanas hacía una expedición semejante antes de entrar en el almacén de Murdstone y Grimby.
Mr. Micawber had a few books on a little chiffonier, which he called the library; and those went first. I carried them, one after another, to a bookstall in the City Road—one part of which, near our house, was almost all bookstalls and bird shops then—and sold them for whatever they would bring. The keeper of this bookstall, who lived in a little house behind it, used to get tipsy every night, and to be violently scolded by his wife every morning. More than once, when I went there early, I had audience of him in a turn-up bedstead, with a cut in his forehead or a black eye, bearing witness to his excesses over-night (I am afraid he was quarrelsome in his drink), and he, with a shaking hand, endeavouring to find the needful shillings in one or other of the pockets of his clothes, which lay upon the floor, while his wife, with a baby in her arms and her shoes down at heel, never left off rating him. Sometimes he had lost his money, and then he would ask me to call again; but his wife had always got some—had taken his, I dare say, while he was drunk—and secretly completed the bargain on the stairs, as we went down together. At the pawnbroker′s shop, too, I began to be very well known. The principal gentleman who officiated behind the counter, took a good deal of notice of me; and often got me, I recollect, to decline a Latin noun or adjective, or to conjugate a Latin verb, in his ear, while he transacted my business. After all these occasions Mrs. Micawber made a little treat, which was generally a supper; and there was a peculiar relish in these meals which I well remember. Míster Micawber tenía unos cuantos libros en un armario, al que llamaba la librería, y empecé por aquello. Llevé uno tras otro a un puesto de libros de City Road, cerca de nuestra casa, en un sitio que estaba siempre lleno de puestos de pájaros y libros. El dueño de aquel puesto vivía en una casucha al lado y solía emborracharse por la noche y tenía violentas disputas con su mujer por la mañana. Más de una vez, cuando iba muy temprano, le encontraba en la cama, con la frente partida o con un ojo morado, resultado de sus excesos de la víspera (temo que debía de ser muy violento cuando había bebido), y con su mano temblona trataba en vano de buscar uno por uno en todos los bolsillos de su ropa, que estaba caída por el suelo, mientras su mujer, con un niño en los brazos y los zapatos en chancleta, no le dejaba en paz. A veces había perdido su dinero y me decía que volviera a otra hora; pero su mujer siempre tenía algo, que le había quitado durante la borrachera, y terminaba la compra mientras bajábamos las escaleras.  En la casa de préstamos también empezaron a conocerme, y el cajero me tenía mucha simpatía. Recuerdo que a menudo me hacía declinar un nombre o adjetivo latino o conjugar un verbo mientras esperaba todas las transacciones. En todas aquellas ocasiones mistress Micawber hacía después preparativos para una comida, y había un peculiar encanto en ello, lo recuerdo muy bien.  A veces había perdido su dinero y me decía que volviera a otra hora; pero su mujer siempre tenía algo, que le había quitado durante la hombre con veinte libras esterlinas de renta gasta diecinueve libras, diecinueve chelines y seis peniques, podrá ser dichoso; pero que si gasta veintiuna libras, nunca se librará de la miseria. Después de esto me pidió prestado un chelín para comprar cerveza, y me dio un recibo para que su señora me lo devolviera. Después se guardó el pañuelo en el bolsillo y recobró su alegría.
At last Mr. Micawber′s difficulties came to a crisis, and he was arrested early one morning, and carried over to the King′s Bench Prison in the Borough. He told me, as he went out of the house, that the God of day had now gone down upon him—and I really thought his heart was broken and mine too. But I heard, afterwards, that he was seen to play a lively game at skittles, before noon. Por último llegó la crisis de las dificultades de míster Micawber, y una mañana muy temprano vinieron a buscarle y le llevaron a la prisión de Bench King´s, en el Borough. Cuando lo llevaban me dijo que el angel de la guarda había desaparecido para él; y yo, realmente, pensando que su corazón estaba destrozado, sentía igual. Pero después oí decir que en la cárcel había estado jugando alegremente a los bolos antes de comer. 
On the first Sunday after he was taken there, I was to go and see him, and have dinner with him. I was to ask my way to such a place, and just short of that place I should see such another place, and just short of that I should see a yard, which I was to cross, and keep straight on until I saw a turnkey. All this I did; and when at last I did see a turnkey (poor little fellow that I was!), and thought how, when Roderick Random was in a debtors′ prison, there was a man there with nothing on him but an old rug, the turnkey swam before my dimmed eyes and my beating heart. El primer domingo después de su encierro fui a verle y a comer con él. Tenía que preguntar el camino en un sitio, y antes de llegar allí debía encontrar otro sitio, y un poco antes vería un pórtico que tenía que atravesar y continuar en línea recta hasta que me encontrase al carcelero. Lo hice todo, y cuando, por último, vi al carcelero, ¡pobre de mí!, recordé que cuando Roderik Ramdom estaba en la prisión por deudas veía allí un hombre que sólo iba vestido con un trozo viejo de tapiz; el carcelero se desvaneció ante mis inquietos ojos y mi palpitante corazón.
Mr. Micawber was waiting for me within the gate, and we went up to his room (top story but one), and cried very much. He solemnly conjured me, I remember, to take warning by his fate; and to observe that if a man had twenty pounds a-year for his income, and spent nineteen pounds nineteen shillings and sixpence, he would be happy, but that if he spent twenty pounds one he would be miserable. After which he borrowed a shilling of me for porter, gave me a written order on Mrs. Micawber for the amount, and put away his pocket-handkerchief, and cheered up. Míster Micawber me estaba esperando cerca de la puerta, y una vez llegados a su habitación, que estaba situada en el penúltimo piso, se echó a llorar. Me conjuró solemnemente para que recordara su destino y para que no olvidara jamás que si un hombre con veinte libras esterlinas de renta gasta diecinueve libras, diecinueve chelines y seis peniques, podrá ser dichoso; pero que si gasta veintiuna libras, nunca se librará de la miseria. 
We sat before a little fire, with two bricks put within the rusted grate, one on each side, to prevent its burning too many coals; until another debtor, who shared the room with Mr. Micawber, came in from the bakehouse with the loin of mutton which was our joint-stock repast. Then I was sent up to ′Captain Hopkins′ in the room overhead, with Mr. Micawber′s compliments, and I was his young friend, and would Captain Hopkins lend me a knife and fork. Estábamos sentados ante una fogata; dos ladrillos atravesados a cada lado de le chimenea impedían que se quemara demasiado carbón. Cuando otro deudor, que compartía la habitación de Micawber, entró con el pedazo de cordero que íbamos a comer entre los tres y pagar a escote, entonces me enviaron a otra habitación que estaba en el piso de arriba, para que saludara al capitán Hopkins de parte de míster Micawber y le dijera que yo era el amiguito de quien le había hablado y que si quería prestarme un cuchillo o un tenedor.
Captain Hopkins lent me the knife and fork, with his compliments to Mr. Micawber. There was a very dirty lady in his little room, and two wan girls, his daughters, with shock heads of hair. I thought it was better to borrow Captain Hopkins′s knife and fork, than Captain Hopkins′s comb. The Captain himself was in the last extremity of shabbiness, with large whiskers, and an old, old brown great-coat with no other coat below it. I saw his bed rolled up in a corner; and what plates and dishes and pots he had, on a shelf; and I divined (God knows how) that though the two girls with the shock heads of hair were Captain Hopkins′s children, the dirty lady was not married to Captain Hopkins. My timid station on his threshold was not occupied more than a couple of minutes at most; but I came down again with all this in my knowledge, as surely as the knife and fork were in my hand. El capitán Hopkins me prestó el cuchillo y el tenedor, encargándome sus saludos para míster Micawber. En su celda había una señora muy sucia y dos muchachas, sus hijas, pálidas, con los cabellos alborotados. Yo no pude por menos de pensar que más valía pedirle a Hopkins su cuchillo que su peine. El capitán estaba en un estado deplorable; llevaba un gabán muy viejo sin forro y unas patillas enormes. El colchón estaba hecho un rollo en un rincón, y ¡qué platos, qué vasos y qué tazas tenía encima de una mesa! Adiviné, Dios sabe cómo, que, aunque las dos muchachas desgreñadas eran sus hijas, la señora sucia no estaba casada con el capitán Hopkins. En mi tímida visita no pasé de la puerta ni estuve más de dos minutos; sin embargo, bajaba tan seguro de lo que acabo de decir como de que llevaba un cuchillo y un tenedor en la mano. 
There was something gipsy-like and agreeable in the dinner, after all. I took back Captain Hopkins′s knife and fork early in the afternoon, and went home to comfort Mrs. Micawber with an account of my visit. She fainted when she saw me return, and made a little jug of egg-hot afterwards to console us while we talked it over. Había, después de todo, algo bohemio y agradable en aquella comida. Devolví el tenedor y el cuchillo al capitán Hopkins y regresé a casa para tranquilizar y dar cuenta de mi visita a mistress Micawber. Se desmayó al verme, después de lo cual preparó dos vasos de ponche para consolarnos mientras le contaba lo sucedido. 
I don′t know how the household furniture came to be sold for the family benefit, or who sold it, except that I did not. Sold it was, however, and carried away in a van; except the bed, a few chairs, and the kitchen table. With these possessions we encamped, as it were, in the two parlours of the emptied house in Windsor Terrace; Mrs. Micawber, the children, the Orfling, and myself; and lived in those rooms night and day. I have no idea for how long, though it seems to me for a long time. At last Mrs. Micawber resolved to move into the prison, where Mr. Micawber had now secured a room to himself. So I took the key of the house to the landlord, who was very glad to get it; and the beds were sent over to the King′s Bench, except mine, for which a little room was hired outside the walls in the neighbourhood of that Institution, very much to my satisfaction, since the Micawbers and I had become too used to one another, in our troubles, to part. The Orfling was likewise accommodated with an inexpensive lodging in the same neighbourhood. Mine was a quiet back-garret with a sloping roof, commanding a pleasant prospect of a timberyard; and when I took possession of it, with the reflection that Mr. Micawber′s troubles had come to a crisis at last, I thought it quite a paradise. Yo no sé cómo consiguieron vender los muebles para alimentarse, ni sé quién se encargó de aquella operación; en todo caso, yo no intervine en ella. Todo se lo llevaron rollo en un rincón, y ¡qué platos, qué vasos y qué tazas tenía encima de una mesa! Adiviné, Dios sabe cómo, que, aunque las dos muchachas desgreñadas eran sus hijas, la señora sucia no estaba casada con el capitán Hopkins. En mi tímida visita no pasé de la puerta ni estuve más de dos minutos; sin embargo, bajaba tan seguro de lo que acabo de en un carro, a excepción de las camas y de alguna que otra silla y la mesa de cocina. Terrace mistress Micawber, los niños, la huérfana y yo, y de allí no salíamos. No recuerdo cuánto duró aquello; pero me parece que bastante tiempo. Por último, mistress Micawber decidió trasladarse a la prisión, donde su marido tenía ahora una habitación para él solo. Me encargaron de llevar la llave de la casa a su dueño, que por cierto me pareció encantado de ello, y las camas se enviaron a Bench King′s, menos la mía. Alquilamos para mí una habitacioncita en los alrededores de la prisión, lo que me alegró mucho, pues ya me había acostumbrado a vivir con ellos a través de nuestras mutuas penas. La huérfana también fue acomodada en un baratísimo alojamiento de las cercanías. Mi habitación era un poco abuhardillada y nada cómoda; pero me creí en el paraíso al tomar posesión de ella, pensando que la crisis de las dificultades de Micawber había terminado.
All this time I was working at Murdstone and Grinby′s in the same common way, and with the same common companions, and with the same sense of unmerited degradation as at first. But I never, happily for me no doubt, made a single acquaintance, or spoke to any of the many boys whom I saw daily in going to the warehouse, in coming from it, and in prowling about the streets at meal-times. I led the same secretly unhappy life; but I led it in the same lonely, self-reliant manner. The only changes I am conscious of are, firstly, that I had grown more shabby, and secondly, that I was now relieved of much of the weight of Mr. and Mrs. Micawber′s cares; for some relatives or friends had engaged to help them at their present pass, and they lived more comfortably in the prison than they had lived for a long while out of it. I used to breakfast with them now, in virtue of some arrangement, of which I have forgotten the details. I forget, too, at what hour the gates were opened in the morning, admitting of my going in; but I know that I was often up at six o′clock, and that my favourite lounging-place in the interval was old London Bridge, where I was wont to sit in one of the stone recesses, watching the people going by, or to look over the balustrades at the sun shining in the water, and lighting up the golden flame on the top of the Monument. The Orfling met me here sometimes, to be told some astonishing fictions respecting the wharves and the Tower; of which I can say no more than that I hope I believed them myself. In the evening I used to go back to the prison, and walk up and down the parade with Mr. Micawber; or play casino with Mrs. Micawber, and hear reminiscences of her papa and mama. Whether Mr. Murdstone knew where I was, I am unable to say. I never told them at Murdstone and Grinby′s. Todo este tiempo seguía trabajando para Murdstone y Grimby en lo mismo de siempre, con los mismos compañeros y con el mismo sentimiento de degradación inmerecida que al principio. Pero, felizmente, no había hecho ninguna amistad, no hablaba con ninguno de los niños a quien diaria mente me encontraba al ir y venir al almacén o al vagar por las calles a la hora de comer. Seguía llevando la misma vida triste y solitaria; pero mi pena continuaba siempre encerrada en mí mismo. El único cambio del que tuve conciencia fue que mi traje estaba cada día más viejo y usado, y que en parte estaba algo tranquilo respecto a los Micawber, que vivían en la prisión más desahogados que hacía mucho tiempo y que habían sido socorridos en su desgracia por parientes o amigos. Desayunaba con ellos en virtud de un arreglo que hicimos y del que he olvidado los detalles. También he olvidado a qué hora se abrían las puertas de la prisión para dejarme entrar; únicamente sé que me levantaba a las seis de la mañana, y mientras esperaba a que abrieran las puertas iba a sentarme en uno de los bancos del viejo puente de Londres, donde me divertía mirando a la gente que pasaba o contemplando por encima de la balaustrada el sol reflejado en el agua o iluminando las llamas doradas de lo alto del monumento. La Campábamos con aquellos muebles en dos habitaciones de la casa vacía de Windsor huérfana venía muchas veces a reunirse allí conmigo para oír las historias que yo le inventaba de la torre de Londres, y puedo asegurar que yo mismo me convencía de lo que contaba. Por la tarde volvía a la prisión y me paseaba en el patio con míster Micawber o jugaba a las cartas con su señora, escuchando sus relatos sobre papá y mamá. Ignoro si míster Murdstone supo cómo vivía entonces; yo no hablé nunca de ello en Murdstone y Grimby.
Mr. Micawber′s affairs, although past their crisis, were very much involved by reason of a certain ′Deed′, of which I used to hear a great deal, and which I suppose, now, to have been some former composition with his creditors, though I was so far from being clear about it then, that I am conscious of having confounded it with those demoniacal parchments which are held to have, once upon a time, obtained to a great extent in Germany. At last this document appeared to be got out of the way, somehow; at all events it ceased to be the rock-ahead it had been; and Mrs. Micawber informed me that ′her family′ had decided that Mr. Micawber should apply for his release under the Insolvent Debtors Act, which would set him free, she expected, in about six weeks. Los asuntos de míster Micawber seguían, a pesar de la tregua, muy embrollados, a causa de cierto documento del que oía hablar. Ahora supongo que sería algún arreglo anterior con sus acreedores, aunque entonces comprendía tan poco de qué se trataba, que, si no me equivoco, lo confundía con los pergaminos infernales de contratos con el demonio, que, según decían, existían antiguamente en Alemania. Por fin, aquel documento pareció desvanecerse no sé cómo, al menos había dejado de ser la piedra de toque, y mistress Micawber me dijo que su familia había decidido que míster Micawber apelara, para ser puesto en libertad, a la ley de deudores insolventes, y que podría verse libre antes de seis semanas.
′And then,′ said Mr. Micawber, who was present, ′I have no doubt I shall, please Heaven, begin to be beforehand with the world, and to live in a perfectly new manner, if—in short, if anything turns up.′ Entonces dijo míster Micawber, que estaba presente: -No hay duda de que con la ayuda de Dios saldremos adelante y podremos vivir de una manera completamente diferente, y..., y..., en una palabra, las cosas cambiarán.
By way of going in for anything that might be on the cards, I call to mind that Mr. Micawber, about this time, composed a petition to the House of Commons, praying for an alteration in the law of imprisonment for debt. I set down this remembrance here, because it is an instance to myself of the manner in which I fitted my old books to my altered life, and made stories for myself, out of the streets, and out of men and women; and how some main points in the character I shall unconsciously develop, I suppose, in writing my life, were gradually forming all this while. Para estar preparado y aprovechar el porvenir, recuerdo que míster Micawber componía una petición a la Cámara de los Comunes pidiendo que se hicieran mejoras en la ley que regía las prisiones por deudas. Recojo aquí este recuerdo porque me hace ver cómo unía yo las historias de mis antiguos libros a la de mi vida presente, cogiendo a derecha a izquierda mis personajes entre la gente que encontraba en la calle. Muchos rasgos del carácter que trazaré involuntariamente al escribir mi vida se formaron desde entonces en mi alma.
There was a club in the prison, in which Mr. Micawber, as a gentleman, was a great authority. Mr. Micawber had stated his idea of this petition to the club, and the club had strongly approved of the same. Wherefore Mr. Micawber (who was a thoroughly good-natured man, and as active a creature about everything but his own affairs as ever existed, and never so happy as when he was busy about something that could never be of any profit to him) set to work at the petition, invented it, engrossed it on an immense sheet of paper, spread it out on a table, and appointed a time for all the club, and all within the walls if they chose, to come up to his room and sign it. En la prisión había un club, y míster Micawber, en su calidad de hombre bien educado, era una gran autoridad en él. Míster Micawber había desarrollado ante el club la idea de su petición, y todos la habían aprobado. En consecuencia, como Micawber estaba dotado de un excelente corazón y de una actividad infatigable, cuando no se trataba de sus propios asuntos, completamente feliz de trabajar en una empresa que no le sería de ninguna utilidad, puso manos a la obra y redactó la petición, la copió en una hoja de papel que extendió encima de la mesa, y después convocó al club entero y a todos los habitantes de la prisión por si querían venir a depositar su firma en aquel documento.
When I heard of this approaching ceremony, I was so anxious to see them all come in, one after another, though I knew the greater part of them already, and they me, that I got an hour′s leave of absence from Murdstone and Grinby′s, and established myself in a corner for that purpose. As many of the principal members of the club as could be got into the small room without filling it, supported Mr. Micawber in front of the petition, while my old friend Captain Hopkins (who had washed himself, to do honour to so solemn an occasion) stationed himself close to it, to read it to all who were unacquainted with its contents. The door was then thrown open, and the general population began to come in, in a long file: several waiting outside, while one entered, affixed his signature, and went out. To everybody in succession, Captain Hopkins said: ′Have you read it?′—′No.′—-′Would you like to hear it read?′ If he weakly showed the least disposition to hear it, Captain Hopkins, in a loud sonorous voice, gave him every word of it. The Captain would have read it twenty thousand times, if twenty thousand people would have heard him, one by one. I remember a certain luscious roll he gave to such phrases as ′The people′s representatives in Parliament assembled,′ ′Your petitioners therefore humbly approach your honourable house,′ ′His gracious Majesty′s unfortunate subjects,′ as if the words were something real in his mouth, and delicious to taste; Mr. Micawber, meanwhile, listening with a little of an author′s vanity, and contemplating (not severely) the spikes on the opposite wall. Cuando oí anunciar la proximidad de aquella ceremonia sentí tales deseos de ver entrar a todos uno detrás de otro, aunque los conocía ya a casi todos, que conseguí un permiso de una hora en Murdstone y Grimby y me instalé en un rin cón para asistir al espectáculo. Los principales miembros del club, aquellos que habían podido entrar en la habitación sin llenarla del todo, estaban delante de la mesa con míster Micawber. Mi antiguo amigo, el capitán Hopkins, que se había lavado la cara en honor del acto, se había instalado solemnemente al lado del documento para leérselo a los que no conocían su contenido. La puerta se abrió por fin y comenzó el desfile. Entraba uno, y los otros esperaban en puerta mientras aquel firmaba. El capitán Hopkins les preguntaba a todos: «¿Lo ha leído usted? No. ¿Quiere usted oírlo?». Si el desgraciado hacía el menor signo de asent imiento, el capitán Hopkins se lo leía todo, sin saltarse una letra, con su voz más sonora. El capitán lo hubiera leído veinte mil veces seguidas si veinte mil personas hubieran deseado escucharlo una después de otra. Recuerdo el énfasis con que pronunciaba frases como esta: « Los representantes del pueblo, reunidos en Parlamento... Los autores de la petición hacían ver humildemente a la honorable Cámara... Los desdichados súbditos de su Graciosa Majestad» . Parecía que aquellas palabras eran en su boca una bebida deliciosa. Míster Micawber, entre tanto, contemplaba con expresión de vanidad satisfecha los barrotes de las ventanas de enfrente.
As I walked to and fro daily between Southwark and Blackfriars, and lounged about at meal-times in obscure streets, the stones of which may, for anything I know, be worn at this moment by my childish feet, I wonder how many of these people were wanting in the crowd that used to come filing before me in review again, to the echo of Captain Hopkins′s voice! When my thoughts go back, now, to that slow agony of my youth, I wonder how much of the histories I invented for such people hangs like a mist of fancy over well-remembered facts! When I tread the old ground, I do not wonder that I seem to see and pity, going on before me, an innocent romantic boy, making his imaginative world out of such strange experiences and sordid things! Mientras doy mi paseo diario desde Southwark a Blackfriars y vago a las horas de comer por las oscuras calles, cuyas piedras quizá conservan todavía las huellas de mis pasos de niño, me pregunto si llegaré a olvidarme de alguno de aquellos personajes que cruzaban sin cesar por mi espíritu, uno a uno, al eco de la voz del capitán Hopkins. Y cuando mis pensamientos, mirando atrás, vuelven a aquella lenta agonía de mi infancia, me admira cómo muchas de las historias que yo inventaba sobre aquella gente flotan todavía como una sombra fantástica sobre los hechos reales, siempre presentes en mi memoria. Y cuando paso por el viejo camino no me sorprendo, sólo lo compadezco, si veo andando delante de mí a un niño inocente y soñador que se crea un mundo imaginario de su extraña experiencia y sórdido vivir.  
"Emma"

CHAPTER 12.

CANTULO XII

 

LIKING LIFE ON MY OWN ACCOUNT NO BETTER, I FORM A GREAT RESOLUTION

COMO EL VIVIR POR MI CUENTA NO ME GUSTA Y TOMO UNA GRAN RESOLUCIÓN

In due time, Mr. Micawber′s petition was ripe for hearing; and that gentleman was ordered to be discharged under the Act, to my great joy. His creditors were not implacable; and Mrs. Micawber informed me that even the revengeful boot-maker had declared in open court that he bore him no malice, but that when money was owing to him he liked to be paid. He said he thought it was human nature. A su debido tiempo, la petición de míster Micawber fue atendida y se recibió orden de ponerle en libertad, lo que me causo gran alegría. Sus acreedores no eran muy implacables, y mistress Micawber me contó que hasta el zapatero había declarado en pleno tribunal que no le tenía mala voluntad; pero que cuando le debían dinero le gustaba que se lo pagasen, y añadió que pensaba que aquello era una cosa muy humana.
M r Micawber returned to the King′s Bench when his case was over, as some fees were to be settled, and some formalities observed, before he could be actually released. The club received him with transport, and held an harmonic meeting that evening in his honour; while Mrs. Micawber and I had a lamb′s fry in private, surrounded by the sleeping family. Desde el tribunal volvió míster Micawber a Bench King′s para ciertas formalidades que había que terminar. El club le recibió con entusiasmo y organizó aquella noche un mitin en su honor; entre tanto, mistress Micawber y yo lo celebramos en privado comiendo cordero y rodeados de los niños dormidos,
′On such an occasion I will give you, Master Copperfield,′ said Mrs. Micawber, ′in a little more flip,′ for we had been having some already, ′the memory of my papa and mama.′ -En esta ocasión le propongo, Copperfield -dijo mistress Micawber-, que tomemos un poco más de ponche a la salud de papá y mamá; hacía ya tiempo que no lo tomábamos.
′Are they dead, ma′am?′ I inquired, after drinking the toast in a wine-glass. -¿Han muerto? -pregunté después de brindar.
′My mama departed this life,′ said Mrs. Micawber, ′before Mr. Micawber′s difficulties commenced, or at least before they became pressing. My papa lived to bail Mr. Micawber several times, and then expired, regretted by a numerous circle.′ -Mamá abandonó la tierra -dijo mistress Micawberantes de que empezaran las dificultades de mi esposo, o al menos antes de que la cosa se pusiera seria. Mi papá ha vivido lo bastante para rescatar muchas veces a míster Micawber, después de lo cual ha muerto, siendo muy llorado por todos sus amigos.
Mrs. Micawber shook her head, and dropped a pious tear upon the twin who happened to be in hand. Mistress Micawber sacudió la cabeza y vertió una lágrima de piedad filial sobre el mellizo que estaba de turno.
As I could hardly hope for a more favourable opportunity of putting a question in which I had a near interest, I said to Mrs. Micawber: Me pareció que no podría encontrar ocasión más favorable para preguntarle una cosa del mayor interés para mí; por lo tanto le dije:
′May I ask, ma′am, what you and Mr. Micawber intend to do, now that Mr. Micawber is out of his difficulties, and at liberty? Have you settled yet?′ -Puedo preguntarle, señora, lo que piensan ustedes hacer ahora que míster Micawber ha salido de sus dificultades y está en libertad. ¿Ha decidido usted algo?
′My family,′ said Mrs. Micawber, who always said those two words with an air, though I never could discover who came under the denomination, ′my family are of opinion that Mr. Micawber should quit London, and exert his talents in the country. Mr. Micawber is a man of great talent, Master Copperfield.′ -Mi familia ---dijo mistress Micawber, que pronunciaba siempre estas dos palabras con aire majestuoso, sin que yo haya podido descubrir jamás a quién se las aplicaba-, mi familia piensa que míster Micawber debía salir de Londres y ejercer su talento en el campo. Míster Micawber es un hombre de mucho talento, Copperfield.
I said I was sure of that. Dije que estaba seguro de ello.
′Of great talent,′ repeated Mrs. Micawber. ′My family are of opinion, that, with a little interest, something might be done for a man of his ability in the Custom House. The influence of my family being local, it is their wish that Mr. Micawber should go down to Plymouth. They think it indispensable that he should be upon the spot.′ -De mucho talento -repitió mistress Micawber-; y mi familia mantiene que, con algo de interés, a un hombre de su inteligencia se le podría dar cualquier cargo en la Administración de Aduanas. Y como la influencia de mi familia es local, su deseo es que míster Micawber se vaya a Plimouth. Creen indispensable que esté sobre el terreno.
′That he may be ready?′ I suggested. -¿Para estar preparado? -pregunté.
′Exactly,′ returned Mrs. Micawber. ′That he may be ready—in case of anything turning up.′ -Precisamente -contestó ella-, para que esté preparado en el caso de que surgiera algo.
′And do you go too, ma′am?′ -¿Y usted también se irá?
The events of the day, in combination with the twins, if not with the flip, had made Mrs. Micawber hysterical, and she shed tears as she replied: Los sucesos del día, combinados con los mellizos o con el ponche, tenían a mistress Micawber muy nerviosa, y me contestó con lágrimas en los ojos:
′I never will desert Mr. Micawber. Mr. Micawber may have concealed his difficulties from me in the first instance, but his sanguine temper may have led him to expect that he would overcome them. The pearl necklace and bracelets which I inherited from mama, have been disposed of for less than half their value; and the set of coral, which was the wedding gift of my papa, has been actually thrown away for nothing. But I never will desert Mr. Micawber. No!′ cried Mrs. Micawber, more affected than before, ′I never will do it! It′s of no use asking me!′ -Yo nunca abandonaré a mi esposo. Míster Micawber ha hecho mal ocultándome al principio sus apuros; pero hay que reconocer que su carácter optimista le hacía creer siempre que saldría de ellos sin que yo me enterase. El collar de perlas y las pulseras que había heredado de mamá los hemos vendido en la mitad de su valor; los corales que papá me dio al casarme también los hemos dado por nada. Pero nunca abandonaré a Micawber. ¡No -gritó cada vez más conmovida-, no lo consentiré jamás! ¡Es inútil que me lo propongan!
I felt quite uncomfortable—as if Mrs. Micawber supposed I had asked her to do anything of the sort!—and sat looking at her in alarm. Yo estaba muy confuso, pues parecía que mistress Micawber imaginaba que yo le proponía semejante cosa, y la miré alarmado.
′Mr. Micawber has his faults. I do not deny that he is improvident. I do not deny that he has kept me in the dark as to his resources and his liabilities both,′ she went on, looking at the wall; ′but I never will desert Mr. Micawber!′ -Micawber tiene sus defectos. No niego que es muy poco precavido; no niego que me ha engañado respecto a sus recursos y sus deudas -continuó, mirando fijamente a la pared-; pero yo no le abandonaré nunca.
Mrs. Micawber having now raised her voice into a perfect scream, I was so frightened that I ran off to the club-room, and disturbed Mr. Micawber in the act of presiding at a long table, and leading the chorus of Mistress Micawber había levantado la voz poco a poco, y gritó de tal modo al decir estas últimas palabras, que me asustó mucho y corrí a la habitación en que estaba el club para llamar a su marido, que lo presidía sentado al final de una mesa muy larga, cantando a voz en grito con todos los demás:
Gee up, Dobbin, Gee up, Dobbin
Gee ho, Dobbin, Gee up, Dobbin
Gee up, Dobbin, Gee up, Dobbin
Gee up, and gee ho—o—o! Gee up, and gee ho—o—o!
′Emma, my angel!′ cried Mr. Micawber, running into the room; ′what is the matter?′ -¡Emma, ángel mío! - gritó, entrando en la habitación-. ¿Qué te pasa?
′I never will desert you, Micawber!′ she exclaimed. -¡Nunca te abandonaré, Micawber! --exclamó ella.
′My life!′ said Mr. Micawber, taking her in his arms. ′I am perfectly aware of it.′ -¡Mi vida! -dijo él, cogiéndola en sus brazos-. Estoy completamente seguro de ello.
′He is the parent of my children! He is the father of my twins! He is the husband of my affections,′ cried Mrs. Micawber, struggling; ′and I ne—ver—will—desert Mr. Micawber!′ -Es el padre de mis hijos, el padre de mis mellizos, el esposo de mi alma -grito mistress Micawber-. ¡Nunca, nunca le abandonaré!
Mr. Micawber was so deeply affected by this proof of her devotion (as to me, I was dissolved in tears), that he hung over her in a passionate manner, imploring her to look up, and to be calm. But the more he asked Mrs. Micawber to look up, the more she fixed her eyes on nothing; and the more he asked her to compose herself, the more she wouldn′t. Consequently Mr. Micawber was soon so overcome, that he mingled his tears with hers and mine; until he begged me to do him the favour of taking a chair on the staircase, while he got her into bed. I would have taken my leave for the night, but he would not hear of my doing that until the strangers′ bell should ring. So I sat at the staircase window, until he came out with another chair and joined me. Míster Micawber estaba tan profundamente afectado por aquella prueba de cariño (como yo, que lloraba a lágrima viva), que la abrazó de un modo apasionado, rogándole que le mirase y se tranquilizara. Pero cuanto más le pedía que le mirase más se fijaban sus ojos en el vacío, y cuanto más le pedía que se tranquilizara menos tranquila estaba. Por lo tanto, pronto se contagió Micawber y mezcló sus lágrimas con las de su mujer y las mías. Por último me pidió que saliera con una silla a la escalera mientras él la acostaba. Hubiera querido marcharme ya; pero Micawber no lo consintió, porque todavía no había sonado la campana para la salida de los visitantes. Por lo tanto me senté en la ventana de la escalera hasta que él llegó con otra silla a hacerme compañía.
′How is Mrs. Micawber now, sir?′ I said. -¿Cómo está su esposa? --dije.
′Very low,′ said Mr. Micawber, shaking his head; ′reaction. Ah, this has been a dreadful day! We stand alone now—everything is gone from us!′ -Muy abatida -dijo míster Micawber sacudiendo la cabeza-, es la reacción. ¡Ah! ¡Es que ha sido un día terrible! Y ahora estamos solos en el mundo y sin el menor recurso.
Mr. Micawber pressed my hand, and groaned, and afterwards shed tears. I was greatly touched, and disappointed too, for I had expected that we should be quite gay on this happy and long-looked-for occasion. But Mr. and Mrs. Micawber were so used to their old difficulties, I think, that they felt quite shipwrecked when they came to consider that they were released from them. All their elasticity was departed, and I never saw them half so wretched as on this night; insomuch that when the bell rang, and Mr. Micawber walked with me to the lodge, and parted from me there with a blessing, I felt quite afraid to leave him by himself, he was so profoundly miserable. Míster Micawber me estrechó la mano, gimió y después se echó a llorar. Yo estaba muy conmovido y desconcertado, pues esperaba que estuvieran muy alegres en aquella ocasión tan esperada. Pero pienso que los Micawber estaban tan acostumbrados a sus antiguos apuros, que se sentían desconcertados al verse libres de ellos. Toda la flexibilidad de su carácter había desaparecido, y nunca les había visto tan tristes como aquella tarde. A1 oír la campana míster Micawber me acompañó hasta la verja y me dio su bendición al despedirnos. Yo me sentía verdaderamente inquieto al dejarlo solo, tan profundamente triste como estaba.
But through all the confusion and lowness of spirits in which we had been, so unexpectedly to me, involved, I plainly discerned that Mr. and Mrs. Micawber and their family were going away from London, and that a parting between us was near at hand. It was in my walk home that night, and in the sleepless hours which followed when I lay in bed, that the thought first occurred to me—though I don′t know how it came into my head—which afterwards shaped itself into a settled resolution. Pero a través de la confusión y abatimiento que nos había apresado de una manera tan inesperada para mí, veía claramente que mister y mistress Micawber iban a abandonar Londres y que la separación entre nosotros era inminente. Y fue al volver aquella tarde a casa, y durante las horas sin sueño que siguieron, cuando concebí por primera vez, no sé cómo, un pensamiento que pronto se convirtió en una firme resolución.
I had grown to be so accustomed to the Micawbers, and had been so intimate with them in their distresses, and was so utterly friendless without them, that the prospect of being thrown upon some new shift for a lodging, and going once more among unknown people, was like being that moment turned adrift into my present life, with such a knowledge of it ready made as experience had given me. All the sensitive feelings it wounded so cruelly, all the shame and misery it kept alive within my breast, became more poignant as I thought of this; and I determined that the life was unendurable. Me había unido tan íntimamente con los Micawber; me había implicado tanto en sus desgracias, y estaba tan absolutamente desprovisto de amigos, que la perspectiva de verme obligado de nuevo a buscar alojamiento para vivir entre extraños parecía volver a arrojarme contra la corriente de esta vida, demasiado conocida ahora para ignorar lo que me esperaba. Todos los sentimientos delicados que esta existencia he ría; toda la vergÜenza y el sufrimiento que despertaba en mí se me hicieron tan dolorosos, que, reflexionando, decidí que aquella vida me era intolerable.
That there was no hope of escape from it, unless the escape was my own act, I knew quite well. I rarely heard from Miss Murdstone, and never from Mr. Murdstone: but two or three parcels of made or mended clothes had come up for me, consigned to Mr. Quinion, and in each there was a scrap of paper to the effect that J. M. trusted D. C. was applying himself to business, and devoting himself wholly to his duties—not the least hint of my ever being anything else than the common drudge into which I was fast settling down. Yo no podía esperar otro medio para escapar a ella que por mi propio esfuerzo; lo sabía. Rara vez oía hablar de miss Murdstone, y de su hermano, nunca. Pero dos o tres paquetes de ropa nueva o arreglada habían sido enviados para mí a míster Quinion, acompañados de un trozo de papel arrugado que decía: «M. M. espera que D. C. se aplique a cumplir bien sus deberes», sin dejar entrever la menor esperanza de que algún día pudieran llegar tiempos mejores.
The very next day showed me, while my mind was in the first agitation of what it had conceived, that Mrs. Micawber had not spoken of their going away without warrant. They took a lodging in the house where I lived, for a week; at the expiration of which time they were to start for Plymouth. Mr. Micawber himself came down to the counting-house, in the afternoon, to tell Mr. Quinion that he must relinquish me on the day of his departure, and to give me a high character, which I am sure I deserved. And Mr. Quinion, calling in Tipp the carman, who was a married man, and had a room to let, quartered me prospectively on him—by our mutual consent, as he had every reason to think; for I said nothing, though my resolution was now taken. Al día siguiente me convencí, mientras mi espíritu estaba todavía en la inquietud del plan que había concebido, que mistress Micawber no había hablado sin motivo de la probabilidad de su partida. Se alojaron en la casa en que yo vivía durante una semana, y cuando expiró el plazo pensaban partir para Plimouth. El mismo míster Micawber fue al almacén aquella tarde para anunciar a míster Quinion que su marcha le obligaba a renunciar a mi compañía y para decirle de mí, según creo, todo el bien que merecía. En vista de esto, mister Quinion llamó a Tipp el carretero, que estaba casado y tenía una habitación para alquilar, y la tomó para mí. Debió de tener sus razones para creer que era con nuestro mutuo consentimiento, aunque yo no dije nada; pero mi resolución estaba tomada.
I passed my evenings with Mr. and Mrs. Micawber, during the remaining term of our residence under the same roof; and I think we became fonder of one another as the time went on. On the last Sunday, they invited me to dinner; and we had a loin of pork and apple sauce, and a pudding. I had bought a spotted wooden horse over-night as a parting gift to little Wilkins Micawber—that was the boy—and a doll for little Emma. I had also bestowed a shilling on the Orfling, who was about to be disbanded. Pasé las veladas con míster y mistress Micawber durante el tiempo que nos quedaba todavía por vivir bajo el mismo techo, y creo que nuestra amistad aumentaba a medida que el momento de nuestra separación se aproximaba. El último domingo me invitaron a comer y tomamos un trozo de cerdo fresco con salsa picante y un pudding. Yo había comprado la víspera un caballo de madera pintado para regalárselo al pequeño Wilkins Micawber y una muñeca para la pequeña Emma; también di un chelín a la huérfana, que perdía su colocación.
We had a very pleasant day, though we were all in a tender state about our approaching separation. Pasamos un día muy agradable, aunque todos estábamos conmovidos pensando en la separación.
′I shall never, Master Copperfield,′ said Mrs. Micawber, ′revert to the period when Mr. Micawber was in difficulties, without thinking of you. Your conduct has always been of the most delicate and obliging description. You have never been a lodger. You have been a friend.′ -Copperfield: nunca podré recordar las dificultades de Micawber sin pensar en usted. Usted se ha portado siempre con nosotros de la manera más delicada y más de agradecer. Usted no ha sido un huésped: ha sido un amigo.
′My dear,′ said Mr. Micawber; ′Copperfield,′ for so he had been accustomed to call me, of late, ′has a heart to feel for the distresses of his fellow-creatures when they are behind a cloud, and a head to plan, and a hand to—in short, a general ability to dispose of such available property as could be made away with.′ -Querida mía -dijo su marido- : Copperfield time un corazón sensible a las desgracias de los demás, una cabeza capaz de razonar y unas manos... En resumen: un talento incomparable para sacar provecho de todo aquello de que se puede prescindir.
I expressed my sense of this commendation, and said I was very sorry we were going to lose one another. Expresé mi reconocimiento por aquel cumplido, y dije que estaba muy triste por tener que separarme de ellos.
′My dear young friend,′ said Mr. Micawber, ′I am older than you; a man of some experience in life, and—and of some experience, in short, in difficulties, generally speaking. At present, and until something turns up (which I am, I may say, hourly expecting), I have nothing to bestow but advice. Still my advice is so far worth taking, that—in short, that I have never taken it myself, and am the′—here Mr. Micawber, who had been beaming and smiling, all over his head and face, up to the present moment, checked himself and frowned—′the miserable wretch you behold.′ -Querido amigo --dijo mister Micawber-: yo soy mayor que usted y tengo alguna experiencia en la vida y en... En una palabra: en dificultades de todas clases, para hablar de un modo general. Por el momento, y hasta que surja algo (lo que espero siempre) no le puedo ofrecer otra cosa que mis consejos; sin embargo, creo que valen la pena de ser escuchados, sobre todo... En una palabra: porque yo nunca los he seguido... y que... Aquí mister Micawber, que sonreía y me miraba con expresión radiante, se detuvo frunciendo las cejas, y prosiguió: -Y usted ve lo desgraciado que soy.
′My dear Micawber!′ urged his wife. -Mi querido Micawber -exclamó su mujer.
′I say,′ returned Mr. Micawber, quite forgetting himself, and smiling again, ′the miserable wretch you behold. My advice is, never do tomorrow what you can do today. Procrastination is the thief of time. Collar him!′ -Digo -replicó mister Micawber, sin preocuparse de sí mismo y sonriendo de nuevo- lo desgraciado que he sido. Mi consejo es este: < Nunca dejes para mañana lo que puedas hacer hoy» . Demorar cualquier cosa es un robo hecho al tiempo. ¡Hay que aprenderlo!
′My poor papa′s maxim,′ Mrs. Micawber observed. -Era la máxima de mi pobre papá -dijo mistress Micawber.
′My dear,′ said Mr. Micawber, ′your papa was very well in his way, and Heaven forbid that I should disparage him. Take him for all in all, we ne′er shall—in short, make the acquaintance, probably, of anybody else possessing, at his time of life, the same legs for gaiters, and able to read the same description of print, without spectacles. But he applied that maxim to our marriage, my dear; and that was so far prematurely entered into, in consequence, that I never recovered the expense.′ Mr. Micawber looked aside at Mrs. Micawber, and added: ′Not that I am sorry for it. Quite the contrary, my love.′ After which, he was grave for a minute or so. -Querida mía -dijo él- tu papá era un hombre muy bueno, y Dios me libre de querer rebajarlo; es más, hasta es probable... que.... en una palabra, jamás conoceremos a un hombre de su edad que tenga los pantalones tan bien puestos y que sea capaz de leer una letra tan pequeña sin anteojos; pero él aplicó esta máxima a nuestro matrimonio, querida mía, con tal premura, que todavía no me he repuesto de aquel gasto precipitado. Míster Micawber lanzó una ojeada a su señora y añadió: -No es que me pese, al contrario, amor mío. Después de lo cual guardó silencio durante un momento.
′My other piece of advice, Copperfield,′ said Mr. Micawber, ′you know. Annual income twenty pounds, annual expenditure nineteen nineteen and six, result happiness. Annual income twenty pounds, annual expenditure twenty pounds ought and six, result misery. The blossom is blighted, the leaf is withered, the god of day goes down upon the dreary scene, and—and in short you are for ever floored. As I am!′ -Mi segundo consejo, Copperfield, ya lo conoce usted: renta anual de veinte libras, gasto anual de diecinueve; resultado, felicidad. Renta anual de veinte libras, gasto anual de veinte y media; resultado, miseria. La flor está marchita, la hoja cae, el ángel de la guarda desaparece y..., en una palabra, se ha hundido usted para siempre, como yo.
To make his example the more impressive, Mr. Micawber drank a glass of punch with an air of great enjoyment and satisfaction, and whistled the College Hornpipe. Y para hacer su ejemplo más impresionante, míster Micawber se bebió un vaso de ponche con gran alegría y satisfacción y silbó una cancioncilla del colegio.
I did not fail to assure him that I would store these precepts in my mind, though indeed I had no need to do so, for, at the time, they affected me visibly. Next morning I met the whole family at the coach office, and saw them, with a desolate heart, take their places outside, at the back. Le aseguré que nunca perdería de vista aquellos preceptos, lo que era bastante inútil, pues era evidente que me afectaba. A la mañana siguiente, muy temprano, me reuní con la familia en las oficinas de la diligencia y les vi con tristeza colocarse en la imperial.
′Master Copperfield,′ said Mrs. Micawber, ′God bless you! I never can forget all that, you know, and I never would if I could.′ -Copperfield -dijo mistress Micawber-, ¡Dios le bendiga! Nunca podré olvidarle, y aunque pudiera, no querría.
′Copperfield,′ said Mr. Micawber, ′farewell! Every happiness and prosperity! If, in the progress of revolving years, I could persuade myself that my blighted destiny had been a warning to you, I should feel that I had not occupied another man′s place in existence altogether in vain. In case of anything turning up (of which I am rather confident), I shall be extremely happy if it should be in my power to improve your prospects.′ -Copperfield-dijo míster Micawber-, adiós; que la felicidad y la prosperidad le acompañen. Si al cabo de los años pudiera creer que mi suerte desgraciada le ha servido de lección, pensaré que no he ocupado en vano el lugar de otro hombre en la tierra. Y si surgiera algo (siempre cuento con ello) sería extraordinariamente dichoso si pudiera ayudarle en sus proyectos respecto del porvenir.
I think, as Mrs. Micawber sat at the back of the coach, with the children, and I stood in the road looking wistfully at them, a mist cleared from her eyes, and she saw what a little creature I really was. I think so, because she beckoned to me to climb up, with quite a new and motherly expression in her face, and put her arm round my neck, and gave me just such a kiss as she might have given to her own boy. I had barely time to get down again before the coach started, and I could hardly see the family for the handkerchiefs they waved. It was gone in a minute. The Orfling and I stood looking vacantly at each other in the middle of the road, and then shook hands and said good-bye; she going back, I suppose, to St. Luke′s workhouse, as I went to begin my weary day at Murdstone and Grinby′s. Pienso que mistress Micawber, que estaba sentada en la imperial con los niños, mirándome mientras yo permanecía de pie en la carretera contemplándolos tristemente, se percató de pronto de que en realidad era yo un niño muy pequeño y muy débil; lo creo porque me hizo seña de que subiera a su lado con una expresión completamente nueva y maternal en su rostro, me cogió en sus brazos y me besó como hubiera podido besar a su hijo. Tuve el tiempo justo de bajar antes de que partiera la diligencia y apenas podía distinguir a mis amigos entre los pañuelos que agitaban. En un minuto todo desapareció. Nos quedamos en medio de la carretera la huérfana y yo, mirándonos tristemente; luego, después de estrecharnos la mano, ella tomó el camino del Hospicio de San Lucas y yo fui a empezar mi jornada en Murdstone y Grimby.
But with no intention of passing many more weary days there. No. I had resolved to run away.—-To go, by some means or other, down into the country, to the only relation I had in the world, and tell my story to my aunt, Miss Betsey. I have already observed that I don′t know how this desperate idea came into my brain. But, once there, it remained there; and hardened into a purpose than which I have never entertained a more determined purpose in my life. I am far from sure that I believed there was anything hopeful in it, but my mind was thoroughly made up that it must be carried into execution. Pero no tenía intención de continuar aquella vida tan penosa. Estaba decidido a huir, a ir de un modo o de otro a bus car en el campo a la única parienta que tenía en el mundo y a contarle mi historia: a la tía Betsey. Ya he hecho observar que no sabía cómo aquel proyecto desesperado había germinado en mi espíritu; pero una vez en ello, ¡ni determinación fue tan inquebrantable como todas las que he podido tomar después en mi vida. No estoy seguro de que mis esperanzas fuesen muy vivas; pero estaba decidido a ejecutarlo.
Again, and again, and a hundred times again, since the night when the thought had first occurred to me and banished sleep, I had gone over that old story of my poor mother′s about my birth, which it had been one of my great delights in the old time to hear her tell, and which I knew by heart. My aunt walked into that story, and walked out of it, a dread and awful personage; but there was one little trait in her behaviour which I liked to dwell on, and which gave me some faint shadow of encouragement. I could not forget how my mother had thought that she felt her touch her pretty hair with no ungentle hand; and though it might have been altogether my mother′s fancy, and might have had no foundation whatever in fact, I made a little picture, out of it, of my terrible aunt relenting towards the girlish beauty that I recollected so well and loved so much, which softened the whole narrative. It is very possible that it had been in my mind a long time, and had gradually engendered my determination. Cien veces desde la noche en que lo había concebido había dado vueltas en mi espíritu a la historia de mi nacimiento, que tanto me había gustado hacer contar a mi pobre madre, y que me sabía de memoria. Mi tía hacía una aparición rápida y terrible; pero había en todo aquello una particularidad que me gustaba recordar y que me daba algunas esperanzas. No podía olvidar que a mi madre le había parecido sentirla acariciar suavemente sus cabellos, y aunque aquello podía ser una idea sin ningún fundamento, yo me hacía un bonito cuadro del instante en que mi terrible tía se había conmovido ante aquella belleza infantil que yo recordaba tan bien y que me era tan querida, y aquel pequeño episodio aclaraba dulcemente todo el cuadro. Quizá fuera aquel el germen que después de vivir en mi espíritu había engendrado gradualmente mi determinación.
As I did not even know where Miss Betsey lived, I wrote a long letter to Peggotty, and asked her, incidentally, if she remembered; pretending that I had heard of such a lady living at a certain place I named at random, and had a curiosity to know if it were the same. In the course of that letter, I told Peggotty that I had a particular occasion for half a guinea; and that if she could lend me that sum until I could repay it, I should be very much obliged to her, and would tell her afterwards what I had wanted it for. Como ni siquiera sabía dónde habitaba miss Betsey, escribí una larga carta a Peggotty en la que le preguntaba de una manera casual si recordaba el lugar de su residencia, diciendo que había oído hablar de una señora que vivía en un sitio, que nombré al azar, y que sentía curiosidad por saber si no sería ella. También en aquella carta le decía que tenía mucha necesidad de media guinea, y que si pudiera prestármela se lo agradecería mucho, reservándome para decirle más adelante, al devolvérsela, lo que me había obligado a pedirle aquella suma.
Peggotty′s answer soon arrived, and was, as usual, full of affectionate devotion. She enclosed the half guinea (I was afraid she must have had a world of trouble to get it out of Mr. Barkis′s box), and told me that Miss Betsey lived near Dover, but whether at Dover itself, at Hythe, Sandgate, or Folkestone, she could not say. One of our men, however, informing me on my asking him about these places, that they were all close together, I deemed this enough for my object, and resolved to set out at the end of that week. La contestación de Peggotty llegó pronto y fue, como de costumbre, llena de cariño y abnegación. Incluía la media guinea (me asusta pensar todo lo que habría tenido que trabajar y que ingeniarse para conseguir que saliera de la caja de Barkis), y me contaba que miss Betsey vivía cerca de Dover; pero si era en Dover mismo, o en Hy the Landgate, o en Folkes tone, no podía decirlo. Uno de nuestros hombres me informó, cuando le pregunté acerca de aquellos sitios, que estaban muy próximos unos de otros.
Being a very honest little creature, and unwilling to disgrace the memory I was going to leave behind me at Murdstone and Grinby′s, I considered myself bound to remain until Saturday night; and, as I had been paid a week′s wages in advance when I first came there, not to present myself in the counting-house at the usual hour, to receive my stipend. For this express reason, I had borrowed the half-guinea, that I might not be without a fund for my travelling-expenses. Accordingly, when the Saturday night came, and we were all waiting in the warehouse to be paid, and Tipp the carman, who always took precedence, went in first to draw his money, I shook Mick Walker by the hand; asked him, when it came to his turn to be paid, to say to Mr. Quinion that I had gone to move my box to Tipp′s; and, bidding a last good night to Mealy Potatoes, ran away. Me pareció que ya sabía bastante para mi objetivo, y resolví marcharme a fines de semana. Siendo una criaturita muy honrada y no queriendo enturbiar el recuerdo que dejaba en Murdstone y Grimby, consideré como una obligación permanecer hasta el sábado por la noche, y como me habían pagado una semana adelantada, me fui temprano, para no tener que presentarme a la hora de cobrar en la caja. Por esta misma razón había pedido la media guinea a Peggotty, para no encontrarme sin dinero para los gastos del viaje. Por lo tanto, cuando llegó el sábado por la noche y nos reunimos todos para que nos pagasen, Tipp el carretero pasó, como siempre, el primero al despacho. Yo estreché la mano de Mick Walker, rogándole que cuando me llamaran entrase y le dijera a míster Quinion que había ido a llevar mi maleta a casa de Tipp, dije adiós a Fécula de patata y me fui.
My box was at my old lodging, over the water, and I had written a direction for it on the back of one of our address cards that we nailed on the casks: ′Master David, to be left till called for, at the Coach Office, Dover.′ This I had in my pocket ready to put on the box, after I should have got it out of the house; and as I went towards my lodging, I looked about me for someone who would help me to carry it to the booking-office. Mi maleta continuaba en mi antiguo alojamiento al otro lado del río. Había preparado, para pegar en ella, una dirección escrita en el respaldo de una de las tarjetas de expedición que pegábamos en las cajas: «Míster David enviará a buscarla a la oficina de la diligencia de Dover». Tenía la tarjeta en el bolsillo y pensaba pegarla en cuanto estuviera fuera de la casa. Mientras andaba miraba a mi alrededor, para ver si encontraba a alguien que pudiera ayudarme a llevarla.
There was a long-legged young man with a very little empty donkey-cart, standing near the Obelisk, in the Blackfriars Road, whose eye I caught as I was going by, and who, addressing me as ′Sixpenn′orth of bad ha′pence,′ hoped ′I should know him agin to swear to′—in allusion, I have no doubt, to my staring at him. I stopped to assure him that I had not done so in bad manners, but uncertain whether he might or might not like a job. En esto vi a un muchacho de piernas largas, que llevaba un carrito enganchado a un burro y que estaba cerca del obelisco en el camino de Blackfriars; al pasar me encontré con su mirada y me preguntó si le reconocería bien si le volvía a ver, aludiendo sin duda a la fijeza con que le había examinado. Me apresuré a asegurarle que no había sido po r descortesía, sino que estaba pensando si no quería encargarse de un trabajo.
′Wot job?′ said the long-legged young man. -¿Qué trabajo? -preguntó el muchacho de las piernas lanzas.
′To move a box,′ I answered. -Llevar una maleta -contesté.
′Wot box?′ said the long-legged young man. -¿Qué maleta? - insistió el joven.
I told him mine, which was down that street there, and which I wanted him to take to the Dover coach office for sixpence. Lo dije que la mía, que estaba allí, en aquella misma calle, y que deseaba que por seis peniques me la llevaran a la diligencia de Dover.
′Done with you for a tanner!′ said the long-legged young man, and directly got upon his cart, which was nothing but a large wooden tray on wheels, and rattled away at such a rate, that it was as much as I could do to keep pace with the donkey. -Vaya por los seis peniques -dijo el muchacho. Y subiendo al instante en su carrito, que se componía de tres tablas puestas sobre las ruedas, partió tan diligente en la d irección indicada, que me costaba trabajo seguir el paso de su burro.
There was a defiant manner about this young man, and particularly about the way in which he chewed straw as he spoke to me, that I did not much like; as the bargain was made, however, I took him upstairs to the room I was leaving, and we brought the box down, and put it on his cart. Now, I was unwilling to put the direction-card on there, lest any of my landlord′s family should fathom what I was doing, and detain me; so I said to the young man that I would be glad if he would stop for a minute, when he came to the dead-wall of the King′s Bench prison. The words were no sooner out of my mouth, than he rattled away as if he, my box, the cart, and the donkey, were all equally mad; and I was quite out of breath with running and calling after him, when I caught him at the place appointed. Tenía unos modales desconcertantes aquel muchacho y una manera muy molesta de mascar una brizna de paja al ha blar; pero el trato estaba hecho. Le hice subir a la habitación que dejaba, cogió la maleta, la bajó y la puso en su carrito. Yo no quería todavía poner la dirección, por temor a que alguien de la familia de mi propietario adivinara mis designios; le rogué, por lo tanto, que se detuviera al llegar a la gran pared de la prisión de Bench King. Apenas hube pronunciado estas palabras cuando partió como si él, mi maleta, el carrito y el asno se hubieran vuelto locos. Yo perdía la respiración a fuerza de correr y de llamarle, hasta que le alcancé en el sitio indicado.
Being much flushed and excited, I tumbled my half-guinea out of my pocket in pulling the card out. I put it in my mouth for safety, and though my hands trembled a good deal, had just tied the card on very much to my satisfaction, when I felt myself violently chucked under the chin by the long-legged young man, and saw my half-guinea fly out of my mouth into his hand. Estaba rojo y excitado, y al sacar la tarjeta dejé caer de mi bolsillo la media guinea. Me la metí en la boca para mayor seguridad, y aunque mis manos temblaban mucho, conseguí, con gran satisfacción, colocar la tarjeta. De pronto recibí un violento golpe en la barbilla, que me dio el chico de las piernas largas, y vi mi media guinea pasar de mi boca a sus ma nos.
′Wot!′ said the young man, seizing me by my jacket collar, with a frightful grin. ′This is a pollis case, is it? You′re a-going to bolt, are you? Come to the pollis, you young warmin, come to the pollis!′ -Vamos -dijo el joven agarrándome por el cuello de la chaqueta con un horrible gesto-, asunto de policía, ¿no es verdad? Y quieres huir, ¿no es así? ¡Ven, ven a la policía, granuja! ¡Ven a la comisaría!
′You give me my money back, if you please,′ said I, very much frightened; ′and leave me alone.′ -Déme mi dinero, haga el favor -dije yo, muy asustado-, y déjeme en paz.
′Come to the pollis!′ said the young man. ′You shall prove it yourn to the pollis.′ -Ven a la comisaría, y allí demostrarás que es tuya.
′Give me my box and money, will you,′ I cried, bursting into tears. -Deme mi maleta y mi dinero, ¿quiere usted? -grité deshecho en lágrimas.
The young man still replied: ′Come to the pollis!′ and was dragging me against the donkey in a violent manner, as if there were any affinity between that animal and a magistrate, when he changed his mind, jumped into the cart, sat upon my box, and, exclaiming that he would drive to the pollis straight, rattled away harder than ever. El joven todavía replicó: «Ven a la comisaría», arrastrándome con violencia al lado del asno, como si hubiera alguna relación entre aquel animal y un magistrado. Después, cambiando de pronto de opinión, saltó al carrito, se sentó encima de la maleta y, diciendo que iba derecho a la comisaría, partió más deprisa que nunca.
I ran after him as fast as I could, but I had no breath to call out with, and should not have dared to call out, now, if I had. I narrowly escaped being run over, twenty times at least, in half a mile. Now I lost him, now I saw him, now I lost him, now I was cut at with a whip, now shouted at, now down in the mud, now up again, now running into somebody′s arms, now running headlong at a post. At length, confused by fright and heat, and doubting whether half London might not by this time be turning out for my apprehension, I left the young man to go where he would with my box and money; and, panting and crying, but never stopping, faced about for Greenwich, which I had understood was on the Dover Road: taking very little more out of the world, towards the retreat of my aunt, Miss Betsey, than I had brought into it, on the night when my arrival gave her so much umbrage. Corrí tras él todo lo que pude; pero no tenía aliento para llamarle, ni me hubiera atrevido a hacerlo aunque hubiera podido. En un cuarto de hora estuve veinte veces a punto de que me atropellaran; tan pronto veía a mi ladrón como desaparecía a mis ojos; después volvía a verle; después recibía un latigazo de cualquier carretero; después me insultaban, caía en el barro, me levantaba, chocaba contra alguien, o me precipitaba contra un poste. Por fin, sofocado por la camera y turbado por el miedo de ver que Londres entero se pusiera a perseguirme, dejé al joven que se llevase mi maleta y mi dinero donde quisiera. Ahogado y todavía llorando seguí, sin detenerme, el camino de Greenwich, que estaba en el camino de Dover, según había oído decir, llevando hacia el retiro de mi tía Betsey una parte de mis bienes casi tan pequeña como la que traía la noche en que mi nacimiento tanto le enfureció.
"Emma"

CHAPTER 13.

CAPÍTULO XIII

THE SEQUEL OF MY RESOLUTION

EL RESULTADO DE MI RESOLUCIÓN

For anything I know, I may have had some wild idea of running all the way to Dover, when I gave up the pursuit of the young man with the donkey-cart, and started for Greenwich. My scattered senses were soon collected as to that point, if I had; for I came to a stop in the Kent Road, at a terrace with a piece of water before it, and a great foolish image in the middle, blowing a dry shell. Here I sat down on a doorstep, quite spent and exhausted with the efforts I had already made, and with hardly breath enough to cry for the loss of my box and half-guinea. No sé nada; pero creo que pensaba seguir corriendo pasta Dover cuando renuncié a la persecución del muchacho del carrito y tomé el camino de Greenwich. En todo caso, mis ilusiones se desvanecieron pronto; me vi obligado a detenerme en la carretera de Kent, cerca de una terraza que adornaba una fuente con una gran estatua en el centro. Allí me senté en el umbral de una puerta, agotado por los esfuerzos que acababa de hacer, y tan sofocado, que apenas si tenía fuerzas para llorar, pensando en mi maleta y en mi media guinea.
It was by this time dark; I heard the clocks strike ten, as I sat resting. But it was a summer night, fortunately, and fine weather. When I had recovered my breath, and had got rid of a stifling sensation in my throat, I rose up and went on. In the midst of my distress, I had no notion of going back. I doubt if I should have had any, though there had been a Swiss snow-drift in the Kent Road. Se había hecho de noche, y mientras descansaba oí dar las diez en los relojes; pero era verano y hacía calor. Cuando recobré alientos y me tranquilicé emprendí de nuevo el camino de Greenwich. Ni por un momento se me ocurrió volverme atrás. No sé si se me hubiera ocurrido en el caso de encontrarme un precipicio en medio del camino.
But my standing possessed of only three-halfpence in the world (and I am sure I wonder how they came to be left in my pocket on a Saturday night!) troubled me none the less because I went on. I began to picture to myself, as a scrap of newspaper intelligence, my being found dead in a day or two, under some hedge; and I trudged on miserably, though as fast as I could, until I happened to pass a little shop, where it was written up that ladies′ and gentlemen′s wardrobes were bought, and that the best price was given for rags, bones, and kitchen-stuff. The master of this shop was sitting at the door in his shirt-sleeves, smoking; and as there were a great many coats and pairs of trousers dangling from the low ceiling, and only two feeble candles burning inside to show what they were, I fancied that he looked like a man of a revengeful disposition, who had hung all his enemies, and was enjoying himself. Pero la escasez de mis recursos (tenía tres medios peniques en el bolsillo y me pregunto cómo estarían allí siendo sábado) no dejaba de preocuparme, a pesar de mi perseverancia. Empezaba a figurarme un artículo en los periódicos anunciando que me habían encontrado muerto bajo un árbol, y andaba tristemente, aunque todo lo más deprisa que podían mis piernas, cuando pasé por delante de una puerta donde ponía que se compraban trajes de hombre y de mujer y que pagaban bien los huesos y los trapos viejos. El dueño de la tienda estaba sentado a la puerta en mangas de camisa, con la pipa en la boca; había muchos trajes y pantalones suspendidos del techo, y todo aquello sólo estaba alumbrado por dos candiles, de manera que parecía un hombre que hubiera colgado allí a sus enemigos y se regocijara con su venganza.
My late experiences with Mr. and Mrs. Micawber suggested to me that here might be a means of keeping off the wolf for a little while. I went up the next by-street, took off my waistcoat, rolled it neatly under my arm, and came back to the shop door. La experiencia que había adquirido con mistress Micawber me sugirió, a la vista de aquello, un medio de alejar algo el golpe fatal. Entré en una callejuela, me quité el chaleco, lo doblé cuidadosamente y me presenté en la puerta de la tienda.
′If you please, sir,′ I said, ′I am to sell this for a fair price.′ -¿Hace usted el favor? -le dije- Quiero vender esto en lo que valga.
Mr. Dolloby—Dolloby was the name over the shop door, at least—took the waistcoat, stood his pipe on its head, against the door-post, went into the shop, followed by me, snuffed the two candles with his fingers, spread the waistcoat on the counter, and looked at it there, held it up against the light, and looked at it there, and ultimately said: El señor Dollby (al menos Dollby era el nombre que se leía encima de la puerta de la tienda) cogió el chaleco, Puso la pipa en el montante de la puerta, por encima de su cabeza, entró en la tienda seguido Por mí, avivó los candiles con sus dedos, extendió el chaleco sobre el mostrador y lo miró. Después acercó la luz para verlo mejor, y por último dijo:
′What do you call a price, now, for this here little weskit?′ -¿Cuánto pide usted por este chalequito?
′Oh! you know best, sir,′ I returned modestly. -Mejor sabrá usted ponerle precio que yo -contesté con modestia.
′I can′t be buyer and seller too,′ said Mr. Dolloby. ′Put a price on this here little weskit.′ -No puedo comprar y vender al mismo tiempo -dijo míster Dollby-; póngale usted precio.
′Would eighteenpence be?′—I hinted, after some hesitation. -Dieciocho peniques -insinué, después de muchas cavilaciones.
Mr. Dolloby rolled it up again, and gave it me back. ′I should rob my family,′ he said, ′if I was to offer ninepence for it.′ Míster Dollby lo dobló de nuevo y me lo devolvió. -Sería robar a mi familia - me dijo- el ofrecer nueve peniques por él.
This was a disagreeable way of putting the business; because it imposed upon me, a perfect stranger, the unpleasantness of asking Mr. Dolloby to rob his family on my account. My circumstances being so very pressing, however, I said I would take ninepence for it, if he pleased. Mr. Dolloby, not without some grumbling, gave ninepence. I wished him good night, and walked out of the shop the richer by that sum, and the poorer by a waistcoat. But when I buttoned my jacket, that was not much. Indeed, I foresaw pretty clearly that my jacket would go next, and that I should have to make the best of my way to Dover in a shirt and a pair of trousers, and might deem myself lucky if I got there even in that trim. But my mind did not run so much on this as might be supposed. Beyond a general impression of the distance before me, and of the young man with the donkey-cart having used me cruelly, I think I had no very urgent sense of my difficulties when I once again set off with my ninepence in my pocket. Esto era mirar el asunto desde un punto de vista desagradable, pues suponía en mí, que era un extraño, la antipática pretensión de querer que míster Dollby robara a su familia en provecho mío. Sin embargo, como no podía esperar, le dije que si quería tomaría los nueve peniques. Míster Dollby, no sin gruñir bastante, me los dio. Le di las buenas noches y salí de la tienda con aquella suma de más y el chaleco de menos; pero abrochándome la chaqueta, ¡qué más daba! En realidad estaba convencido de que la chaqueta tendría que seguir al chaleco y me consideraría muy dichoso si llegaba a Dover aunque sólo fuera con el pantalón y la camisa. Aquella perspectiva no me preocupaba tanto como se podría suponer. Salvo una impresión general de que el camino era largo y de que el dueño del burro se había portado cruelmente conmigo, creo que tenía un sentimiento demasiado claro de la dificultad de mi empresa cuando volví a ponerme en camino con mis nueve peniques en el bolsillo.
A plan had occurred to me for passing the night, which I was going to carry into execution. This was, to lie behind the wall at the back of my old school, in a corner where there used to be a haystack. I imagined it would be a kind of company to have the boys, and the bedroom where I used to tell the stories, so near me: although the boys would know nothing of my being there, and the bedroom would yield me no shelter. Se me había ocurrido una idea para pasar la noche. Mi plan era acostarme al lado de la tapia de mi antigua escuela, en un rincón donde antes solía ha ber un almiar. Imaginaba que me sería grato el tener a los chicos y la habitación donde acostumbraba a contar las historias tan cerca de mí, aunque ellos no supieran nada y la habitación no me prestara su abrigo.
I had had a hard day′s work, and was pretty well jaded when I came climbing out, at last, upon the level of Blackheath. It cost me some trouble to find out Salem House; but I found it, and I found a haystack in the corner, and I lay down by it; having first walked round the wall, and looked up at the windows, and seen that all was dark and silent within. Never shall I forget the lonely sensation of first lying down, without a roof above my head! Había hecho una dura jornada y estaba muy cansado cuando llegué, por fin, a la altura de Blackhead. Me costó algún trabajo encontrar Salem House; pero al fin la encontré, y hallé el almiar en el rincón, y me acosté en él después de dar la vuelta a la escuela y mirar hacia las ventanas. Todo estaba oscuro y silencioso. Nunca olvidaré la sensación de soledad del primer momento al acostarme en el suelo sin un techo sobre mi cabeza.
Sleep came upon me as it came on many other outcasts, against whom house-doors were locked, and house-dogs barked, that night—and I dreamed of lying on my old school-bed, talking to the boys in my room; and found myself sitting upright, with Steerforth′s name upon my lips, looking wildly at the stars that were glistening and glimmering above me. When I remembered where I was at that untimely hour, a feeling stole upon me that made me get up, afraid of I don′t know what, and walk about. But the fainter glimmering of the stars, and the pale light in the sky where the day was coming, reassured me: and my eyes being very heavy, I lay down again and slept—though with a knowledge in my sleep that it was cold—until the warm beams of the sun, and the ringing of the getting-up bell at Salem House, awoke me. If I could have hoped that Steerforth was there, I would have lurked about until he came out alone; but I knew he must have left long since. Traddles still remained, perhaps, but it was very doubtful; and I had not sufficient confidence in his discretion or good luck, however strong my reliance was on his good nature, to wish to trust him with my situation. So I crept away from the wall as Mr. Creakle′s boys were getting up, and struck into the long dusty track which I had first known to be the Dover Road when I was one of them, and when I little expected that any eyes would ever see me the wayfarer I was now, upon it. El sueño descendió sobre mí como sobre tantas otras criaturas sin hogar a quienes ladran los perros, y soñé que dor mía en mi antiguo lecho del colegio, hablando con mis compañeros, y me desperté con el nombre de Steerforth en los labios y mirando perdidamente las estrellas, que brillaban sobre mi cabeza. Cuando recordé dónde estaba a aquellas horas tuve miedo, sin saber por qué. Me levanté y eché a andar; pero las estrellas palidecían y una débil claridad en el cielo anunciaba el día; recobré el valor, y como estaba muy cansado, me acosté y me dormí de nuevo, sintiendo durante mi sueño un frío penetrante. Por fin, los rayos del sol y la campana matinal de la pensión, que llamaba a los colegiales a sus estudios, me despertaron. Si hubiera creído que Steer forth podía estar todavía allí habría vagado por los alrededores hasta conseguir verlo; pero sabía que hacía mucho tiempo que se había marchado. Traddles quizá estuviera todavía, pero no estaba muy seguro, y además no confiaba demasiado en su discreción ni en su habilidad para contarle mi situación, a pesar de la buena opinión que tenía de sus sentimientos. Me alejé mientras mis antiguos compañeros se levantaban y emprendí el camino por la larga carretera polvorienta que me habían indicado, cuando formaba parte de los alumnos de míster Creakle, como la de Dover en un tiempo en que no podía ni figurarme que nadie pudiera verme un día viajando de ese modo por aquel camino.
What a different Sunday morning from the old Sunday morning at Yarmouth! In due time I heard the church-bells ringing, as I plodded on; and I met people who were going to church; and I passed a church or two where the congregation were inside, and the sound of singing came out into the sunshine, while the beadle sat and cooled himself in the shade of the porch, or stood beneath the yew-tree, with his hand to his forehead, glowering at me going by. But the peace and rest of the old Sunday morning were on everything, except me. That was the difference. I felt quite wicked in my dirt and dust, with my tangled hair. But for the quiet picture I had conjured up, of my mother in her youth and beauty, weeping by the fire, and my aunt relenting to her, I hardly think I should have had the courage to go on until next day. But it always went before me, and I followed. ¡Qué distinta esta mañana de domingo de las mañanas de domingo en Yarmouth! Cuando llegó su hora oí sonar las campanas de las iglesias y me encontré con gentes que se dirigían a ellas; también pasé por delante de una o dos iglesias mientras se celebraba el culto: los cantos resonaban bajo la luz del sol, y un sacristán que estaba a la sombra del pórtico enjugándose la frente me miro con enojo al verme pasar sin detenerme. La paz y el reposo de los domingos reinaba en todas partes, excepto en mi corazón. Me parecía que me acusaba y denunciaba a los fieles observadores de la ley del do mingo por el polvo que me cubría y por mis revueltos cabellos. Sin el recuerdo, siempre presente a mis ojos, de mi madre en todo el esplendor de su belleza y de su juventud, sentada delante del fuego y llorando, y mi tía enterneciéndose un momento sobre ella, no sé si habría tenido valor para continuar mi camino. Pero aquella fantasía de mi imagina ción andaba todo el tiempo ante mis ojos y yo la seguía.
I got, that Sunday, through three-and-twenty miles on the straight road, though not very easily, for I was new to that kind of toil. I see myself, as evening closes in, coming over the bridge at Rochester, footsore and tired, and eating bread that I had bought for supper. One or two little houses, with the notice, ′Lodgings for Travellers′, hanging out, had tempted me; but I was afraid of spending the few pence I had, and was even more afraid of the vicious looks of the trampers I had met or overtaken. I sought no shelter, therefore, but the sky; and toiling into Chatham,—which, in that night′s aspect, is a mere dream of chalk, and drawbridges, and mastless ships in a muddy river, roofed like Noah′s arks,—crept, at last, upon a sort of grass-grown battery overhanging a lane, where a sentry was walking to and fro. Here I lay down, near a cannon; and, happy in the society of the sentry′s footsteps, though he knew no more of my being above him than the boys at Salem House had known of my lying by the wall, slept soundly until morning. Aquel día anduve veintitrés millas por la carretera, aunque con dificultad, pues no estaba acostumbrado a ello. To davía me veo, a la caída de la tarde, atravesando el puente de Rochester y comiéndome el pan que había reservado para la cena. Una o dos casitas con el rótulo de «Alojamiento para viajeros» eran para mí una tentación; pero no me atrevía a gastar los pocos peniques que me quedaban, y además me asustaban los rostros sospechosos de los vagabundos que encontraba en ellas y pasaba de largo. Por lo tanto, como la noche anterior, sólo pedí su abrigo al cielo, y llegué penosamente a Chathans, que en las tinieblas de la noche era como un sueño de cal, de puentes levadizos, de barcos sin palos anclados en un río de fango. Me deslicé por un sitio cubierto de musgo que daba a una callejuela, y me acosté al lado de un cañón. El centinela que estaba de guardia andaba de arriba abajo, y tranquilizado por su presencia, aunque él ni siquiera suponía la mía, como tampoco la suponían la víspera mis compañeros, me dormí profundamente hasta la mañana.
Very stiff and sore of foot I was in the morning, and quite dazed by the beating of drums and marching of troops, which seemed to hem me in on every side when I went down towards the long narrow street. Feeling that I could go but a very little way that day, if I were to reserve any strength for getting to my journey′s end, I resolved to make the sale of my jacket its principal business. Accordingly, I took the jacket off, that I might learn to do without it; and carrying it under my arm, began a tour of inspection of the various slop-shops. Muy cansado y con los pies doloridos me desperté aturdido por el sonar de los tambores y por el ruido de los pasos de los soldados que parecían rodearme por todas partes. Sentí que no podía it más lejos aquel día, si es que quería tener fuerzas para llegar al fin de mi viaje. En consecuencia eché a andar por una calle estrecha, decidido a hacer de la venta de mi chaqueta el asunto del día. Me la quité para irme acostumbrando a ir sin ella, y poniéndomela debajo del brazo empecé mi ronda de inspección por todas las tiendas de reventa.
It was a likely place to sell a jacket in; for the dealers in second-hand clothes were numerous, and were, generally speaking, on the look-out for customers at their shop doors. But as most of them had, hanging up among their stock, an officer′s coat or two, epaulettes and all, I was rendered timid by the costly nature of their dealings, and walked about for a long time without offering my merchandise to anyone. El sitio era bien elegido para ello, pues las casas de compraventa eran muy numerosas y sus dueños estaban a la puerta en espera de los clientes; pero la mayoría de los escaparates ostentaban uno o dos trajes de oficial, con sus charreteras y todo, a intimidado por aquel esplendor dudé mucho antes de atreverme a ofrecerle a nadie mi chaqueta.
This modesty of mine directed my attention to the marine-store shops, and such shops as Mr. Dolloby′s, in preference to the regular dealers. At last I found one that I thought looked promising, at the corner of a dirty lane, ending in an enclosure full of stinging-nettles, against the palings of which some second-hand sailors′ clothes, that seemed to have overflowed the shop, were fluttering among some cots, and rusty guns, and oilskin hats, and certain trays full of so many old rusty keys of so many sizes that they seemed various enough to open all the doors in the world. Aquella modestia atrajo mi atención hacia las tiendas donde se vendían los andrajos de los marineros y hacia las del estilo de la de míster Dollby. Me habrían parecido demasiadas pretensiones dirigirme a las de mayor categoría. Por fin descubrí una tiendecita cuyo aspecto me pareció propicio; en el rincón de una callejuela que terminaba en un campo de ortigas, rodeada de una valla cargada de trajes de marinero mezclados con fusiles viejos, cunas de niños, sombreros de hule y cestos llenos de tal cantidad de llaves mohosas, que la colección parecía lo bastante rica para abrir todas las puertas del mundo.
Into this shop, which was low and small, and which was darkened rather than lighted by a little window, overhung with clothes, and was descended into by some steps, I went with a palpitating heart; which was not relieved when an ugly old man, with the lower part of his face all covered with a stubbly grey beard, rushed out of a dirty den behind it, and seized me by the hair of my head. He was a dreadful old man to look at, in a filthy flannel waistcoat, and smelling terribly of rum. His bedstead, covered with a tumbled and ragged piece of patchwork, was in the den he had come from, where another little window showed a prospect of more stinging-nettles, and a lame donkey. En aquella tienda, que era pequeña y baja y estaba casi a oscuras, pues sólo la iluminaba una ventanita pequeña, casi tapada por los trapos colgados por delante, y donde había que entrar bajando algunos escalones, pe netré con el corazón palpitante. Mi temor aumentó cuando un horrible viejo de barba gris salió precipitadamente de su antro y me cogió de los cabellos. Era un viejo horrible, que olía mucho a ron y llevaba un chaleco de franela muy sucio. Su lecho, cubierto con un trozo de tela desgarrada, estaba colocado en el agujero que acababa de abandonar y que iluminaba otra ventanita, por la que también se veía un campo de ortigas donde pastaba un burro cojo.
′Oh, what do you want?′ grinned this old man, in a fierce, monotonous whine. ′Oh, my eyes and limbs, what do you want? Oh, my lungs and liver, what do you want? Oh, goroo, goroo!′ -¿Qué quieres? -gritó el hombre en un tono feroz y monótono-. ¡Ay mis ojos! ¡Ay! ¿Qué quieres? ¡Ay mis piernas! ¿Qué quieres? ¡Ay, goruu goruu!
I was so much dismayed by these words, and particularly by the repetition of the last unknown one, which was a kind of rattle in his throat, that I could make no answer; hereupon the old man, still holding me by the hair, repeated: Me asustaron de tal modo sus palabras, y sobre todo la última exclamación, que parecía una especie de mugido desconocido, que no pude contestar nada. El viejo, que todavía no había soltado mis cabellos, repuso:
′Oh, what do you want? Oh, my eyes and limbs, what do you want? Oh, my lungs and liver, what do you want? Oh, goroo!′—which he screwed out of himself, with an energy that made his eyes start in his head. -¡Ay! ¿Qué quieres? ¡Ay mis ojos! ¡Ay mis pulmones! ¿Qué quieres? ¡Ay, goruu goruu! Y lanzó aquel último grito con tal energía, que parecía que se le iban a saltar los ojos.
′I wanted to know,′ I said, trembling, ′if you would buy a jacket.′ -Desearía saber -dije temblando- si querría usted comprarme una chaqueta.
′Oh, let′s see the jacket!′ cried the old man. ′Oh, my heart on fire, show the jacket to us! Oh, my eyes and limbs, bring the jacket out!′ -¡Veamos la chaqueta! -gritó el viejo- ¡Ay, tengo fuego en el corazón! ¡Veamos la chaqueta! ¡Ay mis ojos y mis pulmones! ¡Veamos la chaqueta!
With that he took his trembling hands, which were like the claws of a great bird, out of my hair; and put on a pair of spectacles, not at all ornamental to his inflamed eyes. Por fin soltó mis cabellos, y con sus manos temblorosas, que parecían las garras de un pájaro monstruoso, colocó en su nariz unos lentes que no favorecían mucho a sus inflamados ojos.
′Oh, how much for the jacket?′ cried the old man, after examining it. ′Oh—goroo!—how much for the jacket?′ ¿Cuánto pides por esta chaqueta? -gritó después de exa minarla-. ¡Ay, goruu goruu! ¿Cuánto pides por ella?
′Half-a-crown,′ I answered, recovering myself. -Media corona -respondí, tranquilizándome un poco.
′Oh, my lungs and liver,′ cried the old man, ′no! Oh, my eyes, no! Oh, my limbs, no! Eighteenpence. Goroo!′ -¡Ay mis pulmones y mi estómago! No -gritó el viejo-. ¡Ay mis ojos! ¡No, no, no! ¡Dos chelines, goruu, goruu!
Every time he uttered this ejaculation, his eyes seemed to be in danger of starting out; and every sentence he spoke, he delivered in a sort of tune, always exactly the same, and more like a gust of wind, which begins low, mounts up high, and falls again, than any other comparison I can find for it. Cada vez que lanzaba aquella exclamación parecía que se le iban a saltar los ojos, y pronunciaba todas las palabras con el mismo sonsonete y como el viento, que a veces es suave, a veces escala montañas o a veces vuelve a hacerse suave. No hay otra comparación.
′Well,′ said I, glad to have closed the bargain, ′I′ll take eighteenpence.′ -Pues bien -dije, encantado de haber terminado la venta-, acepto los dos chelines.
′Oh, my liver!′ cried the old man, throwing the jacket on a shelf. ′Get out of the shop! Oh, my lungs, get out of the shop! Oh, my eyes and limbs—goroo!—don′t ask for money; make it an exchange.′ I never was so frightened in my life, before or since; but I told him humbly that I wanted money, and that nothing else was of any use to me, but that I would wait for it, as he desired, outside, and had no wish to hurry him. So I went outside, and sat down in the shade in a corner. And I sat there so many hours, that the shade became sunlight, and the sunlight became shade again, and still I sat there waiting for the money. -¡Ay mi estómago! -gritó el viejo arrojando la cha queta a un estante- ¡Vete! ¡Ay mis pulmones! ¡Sal de la tienda! ¡Ay mis ojos, goruu, goruu! No me pidas dinero. Mejor será que hagamos un cambio. En mi vida he pasado tanto miedo; pero le dije humildemente que necesitaba el dinero, y que cualquier otra cosa me resultaba inútil. únicamente dije que esperaría fuera si así lo deseaba, y que no tenía ninguna prisa. Salí de la tienda y me senté a la sombra, en un rincón. El tiempo pasaba, el sol llegó hasta mí, luego se retiró, y yo seguía esperando mi dinero.
There never was such another drunken madman in that line of business, I hope. That he was well known in the neighbourhood, and enjoyed the reputation of having sold himself to the devil, I soon understood from the visits he received from the boys, who continually came skirmishing about the shop, shouting that legend, and calling to him to bring out his gold. ′You ain′t poor, you know, Charley, as you pretend. Bring out your gold. Bring out some of the gold you sold yourself to the devil for. Come! It′s in the lining of the mattress, Charley. Rip it open and let′s have some!′ This, and many offers to lend him a knife for the purpose, exasperated him to such a degree, that the whole day was a succession of rushes on his part, and flights on the part of the boys. Sometimes in his rage he would take me for one of them, and come at me, mouthing as if he were going to tear me in pieces; then, remembering me, just in time, would dive into the shop, and lie upon his bed, as I thought from the sound of his voice, yelling in a frantic way, to his own windy tune, the ′Death of Nelson′; with an Oh! before every line, and innumerable Goroos interspersed. As if this were not bad enough for me, the boys, connecting me with the establishment, on account of the patience and perseverance with which I sat outside, half-dressed, pelted me, and used me very ill all day. Por el honor de la luz del sol quiero suponer que nunca ha habido otro loco ni borracho semejante en el negocio de la compraventa. Aquel viejo era muy conocido en los alrededores y tenía fama de haber vendido su alma al diablo. Lo supe pronto por las visitas que recibía de todos los chiquillos de la vecindad, que hacían a cada instante irrupción en su tienda, gritándole en nombre de Satanás que les diera su dinero. «No eres pobre, por mucho que digas, demasiado lo sabes, Charley. Enséñanos tu oro; enséñanos el oro que el diablo te ha dado a cambio de tu alma. Anda, ve a buscarlo al jergón, Charley, no tienes más que descoserle y dárnoslo.» Estos gritos, acompañados del ofrecimiento de un cuchillo para abrir el jergón, le exasperaban a tal punto, que se pasaba el día sobre los chicos, que luchaban con él un momento y después escapaban de sus manos. A veces, en su rabia, me tomaba por uno de ellos y se lanzaba contra mí, gesticulando como si fuera a destrozarme; pero me recono - cía a tiempo y volvía a meterse en la tienda y a echarse en su lecho, lo que intuía por la dirección de su voz. Allí rugía en su tono de costumbre la Muerte de Nelson, colocando un ¡ay! delante de cada verso y sembrándolo de innumerables ¡goruu, goruu! Para colmo de mis desgracias, los chicos de los alrededores, creyendo que pertenecía al establecimiento, al ver la perseverancia con que permanecía a medio vestir sentado delante de la puerta, me tiraban piedras insultándome.
He made many attempts to induce me to consent to an exchange; at one time coming out with a fishing-rod, at another with a fiddle, at another with a cocked hat, at another with a flute. But I resisted all these overtures, and sat there in desperation; each time asking him, with tears in my eyes, for my money or my jacket. At last he began to pay me in halfpence at a time; and was full two hours getting by easy stages to a shilling. Todavía hizo muchos esfuerzos aquel hombre para convencerme de que debíamos hacer un cambio. Una vez apareció con una caña de pescar, otra con un violín; también me ofreció sucesivamente un sombrero de tres picos y una flauta. Pero yo resistí a todas aquellas tentaciones y continué delante de la puerta, desesperado, conjurándole con lágrimas en los ojos para que me diera mi dinero o mi chaqueta. Por fin empezó a pagarme en medios peniques y pasaron dos horas antes de que llegásemos a un chelín.
′Oh, my eyes and limbs!′ he then cried, peeping hideously out of the shop, after a long pause, ′will you go for twopence more?′ -¡Ay mis ojos! ¡Ay mis piernas! -empezó a gritar entonces, asomando su horrible rostro fuera de la tienda, ¿Quieres conformarte con dos peniques más?
′I can′t,′ I said; ′I shall be starved.′ -No puedo -respondí-; me moriría de hambre.
′Oh, my lungs and liver, will you go for threepence?′ -¡Ay mis pulmones y mi estómago! ¿Tres peniques?
′I would go for nothing, if I could,′ I said, ′but I want the money badly.′ -Si pudiera no estaría regateando por unos peniques - le dije-; pero necesito ese dinero.
′Oh, go-roo!′ (it is really impossible to express how he twisted this ejaculation out of himself, as he peeped round the door-post at me, showing nothing but his crafty old head); ′will you go for fourpence?′ -¡Ay, goruu, goruu! Es imposible transcribir la expresión que dio a su exclamación oculto tras de la puerta, sin asomar más que su maligno rostro. -¿Quieres marcharte con cuatro peniques?
I was so faint and weary that I closed with this offer; and taking the money out of his claw, not without trembling, went away more hungry and thirsty than I had ever been, a little before sunset. But at an expense of threepence I soon refreshed myself completely; and, being in better spirits then, limped seven miles upon my road. Estaba tan agotado, tan rendido, que acepté, cansado de aquella lucha; y cogiendo el dinero de sus garras, un poco tembloroso, me alejé un momento antes de que acabara de ponerse el sol, con más hambre y más sed que nunca. Pero pronto me repuse por completo gracias a un gasto de tres peniques y, reanudando valerosamente mi camino, anduve siete millas aquella tarde.
My bed at night was under another haystack, where I rested comfortably, after having washed my blistered feet in a stream, and dressed them as well as I was able, with some cool leaves. When I took the road again next morning, I found that it lay through a succession of hop-grounds and orchards. It was sufficiently late in the year for the orchards to be ruddy with ripe apples; and in a few places the hop-pickers were already at work. I thought it all extremely beautiful, and made up my mind to sleep among the hops that night: imagining some cheerful companionship in the long perspectives of poles, with the graceful leaves twining round them. Me refugié para pasar la noche al lado de otro almiar y dormí profundamente, después de haber lavado mis pies doloridos en un arroyo cercano y de haberlos envuelto en hojas frescas. Cuando volví a ponerme en camino, al día siguiente por la mañana, vi extenderse por todas partes ante mis ojos campos en flor y huertos. La estación estaba ya lo bastante adelantada y los árboles estaban cubiertos de manzanas maduras y la recolección empezaba en algunos sitios. La belleza del campo me sedujo infinitamente y decidí que aquella noche me acostaría en medio de los campos, imaginándome que sería grata compañía la larga perspectiva de ramas con sus hojas graciosamente enroscadas a su alrededor.
The trampers were worse than ever that day, and inspired me with a dread that is yet quite fresh in my mind. Some of them were most ferocious-looking ruffians, who stared at me as I went by; and stopped, perhaps, and called after me to come back and speak to them, and when I took to my heels, stoned me. I recollect one young fellow—a tinker, I suppose, from his wallet and brazier—who had a woman with him, and who faced about and stared at me thus; and then roared to me in such a tremendous voice to come back, that I halted and looked round. Aquel día tuve varios encuentros que me inspiraron un terror cuyo recuerdo todavía está vivo en mi imaginación. Entre las gentes que vagaban por la carretera vi muchos desgraciados que me miraban ferozmente y que me llamaban cuando les había adelantado diciéndome que me acercara a hablarles, y que cuando empezaba a correr huyendo me tiraban piedras. Recuerdo sobre todo a un joven latonero ambulante lo recuerdo con su mochila y su rejuela; le acompañaba una mujer, y me miró de un modo tan terrible y me gritó de tal modo que me acercara, que me detuve y me volví a mirarle.
′Come here, when you′re called,′ said the tinker, ′or I′ll rip your young body open.′ -Ven cuando se te llama -dijo el latonero- o te saco las tripas.
I thought it best to go back. As I drew nearer to them, trying to propitiate the tinker by my looks, I observed that the woman had a black eye. Pensé que era mejor acercarme. Cuando estuve cerca, mirándole para tratar de apaciguarlo, observé que la mujer tenía un ojo amoratado.
′Where are you going?′ said the tinker, gripping the bosom of my shirt with his blackened hand. -¿Dónde vas? -me dijo el latonero cogiéndome de la pechera de la camisa con su mano negra.
′I am going to Dover,′ I said. -A Dover --dije.
′Where do you come from?′ asked the tinker, giving his hand another turn in my shirt, to hold me more securely. -¿De dónde vienes? - insistió agarrándome más fuerte para estar bien seguro de que no me escaparía.
′I come from London,′ I said. -De Londres.
′What lay are you upon?′ asked the tinker. ′Are you a prig?′ -¿Y qué piensas hacer? ¿No serás un raterillo?
′N-no,′ I said. -No.
′Ain′t you, by G—? If you make a brag of your honesty to me,′ said the tinker, ′I′ll knock your brains out.′ -¡Ah! ¿No te quieres confesar? Vuelve a decir que no y te abro la cabeza.
With his disengaged hand he made a menace of striking me, and then looked at me from head to foot. Hizo con la mano que tenía libre ademán de pegarme y, después, me miró de pies a cabeza.
′Have you got the price of a pint of beer about you?′ said the tinker. ′If you have, out with it, afore I take it away!′ -¿Llevas encima el precio de un vaso de cerveza? -preguntó el latonero- Si es así dámelo pronto, antes de que yo te lo quite.
I should certainly have produced it, but that I met the woman′s look, and saw her very slightly shake her head, and form ′No!′ with her lips. Seguramente habría cedido si en aquel momento no me hubiera encontrado con la mirada de la mujer, que me hizo una seña imperceptible con la cabeza y movió los labios como diciéndome: «No».
′I am very poor,′ I said, attempting to smile, ′and have got no money.′ -Soy muy pobre --dije tratando de sonreír- y no llevo dinero. .
′Why, what do you mean?′ said the tinker, looking so sternly at me, that I almost feared he saw the money in my pocket. -Vamos, ¿qué significa eso? -dijo el latonero mirándome tan furioso que por un momento creí que veía mi dinero a través del bolsillo.
′Sir!′ I stammered. -Señor... -balbucí.
′What do you mean,′ said the tinker, ′by wearing my brother′s silk handkerchief! Give it over here!′ And he had mine off my neck in a moment, and tossed it to the woman. -¿Qué quiere decir eso? -repuso él-. ¿Llevas la corbata de seda de mi hermano! Quítatela, pronto. Y me quitó la corbata de un tirón y se la arrojó a la mujer.
The woman burst into a fit of laughter, as if she thought this a joke, and tossed it back to me, nodded once, as slightly as before, and made the word ′Go!′ with her lips. Before I could obey, however, the tinker seized the handkerchief out of my hand with a roughness that threw me away like a feather, and putting it loosely round his own neck, turned upon the woman with an oath, and knocked her down. I never shall forget seeing her fall backward on the hard road, and lie there with her bonnet tumbled off, and her hair all whitened in the dust; nor, when I looked back from a distance, seeing her sitting on the pathway, which was a bank by the roadside, wiping the blood from her face with a corner of her shawl, while he went on ahead. Ella se echó a reír como si lo tomara a broma, y arrojándomela de nuevo me hizo otra seña con la cabeza, mientras sus labios formaban la palabra «vete». Antes de que pudiera obedecerla el latonero me arrancó la corbata de las manos con tal brutalidad que me dejó temblando como una hoja. La anudó alrededor de su cuello y después, volviéndose hacia la mujer y jurando la tiró al suelo. No olvidaré nunca lo que sentí al verla caer sobre las piedras de la carretera, donde quedó tendida. Su cofia se había desprendido con la violencia del choque y sus cabellos se mancharon de barro. Cuando estuve un poco más lejos, me volví a mirarlos y vi que estaba sentada a un lado del camino, enjugándose con una punta del mantón la sangre que corría por su rostro. El latonero continuaba andando.
This adventure frightened me so, that, afterwards, when I saw any of these people coming, I turned back until I could find a hiding-place, where I remained until they had gone out of sight; which happened so often, that I was very seriously delayed. But under this difficulty, as under all the other difficulties of my journey, I seemed to be sustained and led on by my fanciful picture of my mother in her youth, before I came into the world. It always kept me company. It was there, among the hops, when I lay down to sleep; it was with me on my waking in the morning; it went before me all day. I have associated it, ever since, with the sunny street of Canterbury, dozing as it were in the hot light; and with the sight of its old houses and gateways, and the stately, grey Cathedral, with the rooks sailing round the towers. When I came, at last, upon the bare, wide downs near Dover, it relieved the solitary aspect of the scene with hope; and not until I reached that first great aim of my journey, and actually set foot in the town itself, on the sixth day of my flight, did it desert me. But then, strange to say, when I stood with my ragged shoes, and my dusty, sunburnt, half-clothed figure, in the place so long desired, it seemed to vanish like a dream, and to leave me helpless and dispirited. Esta aventura me asustó de tal modo que, desde aquel momento. en cuanto me parecía ver a lo lejos a cualquier vagabundo, volvía sobre mis pasos para esconderme y permanecía quieto hasta perderle de vista. Esto se repetía con tal frecuencia que mi viaje se retrasó seriamente. Pero en aque lla dificultad, como en todas las demás de mi empresa, me sentía sostenido y arrastrado por el cuadro que me había trazado de mi madre en su juventud, antes de mi llegada a este mundo. Aquella idea me acompañaba en medio de los campos cuando me acostaba para dormir y, al despertar, la encontraba delante de mí caminando todo el día. Desde entonces su recuerdo está siempre asociado en mi imaginación con el de la calle ancha de Canterbury, que parecía dormitar bajo los rayos del sol, y con el espectáculo de las casas antiguas, de la catedral y de los cuervos que volaban por sus torres. Cuando llegué, por fin, a los áridos arenales que rodean Dover, esta imagen querida me devolvió la esperanza en medio de mi soledad y no me abandonó hasta que conseguí el primer objetivo de mi viaje y pisé la ciudad, el sexto día después de mi evasión. Pero entonces, cosa extraña, cuando me encontré con mis zapatos rotos, mis ropas destrozadas, la cabeza desgreñada y polvorienta y la tez quemada por el sol, en el lugar hacia el cual habían tendido todos mis deseos, la visión que me animaba se desvaneció de pronto como un sueño y me encontré solo, desanimado y abatido.
I inquired about my aunt among the boatmen first, and received various answers. One said she lived in the South Foreland Light, and had singed her whiskers by doing so; another, that she was made fast to the great buoy outside the harbour, and could only be visited at half-tide; a third, that she was locked up in Maidstone jail for child-stealing; a fourth, that she was seen to mount a broom in the last high wind, and make direct for Calais. The fly-drivers, among whom I inquired next, were equally jocose and equally disrespectful; and the shopkeepers, not liking my appearance, generally replied, without hearing what I had to say, that they had got nothing for me. I felt more miserable and destitute than I had done at any period of my running away. My money was all gone, I had nothing left to dispose of; I was hungry, thirsty, and worn out; and seemed as distant from my end as if I had remained in London. En primer lugar pregunté a unos barqueros si alguno de ellos conocía a mi tía, pero recibí muchas respuestas contradictorias. Uno me decía que vivía hacia el sur, cerca del faro, y que se había chamuscado los bigotes; otro que vivía en la parte fangosa de más allá del puerto y que sólo se la podía ver cuando estaba la marea baja; un tercero que estaba encerrada en la cárcel de Maidstone por ladrona de niños; un cuarto, por último, dijo que en la última galerna la había visto, montada en una escoba, camino de Calais. Los cocheros, a quienes me dirigí después, no fueron menos complacientes ni más respetuosos; en cuanto a los comerciantes, poco tranquilos por mi aspecto, me respondían, sin escucharme, que no podían darme nada. Entonces me sentí mucho más desgraciado y más abandonado que durante todo mi viaje. Ya no tenía nada de dinero ni nada que vender; sentía hambre y sed, estaba agotado, y me veía más lejos de mi fin que cuando estaba en Londres.
The morning had worn away in these inquiries, and I was sitting on the step of an empty shop at a street corner, near the market-place, deliberating upon wandering towards those other places which had been mentioned, when a fly-driver, coming by with his carriage, dropped a horsecloth. Something good-natured in the man′s face, as I handed it up, encouraged me to ask him if he could tell me where Miss Trotwood lived; though I had asked the question so often, that it almost died upon my lips. Se me fue la mañana en las pesquisas y estaba sentado en los escalones de una tienda desalquilada, en el rincón de una calle, cerca de la plaza del Mercado, reflexionando en si debería tomar el camino de los pueblos de los alrededores, de los cuales me había hablado Peggotty, cuando de un coche de alquiler que pasaba se le cayó la manta al caballo. La recogí y la buena cara del cochero me animó a preguntarle, al devolvérsela, si sabría la dirección de miss Trotwood, aunque ya había hecho tantas veces sin éxito la pregunta que casi expiró en mis labios.
′Trotwood,′ said he. ′Let me see. I know the name, too. Old lady?′ -¿Trotwood? Yo conozco ese nombre. ¿Una señora vieja?
′Yes,′ I said, ′rather.′ -Sí, casi -respondí.
′Pretty stiff in the back?′ said he, making himself upright. -¿Muy tiesa? --continuó, enderezándose-.
′Yes,′ I said. ′I should think it very likely.′ […]
′Carries a bag?′ said he—′bag with a good deal of room in it—is gruffish, and comes down upon you, sharp?′ ¿Qué lleva un bolso donde podía caber toda la casa... y algo brusca, algo dura con la gente?
My heart sank within me as I acknowledged the undoubted accuracy of this description. El corazón me dejó de latir al reconocer la exactitud evidente de la descripción.
′Why then, I tell you what,′ said he. ′If you go up there,′ pointing with his whip towards the heights, ′and keep right on till you come to some houses facing the sea, I think you′ll hear of her. My opinion is she won′t stand anything, so here′s a penny for you.′ -Pues bien; si subes por allí -y me señalaba con el lá tigo las alturas- y sigues derecho hasta llegar a las casas que dan al mar, creo que tendrás noticias suyas. Pero mi opinión es que no te dará gran cosa. Toma para ti un penique.
I accepted the gift thankfully, and bought a loaf with it. Dispatching this refreshment by the way, I went in the direction my friend had indicated, and walked on a good distance without coming to the houses he had mentioned. At length I saw some before me; and approaching them, went into a little shop (it was what we used to call a general shop, at home), and inquired if they could have the goodness to tell me where Miss Trotwood lived. I addressed myself to a man behind the counter, who was weighing some rice for a young woman; but the latter, taking the inquiry to herself, turned round quickly. Acepté el regalo con agradecimiento y compré pan, que me comí mientras tomaba el camino indicado. Anduve bastante tiempo antes de llegar a las casas que me había señalado; pero por fin las vi. Entré en una tiendecita donde vendían toda clase de cosas, preguntando si tendrían la bondad de decirme dónde vivía miss Trotwood. Me dirigí a un hombre que estaba detrás del mostrador pesando arroz para una muchacha; pero fue la muchacha quien contestó a mi pregunta, volviéndose con viveza.
′My mistress?′ she said. ′What do you want with her, boy?′ -¡Mi señora! -dijo-. ¿Para qué la quieres?
′I want,′ I replied, ′to speak to her, if you please.′ -Necesito hablarle, si me hicieran el favor -dije. .
′To beg of her, you mean,′ retorted the damsel. -¿Quieres decir pedirle limosna? -replicó ella.
′No,′ I said, ′indeed.′ But suddenly remembering that in truth I came for no other purpose, I held my peace in confusion, and felt my face burn. -No, de verdad -dije. Después, dándome cuenta de pronto que en realidad no tenía otro objeto, enrojecí hasta las orejas y guardé silencio.
MY aunt′s handmaid, as I supposed she was from what she had said, put her rice in a little basket and walked out of the shop; telling me that I could follow her, if I wanted to know where Miss Trotwood lived. I needed no second permission; though I was by this time in such a state of consternation and agitation, that my legs shook under me. I followed the young woman, and we soon came to a very neat little cottage with cheerful bow-windows: in front of it, a small square gravelled court or garden full of flowers, carefully tended, and smelling deliciously. La criada de mi tía (por lo menos supuse que lo era por sus palabras) guardó el arroz en su cesta y salió de la tienda diciéndome que podía seguirla si quería saber dónde vivía miss Trotwood. No me lo hice repetir, aunque había llegado a tal grado de terror y de consternación que no me sostenían las piernas. Seguí a la muchacha y pronto llegamos ante una preciosa casita adornada con miradores y con un pequeño jardín lleno de flores muy bien cuidadas que exhalaban un perfume delicioso.
′This is Miss Trotwood′s,′ said the young woman. ′Now you know; and that′s all I have got to say.′ With which words she hurried into the house, as if to shake off the responsibility of my appearance; and left me standing at the garden-gate, looking disconsolately over the top of it towards the parlour window, where a muslin curtain partly undrawn in the middle, a large round green screen or fan fastened on to the windowsill, a small table, and a great chair, suggested to me that my aunt might be at that moment seated in awful state. -Esta es la casa --dijo la muchacha-. Ya lo sabes, y es todo lo que tengo que decirte. Y se metió precipitadamente como para sacudirse toda la responsabilidad de mi visita. Yo me quedé de pie al lado de la verja mirando tristemente hacia las ventanas. Por una de ellas se veía una cortinilla de muselina entreabierta, un gran biombo verde, una mesita y un butacón, que me sugirió la idea de que mi tía quizá en aquel momento estaba sentada en él majestuosamente.
My shoes were by this time in a woeful condition. The soles had shed themselves bit by bit, and the upper leathers had broken and burst until the very shape and form of shoes had departed from them. My hat (which had served me for a night-cap, too) was so crushed and bent, that no old battered handleless saucepan on a dunghill need have been ashamed to vie with it. My shirt and trousers, stained with heat, dew, grass, and the Kentish soil on which I had slept—and torn besides—might have frightened the birds from my aunt′s garden, as I stood at the gate. My hair had known no comb or brush since I left London. My face, neck, and hands, from unaccustomed exposure to the air and sun, were burnt to a berry-brown. From head to foot I was powdered almost as white with chalk and dust, as if I had come out of a lime-kiln. In this plight, and with a strong consciousness of it, I waited to introduce myself to, and make my first impression on, my formidable aunt. Mis zapatos habían llegado al estado más lamentable. La suela se había ido a pedazos, y lo de encima estaba tan sumamente destrozado, que no parecían haber sido nunca zapatos. El sombrero, que, entre paréntesis, me había servido de gorro de dormir, estaba tan arrugado y abollado que hasta a una cazuela vieja y sin asas de un basurero la habría avergonzado la comparación. Mi camisa y mi pantalón, sucios de sudor, de la hierba y la tierra que me habían servido de lecho, eran unos pingajos y, mientras permanecía de pie ante la puerta, pensaba que podía servir de espantapájaros. No me había vuelto a peinar desde mi salida de Londres y mi rostro, mi cuello y mis manos, poco acostumbrados al aire, estaban abrasados por el sol, y todo yo cubierto de polvo de arriba abajo, casi tan blanco como si saliera de un horno de cal. En aquel estado y con plena conciencia de ello estaba esperando para presentarme a mi temible tía y causarle la primera impresión.
The unbroken stillness of the parlour window leading me to infer, after a while, that she was not there, I lifted up my eyes to the window above it, where I saw a florid, pleasant-looking gentleman, with a grey head, who shut up one eye in a grotesque manner, nodded his head at me several times, shook it at me as often, laughed, and went away. Nada se movía en aquella ventana, por lo que supuse, al cabo de un momento, que no estaría allí. Levanté la vista hacia las ventanas del piso de encima y vi asomado a un caballero de rostro agradable y sonrosado, de cabellos grises, que me guiñaba un ojo de un modo grotesco, haciéndome dos o tres veces gestos contradictorios con la cabeza. Tan pronto me decía que sí como que no, y, por último, echándose a reír, desapareció.
I had been discomposed enough before; but I was so much the more discomposed by this unexpected behaviour, that I was on the point of slinking off, to think how I had best proceed, when there came out of the house a lady with her handkerchief tied over her cap, and a pair of gardening gloves on her hands, wearing a gardening pocket like a toll-man′s apron, and carrying a great knife. I knew her immediately to be Miss Betsey, for she came stalking out of the house exactly as my poor mother had so often described her stalking up our garden at Blunderstone Rookery. Yo estaba muy desconcertado pero la conducta inesperada de aquel hombre terminó de desconcertarme, y estaba a punto de escapar sin decir nada, para reflexionar en lo que debía hacer, cuando de la casa salió una señora con un pa ñuelo atado por encima de su cofia. Llevaba guantes de jardinera, un delantal con grandes bolsillos y un cuchillo enorme. A1 momento reconocí en ella a mi tía, pues salía de la casa con el mismo paso majestuoso que llevaba, y que mi pobre madre me había descrito, cuando la vio entrar en nuestro jardín de Bloonderstone.
′Go away!′ said Miss Betsey, shaking her head, and making a distant chop in the air with her knife. ′Go along! No boys here!′ -¡Vete! -exclamó miss Betsey sacudiendo la cabeza y gesticulando de lejos con su cuchillo-. ¡Vete! ¡No quiero chicos aquí!
I watched her, with my heart at my lips, as she marched to a corner of her garden, and stooped to dig up some little root there. Then, without a scrap of courage, but with a great deal of desperation, I went softly in and stood beside her, touching her with my finger. Yo la miré temblando, con el corazón en los labios, mientras se dirigía con paso decidido a un rincón del jardín, donde se inclinó a sacar de raíz una plantita. Entonces, sin la menor esperanza, pero con el valor de la desesperació n, me acerqué con suavidad a ella y la toqué con la punta de un dedo.
′If you please, ma′am,′ I began. -Señora, ¿si hiciera usted el favor? -empecé.
She started and looked up. Ella se estremeció y levantó los ojos.
′If you please, aunt.′ -Tía, ¿si hiciera usted el favor...?
′EH?′ exclaimed Miss Betsey, in a tone of amazement I have never heard approached. -¿Eh? ---dijo mi tía en un tono de sorpresa tal que en mi vida he oído nada semejante.
′If you please, aunt, I am your nephew.′ -Tía, ¿si hiciera usted el favor? Soy su sobrino.
′Oh, Lord!′ said my aunt. And sat flat down in the garden-path. -¡Oh Dios mío! ---dijo mi tía, y se dejó caer sentada en el suelo del jardín.
′I am David Copperfield, of Blunderstone, in Suffolk—where you came, on the night when I was born, and saw my dear mama. I have been very unhappy since she died. I have been slighted, and taught nothing, and thrown upon myself, and put to work not fit for me. It made me run away to you. I was robbed at first setting out, and have walked all the way, and have never slept in a bed since I began the journey.′ Here my self-support gave way all at once; and with a movement of my hands, intended to show her my ragged state, and call it to witness that I had suffered something, I broke into a passion of crying, which I suppose had been pent up within me all the week. -Soy David Copperfield, de Bloonderstone, en Sooffolk, donde estuvo usted la noche de mi nacimiento y vio a mi querida madre. Soy muy desgraciado desde que ella ha muerto. Me han abandonado; no se han ocupado de que estudie; me han abandonado a mis propias fuerzas y me han dado un trabajo para el que no estoy hecho. Me he escapado para venir a buscarla a usted y me han robado en el momento de mi evasión; he caminado todo el tiempo sin acostarme en una cama desde mi partida. Aquí el valor me abandonó de pronto y, levantando las manos para enseñarle mis andrajo y todo lo que había sufrido, yo creo que vertí todas las lágrimas que tenía en el corazón desde hacía ocho días.
My aunt, with every sort of expression but wonder discharged from her countenance, sat on the gravel, staring at me, until I began to cry; when she got up in a great hurry, collared me, and took me into the parlour. Her first proceeding there was to unlock a tall press, bring out several bottles, and pour some of the contents of each into my mouth. I think they must have been taken out at random, for I am sure I tasted aniseed water, anchovy sauce, and salad dressing. When she had administered these restoratives, as I was still quite hysterical, and unable to control my sobs, she put me on the sofa, with a shawl under my head, and the handkerchief from her own head under my feet, lest I should sully the cover; and then, sitting herself down behind the green fan or screen I have already mentioned, so that I could not see her face, ejaculated at intervals, ′Mercy on us!′ letting those exclamations off like minute guns. Hasta aquel momento la fisonomía de mi tía sólo había expresado sorpresa. Sentada en la arena me miraba a la cara; pero cuando me eché a llorar se levantó precipitadamente, me agarró del cuello y me llevó a la casa. Lo primero que hizo fue abrir un gran armario, coger varias botellas y verter parte de su contenido en mi boca. Supongo que las cogió al azar y sin elegir, pues me dio anisete, salsa de anchoas y un preparado para la ensalada. Después de administrarme estos remedios, como mi estado nervioso no me dejaba contener los sollozos, me hizo echar en el sofá con un chal debajo de la cabeza y el pañuelo que adomaba la suya bajo mis pies, para que no ensuciara la tela. Después se sentó detrás del biombo verde del que ya he hablado, lo que me impedía ver su rostro. A intervalos lanzaba exclamaciones de «¡Misericordia!», como cañonazos de desesperación.
After a time she rang the bell. ′Janet,′ said my aunt, when her servant came in. ′Go upstairs, give my compliments to Mr. Dick, and say I wish to speak to him.′ Janet looked a little surprised to see me lying stiffly on the sofa (I was afraid to move lest it should be displeasing to my aunt), but went on her errand. My aunt, with her hands behind her, walked up and down the room, until the gentleman who had squinted at me from the upper window came in laughing. Al cabo de un momento llamó: -Janet -dijo mi tía cuando entró la criada-, sube a saludar de mi parte a míster Dick y dile que querría hablarle. Janet pareció un poco sorprendida de verme en el sofá como una estatua, pues no me atrevía a moverme por temor a disgustar a mi tía; pero se fue a cumplir la orden. Entre tanto mi tía se paseaba de arriba abajo por la habitación, con las manos en la espalda, hasta que el señor que me había he cho gestos desde la ventana entró riéndose.
′Mr. Dick,′ said my aunt, ′don′t be a fool, because nobody can be more discreet than you can, when you choose. We all know that. So don′t be a fool, whatever you are.′ -Míster Dick - le dijo mi tía-, sobre todo nada de tonterías, pues nadie puede ser más sensato que usted cuando le da la gana. Todos lo sabemos. Por lo tanto, nada de tonterías; se lo ruego.
The gentleman was serious immediately, and looked at me, I thought, as if he would entreat me to say nothing about the window. El se puso serio inmediatamente y me miró con una cara que yo interpreté como un ruego para que no hablara del incidente de la ventana.
′Mr. Dick,′ said my aunt, ′you have heard me mention David Copperfield? Now don′t pretend not to have a memory, because you and I know better.′ -Míster Dick -continuó mi tía-, usted me ha oído hablar de David Copperfield. No vaya a hacer como que no se acuerda, pues sé tan bien como usted que sí.
′David Copperfield?′ said Mr. Dick, who did not appear to me to remember much about it. ′David Copperfield? Oh yes, to be sure. David, certainly.′ -¿David Copperfield? --dijo míster Dick, que me parecía no tener recuerdos muy claros sobre el asunto-. ¿David Copperfield? ¡Ah, sí, sin duda; David, es verdad!
′Well,′ said my aunt, ′this is his boy—his son. He would be as like his father as it′s possible to be, if he was not so like his mother, too.′ -Pues bien -dijo mi tía-. Este es su hijo, que se parecería exactamente a él si no fuera también exactamente el retrato de su madre.
′His son?′ said Mr. Dick. ′David′s son? Indeed!′ -¿Su hijo? ¿El hijo de David? ¿Es posible?
′Yes,′ pursued my aunt, ′and he has done a pretty piece of business. He has run away. Ah! His sister, Betsey Trotwood, never would have run away.′ My aunt shook her head firmly, confident in the character and behaviour of the girl who never was born. -Sí -dijo mi tía-. Y acaba de dar un buen golpe; se ha escapado. ¡Ah! No habría sido su hermana, Betsey Trotwood, quien se hubiera escapado. Entre tanto sacudía la cabeza, convencida, llena de confianza en el carácter y la conducta discreta de aquella niña que no había nacido.
′Oh! you think she wouldn′t have run away?′ said Mr. Dick. -¡Ah! ¿Cree usted que ella no se hubiera escapado? --dijo míster Dick.
′Bless and save the man,′ exclaimed my aunt, sharply, ′how he talks! Don′t I know she wouldn′t? She would have lived with her god-mother, and we should have been devoted to one another. Where, in the name of wonder, should his sister, Betsey Trotwood, have run from, or to?′ -¡Dios mío! ¿Es posible? --dijo mi tía-. ¿En qué está usted pensando? ¿Acaso no sé lo que me digo? Habría vivido siempre con su madrina, y habríamos sido muy dicho sas las dos. ¿Dónde quiere usted que su hermana se hubiera escapado y por qué?
′Nowhere,′ said Mr. Dick. -No sé -dijo míster Dick.
′Well then,′ returned my aunt, softened by the reply, ′how can you pretend to be wool-gathering, Dick, when you are as sharp as a surgeon′s lancet? Now, here you see young David Copperfield, and the question I put to you is, what shall I do with him?′ -Pues bien -repuso mi tía, dulcificada por la respuesta-, ¿por qué se hace usted el tonto, cuando es agudo como la lanceta de un cirujano? Ahora usted ve al pequeño David Copperfield, y la pregunta que quería hacerle es esta: ¿Qué debo hacer?
′What shall you do with him?′ said Mr. Dick, feebly, scratching his head. ′Oh! do with him?′ -¿Lo que usted debe hacer? -dijo míster Dick con voz apagada, rascándose la frente, ¿Qué debe hacer?
′Yes,′ said my aunt, with a grave look, and her forefinger held up. ′Come! I want some very sound advice.′ -Sí ---dijo mi tía mirándole seriamente y levantando el dedo-. ¡Atención, porque necesito un consejo trascendental!
′Why, if I was you,′ said Mr. Dick, considering, and looking vacantly at me, ′I should—′ The contemplation of me seemed to inspire him with a sudden idea, and he added, briskly, ′I should wash him!′ -Pues bien; si yo estuviera en su lugar -dijo míster Dick reflexionando y lanzándome una mirada vaga- yo...(aquella mirada pareció proporcionarle una repentina inspiración, y añadió vivamente): yo le daría un baño.
′Janet,′ said my aunt, turning round with a quiet triumph, which I did not then understand, ′Mr. Dick sets us all right. Heat the bath!′ -Janet -dijo mi tía volviéndose con una sonrisa de triunfo que yo no comprendía todavía-. Míster Dick siempre tiene razón; prepare el baño.
Although I was deeply interested in this dialogue, I could not help observing my aunt, Mr. Dick, and Janet, while it was in progress, and completing a survey I had already been engaged in making of the room. A pesar de lo que me interesaba la conversación no podía por menos, durante todo el tiempo, observar a mi tía y a míster Dick y hasta a Janet, y acabar el examen de la habitación en que me encontraba.
MY aunt was a tall, hard-featured lady, but by no means ill-looking. There was an inflexibility in her face, in her voice, in her gait and carriage, amply sufficient to account for the effect she had made upon a gentle creature like my mother; but her features were rather handsome than otherwise, though unbending and austere. I particularly noticed that she had a very quick, bright eye. Her hair, which was grey, was arranged in two plain divisions, under what I believe would be called a mob-cap; I mean a cap, much more common then than now, with side-pieces fastening under the chin. Her dress was of a lavender colour, and perfectly neat; but scantily made, as if she desired to be as little encumbered as possible. I remember that I thought it, in form, more like a riding-habit with the superfluous skirt cut off, than anything else. She wore at her side a gentleman′s gold watch, if I might judge from its size and make, with an appropriate chain and seals; she had some linen at her throat not unlike a shirt-collar, and things at her wrists like little shirt-wristbands. Mi tía era alta; sus rasgos eran pronunciados, sin ser desagradables; su rostro, su voz, su aspecto y su modo de andar, todo indicaba una inflexibilidad de carácter que era suficiente para explicarse el efecto que había causado sobre una criatura tan dulce como mi madre. Pero debía de haber sido bastante guapa en su juventud a pesar de su expresión de altanería y austeridad. Pronto observé que sus ojos eran vivos y brillantes; sus cabellos grises formaban dos trenzas contenidas por una especie de cofia muy sencilla, que se llevaba más entonces que ahora, con dos cintas que se anudaban en la barbilla; su traje era de algodón y muy limpio, pero su sencillez indicaba que a mi tía le gustaba estar libre en sus movimientos. Recuerdo que aquel traje me hacía el efecto de una amazona a la que hubieran cortado la falda; llevaba un reloj de hombre, a juzgar por la forma y el tamaño, colgado al cuello por una cadena, y los puños se parecían mucho a los de las camisas de hombre.
Mr. Dick, as I have already said, was grey-headed, and florid: I should have said all about him, in saying so, had not his head been curiously bowed—not by age; it reminded me of one of Mr. Creakle′s boys′ heads after a beating—and his grey eyes prominent and large, with a strange kind of watery brightness in them that made me, in combination with his vacant manner, his submission to my aunt, and his childish delight when she praised him, suspect him of being a little mad; though, if he were mad, how he came to be there puzzled me extremely. He was dressed like any other ordinary gentleman, in a loose grey morning coat and waistcoat, and white trousers; and had his watch in his fob, and his money in his pockets: which he rattled as if he were very proud of it. Ya he dicho que míster Dick tenía los cabellos grises y el cutis fresco; llevaba la cabeza muy inclinada, y no era por la edad; me recordaba la actitud de los alumnos de míster Creackle cuando se acercaba a pegarles. Sus grandes ojos grises eran prominentes y brillaban con una luz húmeda y extraña, lo que, unido a sus modales distraídos, su sumisión hacia mi tía y su alegría de niño cuando ella le hacía algún cumplido, me hizo pensar que debía de estar un poco chi flado, aunque me costaba trabajo explicarme cómo vivía, en ese caso, con mi tía. Iba vestido como todo el mundo, con una chaqueta gris y un pantalón blanco; llevaba un reloj en el bolsillo del chaleco, y dinero, que hasta hacía sonar a veces como si estuviera orgulloso de ello.
Janet was a pretty blooming girl, of about nineteen or twenty, and a perfect picture of neatness. Though I made no further observation of her at the moment, I may mention here what I did not discover until afterwards, namely, that she was one of a series of protegees whom my aunt had taken into her service expressly to educate in a renouncement of mankind, and who had generally completed their abjuration by marrying the baker. Janet era una linda muchacha, de unos veinte años, per fectamente limpia y bien arreglada. Aunque mis observaciones no se extendieron más allá entonces, ahora puedo decir lo que sólo descubrí después, y es que formaba parte de una serie de protegidas que mi tía había ido tomando a su servicio expresamente para educarlas en el horror al matrimonio, lo que hacía que generalmente terminasen casándose con el repartidor del pan.
The room was as neat as Janet or my aunt. As I laid down my pen, a moment since, to think of it, the air from the sea came blowing in again, mixed with the perfume of the flowers; and I saw the old-fashioned furniture brightly rubbed and polished, my aunt′s inviolable chair and table by the round green fan in the bow-window, the drugget-covered carpet, the cat, the kettle-holder, the two canaries, the old china, the punchbowl full of dried rose-leaves, the tall press guarding all sorts of bottles and pots, and, wonderfully out of keeping with the rest, my dusty self upon the sofa, taking note of everything. La habitación estaba tan bien arreglada como mi tía y Janet. Dejando la pluma un momento para reflexionar, he sentido de nuevo el aire del mar mezclado con el perfume de las flores; he vuelto a ver los viejos muebles tan primorosamente cuidados: la silla, la mesa y el biombo verde, que pertenecía exclusivamente a mi tía-, la tela que cubría la tapicería, el gato, los dos canarios, la vieja porcelana, la ponchera llena de hojas de rosa secas, el armario lleno de botellas y, en fin, lo que no estaba nada de acuerdo con el resto, mi sucia persona, tendida en el sofá y observándolo todo.
Janet had gone away to get the bath ready, when my aunt, to my great alarm, became in one moment rigid with indignation, and had hardly voice to cry out, ′Janet! Donkeys!′ Janet se había marchado a preparar el baño cuando mi tía, con gran terror por mi parte, cambió de pronto de cara y se puso a gritar indignadísima con voz ahogada: -Janet, ¡los burros!
Upon which, Janet came running up the stairs as if the house were in flames, darted out on a little piece of green in front, and warned off two saddle-donkeys, lady-ridden, that had presumed to set hoof upon it; while my aunt, rushing out of the house, seized the bridle of a third animal laden with a bestriding child, turned him, led him forth from those sacred precincts, and boxed the ears of the unlucky urchin in attendance who had dared to profane that hallowed ground. Al oír esto Janet subió de la cocina como si hubiera fuego en la casa y se precipitó a un pequeño prado que había delante del jardín y arrojó de allí a dos burros que habían tenido el atrevimiento de meterse en él montados por dos señoras, mientras que mi tía, saliendo también apresuradamente y cogiendo por la brida a un tercer animal, montado por un niño, lo alejó de aquel lugar respetable dando un par de bofetones al desgraciado chico, que era el encargado de conducir los burros y se había atrevido a profanar el lugar consagrado.
To this hour I don′t know whether my aunt had any lawful right of way over that patch of green; but she had settled it in her own mind that she had, and it was all the same to her. The one great outrage of her life, demanding to be constantly avenged, was the passage of a donkey over that immaculate spot. In whatever occupation she was engaged, however interesting to her the conversation in which she was taking part, a donkey turned the current of her ideas in a moment, and she was upon him straight. Jugs of water, and watering-pots, were kept in secret places ready to be discharged on the offending boys; sticks were laid in ambush behind the door; sallies were made at all hours; and incessant war prevailed. Perhaps this was an agreeable excitement to the donkey-boys; or perhaps the more sagacious of the donkeys, understanding how the case stood, delighted with constitutional obstinacy in coming that way. I only know that there were three alarms before the bath was ready; and that on the occasion of the last and most desperate of all, I saw my aunt engage, single-handed, with a sandy-headed lad of fifteen, and bump his sandy head against her own gate, before he seemed to comprehend what was the matter. These interruptions were of the more ridiculous to me, because she was giving me broth out of a table-spoon at the time (having firmly persuaded herself that I was actually starving, and must receive nourishment at first in very small quantities), and, while my mouth was yet open to receive the spoon, she would put it back into the basin, cry ′Janet! Donkeys!′ and go out to the assault. Todavía ahora no sé si mi tía tenía derechos positivos sobre aquella praderita; pero en su espíritu había resuelto que le pertenecía, y era suficiente. No se le podía hacer más sensible ultraje que dejar que un burro pisase aquel césped inmaculado. Por absorta que estuviera en cualquier ocupación; por interesante que fuera la conversación en que tomara parte, un asno era suficiente para romper al instante el curso de sus ideas y se precipitaba sobre él al momento. Cubos de agua y regaderas estaban siempre preparados en un rincón para lanzarlos sobre los asaltantes; y había palos escondidos detrás de la puerta para dar batidas de vez en cuando. Era un estado de guerra permanente. Hasta creo que era una distracción agradable para los chicos que conducían los burros, y hasta quizá los más inteligentes de ellos, sabiendo lo que ocurría, les gustaba más (por la terquedad que forma el fondo de los caracteres) pasar por aquel camino. únicamente sé que hubo tres asaltos mientras se me preparaba el baño, y que en el último, el más temible de todos, vi a mi tía emp render la lucha con un chico muy duro de mollera, de unos quince años, a quien golpeó la cabeza dos o tres ve ces contra la verja del jardín antes de que pudiera comprender de qué se trataba. Estas interrupciones me parecían tanto más absurdas porque en aquellos momentos estaba precisamente dándome caldo con una cucharilla, convencida de que me moría de hambre y no podía recibir el alimento más que a pequeñas dosis y, de vez en cuando, en el momento en que yo tenía la boca abierta, dejaba la cuchara en el plato, gritando: « Janet, ¡burros!», y salía corriendo a resistir el asalto.
The bath was a great comfort. For I began to be sensible of acute pains in my limbs from lying out in the fields, and was now so tired and low that I could hardly keep myself awake for five minutes together. When I had bathed, they (I mean my aunt and Janet) enrobed me in a shirt and a pair of trousers belonging to Mr. Dick, and tied me up in two or three great shawls. What sort of bundle I looked like, I don′t know, but I felt a very hot one. Feeling also very faint and drowsy, I soon lay down on the sofa again and fell asleep. El baño me reconfortó mucho. Había empezado a sentir dolores agudos en todos los miembros a consecuencia de las noches a cielo raso, y estaba tan cansado, tan abatido, que me costaba trabajo permanecer despierto. Después del baño, mi tía y Janet me vistieron con una camisa y un pantalón de míster Dick y me envolvieron en dos o tres grandes chales. Debía de parecer un envoltorio grotesco; en todo caso, tenía mucho calor. Me sentía muy débil y muy adormilado; me tendí de nuevo en el sofá y me quedé dormido.
It might have been a dream, originating in the fancy which had occupied my mind so long, but I awoke with the impression that my aunt had come and bent over me, and had put my hair away from my face, and laid my head more comfortably, and had then stood looking at me. The words, ′Pretty fellow,′ or ′Poor fellow,′ seemed to be in my ears, too; but certainly there was nothing else, when I awoke, to lead me to believe that they had been uttered by my aunt, who sat in the bow-window gazing at the sea from behind the green fan, which was mounted on a kind of swivel, and turned any way. Quizá sería mi sueño consecuencia natural de la imagen que había ocupado tanto tiempo mi imaginación; pero me desperté con la sensación de que mi tía se había inclinado hacia mí, me había apartado los cabellos de la frente y arreglado la almohada que sostenía mi cabeza; después me estuvo contemplando largo rato. Las palabras «¡pobre niño! » parecieron también resonar en mis oídos; pero no me atrevería a asegurar que mi tía las había pronunciado, pues al despertarme estaba sentada al lado de la ventana, mirando al mar, oculta tras su biombo mecánico, que podía volverse ha cia donde ella quería.
We dined soon after I awoke, off a roast fowl and a pudding; I sitting at table, not unlike a trussed bird myself, and moving my arms with considerable difficulty. But as my aunt had swathed me up, I made no complaint of being inconvenienced. All this time I was deeply anxious to know what she was going to do with me; but she took her dinner in profound silence, except when she occasionally fixed her eyes on me sitting opposite, and said, ′Mercy upon us!′ which did not by any means relieve my anxiety. Nada más despertarme sirvieron la comida, que se componía de un pudding y de un pollo asado. Me senté a la mesa con las piernas encogidas como un pájaro y moviendo los brazos con dificultad; pero como había sido mi tía quien me había empaquetado de aquel modo con sus propias manos, no me atreví a quejarme. Estaba muy preocupado por saber lo que sería de mí; pero como ella comía en el más profundo silencio, limitándose a mirarme con fijeza de vez en cuando y a suspirar «¡Misericordia!», no contribuía demasiado a calmar mis inquietudes.
The cloth being drawn, and some sherry put upon the table (of which I had a glass), my aunt sent up for Mr. Dick again, who joined us, and looked as wise as he could when she requested him to attend to my story, which she elicited from me, gradually, by a course of questions. During my recital, she kept her eyes on Mr. Dick, who I thought would have gone to sleep but for that, and who, whensoever he lapsed into a smile, was checked by a frown from my aunt. Cuando quitaron el mantel trajeron jerez, y mi tía me dio un vasito, y después envió a buscar a míster Dick, que llegó enseguida. Cuando ella le rogó que escuchara mi historia, haciéndomela contar gradualmente en respuesta a una serie de preguntas, él la escuchó con su expresión más grave. Durante mi relato tuvo los ojos fijos en míster Dick, que sin ello se habría dormido, y cuando trataba de sonreír mi tía le llamaba al orden frunciendo las cejas.
′Whatever possessed that poor unfortunate Baby, that she must go and be married again,′ said my aunt, when I had finished, ′I can′t conceive.′ -No puedo concebir cómo se le ocurrió a aquella pobre niña volverse a casar --dijo mi tía cuando terminé.
′Perhaps she fell in love with her second husband,′ Mr. Dick suggested. -Quizá se había enamorado de su segundo marido -sugirió míster Dick.
′Fell in love!′ repeated my aunt. ′What do you mean? What business had she to do it?′ -¡Amor! -dijo mi tía-. ¿Qué quiere usted decir? ¿Qué necesidad tenía de ello?
′Perhaps,′ Mr. Dick simpered, after thinking a little, ′she did it for pleasure.′ -Quizá -balbució míster Dick, después de pensar un poco-, quizá le gustaba.
′Pleasure, indeed!′ replied my aunt. ′A mighty pleasure for the poor Baby to fix her simple faith upon any dog of a fellow, certain to ill-use her in some way or other. What did she propose to herself, I should like to know! She had had one husband. She had seen David Copperfield out of the world, who was always running after wax dolls from his cradle. She had got a baby—oh, there were a pair of babies when she gave birth to this child sitting here, that Friday night!—and what more did she want?′ -¡Vaya un gusto! -replicó mi tía- ¡Bonito gusto para la pobre niña el confiarse a una mala persona, que no podría por menos de engañarla de un modo o de otro! ¿Qué es lo que se proponía? ¡Me gustaría saberlo! Había tenido un ma rido, había encontrado en el mundo a David Copperfield, a quien siempre, desde que nació, le habían entusiasmado las muñecas de cera. Había tenido un niño. ¡Oh, era una buena pareja de chiquillos! Cuando dio vida a este que está sentado aquí, aquel viernes por la noche, ¿qué más podría desear?
Mr. Dick secretly shook his head at me, as if he thought there was no getting over this. Míster Dick sacudió misteriosamente su cabeza hacia mí, como si pensara que no había nada que contestar a aquello.
′She couldn′t even have a baby like anybody else,′ said my aunt. ′Where was this child′s sister, Betsey Trotwood? Not forthcoming. Don′t tell me!′ -Ni siquiera ha podido tener una niña como otra persona cualquiera. ¿Y dónde está la hermana de este niño, Betsey Trotwood? ¡Mira que no nacer! ¡Calle usted, por Dios!
Mr. Dick seemed quite frightened. Míster Dick parecía asustado.
′That little man of a doctor, with his head on one side,′ said my aunt, ′Jellips, or whatever his name was, what was he about? All he could do, was to say to me, like a robin redbreast—as he is—"It′s a boy." A boy! Yah, the imbecility of the whole set of ′em!′ -Y aquel mediquillo, con su cabeza de medio lado -continuó mi tía-, Jellys o algo así era su nombre, ¿qué hacía allí? Todo lo que sabía era decirme como un lila, que es lo que era: «¡Es un niño, un niño!» ¡Oh, qué imbecilidad la de toda aquella gente!
The heartiness of the ejaculation startled Mr. Dick exceedingly; and me, too, if I am to tell the truth. La dureza de su expresión turbó mucho a míster Dick, y a mí también, para ser franco.
′And then, as if this was not enough, and she had not stood sufficiently in the light of this child′s sister, Betsey Trotwood,′ said my aunt, ′she marries a second time—goes and marries a Murderer—or a man with a name like it—and stands in THIS child′s light! And the natural consequence is, as anybody but a baby might have foreseen, that he prowls and wanders. He′s as like Cain before he was grown up, as he can be.′ -Y además, como si eso no fuera bastante, como si no hubiera perjudicado ya bastante a la hermana de este niño, Betsey Trotwood -añadió mi tía-, se vuelve a casar, se casa con un Murderer, con un hombre que se llamaba algo así, para perjudicar a su hijo. Tenía que ser todo lo niña que era para no prever lo que ha ocurrido y que su niño llegaría un día en que se vería errante por el mundo, como Caín, antes de crecer.
Mr. Dick looked hard at me, as if to identify me in this character. Míster Dick me miró fijamente para identificarme bajo aquel aspecto.
′And then there′s that woman with the Pagan name,′ said my aunt, ′that Peggotty, she goes and gets married next. Because she has not seen enough of the evil attending such things, she goes and gets married next, as the child relates. I only hope,′ said my aunt, shaking her head, ′that her husband is one of those Poker husbands who abound in the newspapers, and will beat her well with one.′ -Y además aquella mujer con nombre de pagano -dijo mi tía-, aquella Peggotty, que también se casa, como si no hubiera visto claros los inconvenientes del matrimonio. Nada, también a casarse, según cuenta este niño. Al menos tengo la esperanza -dijo mi tía moviendo la cabeza- de que su marido será de la especie que tan a menudo se lee en los periódicos y le dará buenas palizas.
I could not bear to hear my old nurse so decried, and made the subject of such a wish. I told my aunt that indeed she was mistaken. That Peggotty was the best, the truest, the most faithful, most devoted, and most self-denying friend and servant in the world; who had ever loved me dearly, who had ever loved my mother dearly; who had held my mother′s dying head upon her arm, on whose face my mother had imprinted her last grateful kiss. And my remembrance of them both, choking me, I broke down as I was trying to say that her home was my home, and that all she had was mine, and that I would have gone to her for shelter, but for her humble station, which made me fear that I might bring some trouble on her—I broke down, I say, as I was trying to say so, and laid my face in my hands upon the table. Yo no podía soportar el oír tratar así a mi querida Peggotty, ni que le desearan semejantes cosas, y le dije a mi tía que se equivocaba, y que Peggotty era la mejor amiga del mundo, la criada más fiel y más abnegada, la más constante que podía encontrarse; que me había querido siempre con ternura, y a mi madre también; que era la que la había sostenido en sus últimos momentos y que había recibido su úl timo beso. El recuerdo de las dos personas que más me habían querido en el mundo me cortaba la voz, y me eché a llorar, tratando de decir que la casa de Peggotty siempre estaba abierta para mí; que todo lo suyo estaba a mi disposición, y que yo hubiera ido a refugiarme allí si no hubiera temido causarle dificultades insuperables en su situación. No pude seguir, y oculté el rostro entre las manos.
′Well, well!′ said my aunt, ′the child is right to stand by those who have stood by him—Janet! Donkeys!′ -¡Bien, bien! -dijo mi tía-. El niño tiene razón defendiendo a los que le han protegido. Janet, ¡burros!
I thoroughly believe that but for those unfortunate donkeys, we should have come to a good understanding; for my aunt had laid her hand on my shoulder, and the impulse was upon me, thus emboldened, to embrace her and beseech her protection. But the interruption, and the disorder she was thrown into by the struggle outside, put an end to all softer ideas for the present, and kept my aunt indignantly declaiming to Mr. Dick about her determination to appeal for redress to the laws of her country, and to bring actions for trespass against the whole donkey proprietorship of Dover, until tea-time. Creo que sin aquellos malditos asnos habríamos llegado a entendernos entonces. Mi tía había apoyado su mano en mi hombro y, sintiéndome animado por aquella marca de aprobación, estaba a punto de abrazarle y de implorar su protección cuando la interrumpieron, y la confusión que le producía la lucha subsiguiente puso fin por el momento a todo pensamiento más dulce. Miss Betsey declaró con indignación, dirigiéndose a míster Dick, que había tomado una gran resolución y estaba decidida a apelar a los tribuna les y a llevar ante las autoridades a todos los dueños de burros de Dover. Este acceso de asnofobia le duró hasta la hora del té.
After tea, we sat at the window—on the look-out, as I imagined, from my aunt′s sharp expression of face, for more invaders—until dusk, when Janet set candles, and a backgammon-board, on the table, and pulled down the blinds. Después del té nos quedamos cerca de la ventana con objeto (yo supongo, por la expresión resuelta del rostro de mi tía) de ver de lejos a nuevos delincuentes. Cuando fue de noche, Janet trajo las luces, echó las cortinas y puso encima de la mesa un juego de damas.
′Now, Mr. Dick,′ said my aunt, with her grave look, and her forefinger up as before, ′I am going to ask you another question. Look at this child.′ -Ahora, míster Dick -dijo mi tía seriamente y levantando el dedo como la otra vez-, tengo todavía una pregunta que hacerle. Mire a este niño...
′David′s son?′ said Mr. Dick, with an attentive, puzzled face. -¿El hijo de David? --dijo míster Dick, confuso, prestando atención.
′Exactly so,′ returned my aunt. ′What would you do with him, now?′ -Precisamente --dijo mi tía- ¿Qué haría usted ahora?
′Do with David′s son?′ said Mr. Dick. -¿Lo que haría del hijo de David? -repitió míster Dick.
′Ay,′ replied my aunt, ′with David′s son.′ -Sí -replicó mi tía-, del hijo de David.
′Oh!′ said Mr. Dick. ′Yes. Do with—I should put him to bed.′ -¡Oh! -dijo míster Dick-. Lo que yo haría... es me terle en la cama.
′Janet!′ cried my aunt, with the same complacent triumph that I had remarked before. ′Mr. Dick sets us all right. If the bed is ready, we′ll take him up to it.′ -¡Janet! -gritó mi tía, con la expresión de satisfacción triunfante que ya había visto antes-. Míster Dick siempre tiene razón. Si la cama está preparada, vamos a acostarle.
Janet reporting it to be quite ready, I was taken up to it; kindly, but in some sort like a prisoner; my aunt going in front and Janet bringing up the rear. The only circumstance which gave me any new hope, was my aunt′s stopping on the stairs to inquire about a smell of fire that was prevalent there; and janet′s replying that she had been making tinder down in the kitchen, of my old shirt. But there were no other clothes in my room than the odd heap of things I wore; and when I was left there, with a little taper which my aunt forewarned me would burn exactly five minutes, I heard them lock my door on the outside. Turning these things over in my mind I deemed it possible that my aunt, who could know nothing of me, might suspect I had a habit of running away, and took precautions, on that account, to have me in safe keeping. Janet dijo que la cama ya estaba, y me hicieron subir cariñosamente, pero como si fuera un prisionero. Mi tía iba a la cabeza, y Janet a la retaguardia. La única circunstancia que me dio algunas esperanzas fue que, a la pregunta de mi tía a propósito de un olor a quemado que reinaba en la escalera, Janet contestó que acababa de quemar mi ropa vieja en la cocina. Sin embargo en mi habitación no había más ropa que la que yo llevaba puesta y, cuando mi tía me dejó en mi cuarto (no sin prevenirme que la luz debía estar apagada antes de cinco minutos), le oí cerrar la puerta con llave por fuera. Reflexionando, me dije que quizá, como no me conocía, temí a que tuviera la costumbre de escaparme y tomaba sus precauciones en previsión.
The room was a pleasant one, at the top of the house, overlooking the sea, on which the moon was shining brilliantly. After I had said my prayers, and the candle had burnt out, I remember how I still sat looking at the moonlight on the water, as if I could hope to read my fortune in it, as in a bright book; or to see my mother with her child, coming from Heaven, along that shining path, to look upon me as she had looked when I last saw her sweet face. I remember how the solemn feeling with which at length I turned my eyes away, yielded to the sensation of gratitude and rest which the sight of the white-curtained bed—and how much more the lying softly down upon it, nestling in the snow-white sheets!—inspired. I remember how I thought of all the solitary places under the night sky where I had slept, and how I prayed that I never might be houseless any more, and never might forget the houseless. I remember how I seemed to float, then, down the melancholy glory of that track upon the sea, away into the world of dreams. Mi habitación era muy bonita. Estaba situada en lo alto de la casa y daba al mar, que la luna iluminaba entonces. Después de haber rezado y de haber apagado la vela recuerdo que me quedé asomado a la ventana contemplando la luna sobre el agua como si fuera un libro mágico donde pudiera leer mi destino, o también como si fuera a ver descender del cielo, a lo largo de sus rayos luminosos, a mi madre con su niño en los brazos para mirarme como el último día en que había visto su dulce rostro. Recuerdo también que el sentimiento solemne que llenaba mi corazón cuando quité por fin los ojos de aquel espectáculo cedió enseguida ante la sensación de agradecimiento y de tranquilidad que me inspiraba la vista de aquel le cho rodeado de cortinas blancas. Recuerdo todavía el bienestar con que me estiré entre aquellas sábanas, más limpias que la nieve. Pensaba en todos los lugares solitarios en que había dormido y le pedí a Dios que me hiciera la gracia de no volver a encontrarme sin asilo y de no olvidar nunca a los que no tie nen un techo donde cobijarse. Recuerdo que enseguida creí poco a poco descender al mundo de los sueños por aquel haz de luz que reflejaba sobre el mar su brillo tan melancólico.
"Emma"

CHAPTER 14.

CAPÍTULO XIV

MY AUNT MAKES UP HER MIND ABOUT ME

LO QUE MI TÍA DECIDE RESPECTO A MÍ

On going down in the morning, I found my aunt musing so profoundly over the breakfast table, with her elbow on the tray, that the contents of the urn had overflowed the teapot and were laying the whole table-cloth under water, when my entrance put her meditations to flight. I felt sure that I had been the subject of her reflections, and was more than ever anxious to know her intentions towards me. Yet I dared not express my anxiety, lest it should give her offence. Al bajar por la mañana encontré a mi tía meditando profundamente delante del desayuno. El agua desbordaba de la tetera y amenazaba inundar el mantel cuando mi entrada le hizo salir de sus cavilaciones. Estaba seguro de haber sido el objeto de ellas, y deseaba más ardientemente que nunca saber sus intenciones respecto a mí; sin embargo, no me atrevía a expresar mi inquietud por temor a ofenderla.
My eyes, however, not being so much under control as my tongue, were attracted towards my aunt very often during breakfast. I never could look at her for a few moments together but I found her looking at me—in an odd thoughtful manner, as if I were an immense way off, instead of being on the other side of the small round table. When she had finished her breakfast, my aunt very deliberately leaned back in her chair, knitted her brows, folded her arms, and contemplated me at her leisure, with such a fixedness of attention that I was quite overpowered by embarrassment. Not having as yet finished my own breakfast, I attempted to hide my confusion by proceeding with it; but my knife tumbled over my fork, my fork tripped up my knife, I chipped bits of bacon a surprising height into the air instead of cutting them for my own eating, and choked myself with my tea, which persisted in going the wrong way instead of the right one, until I gave in altogether, and sat blushing under my aunt′s close scrutiny. Pero mis ojos no los podía dominar como mi lengua y se dirigían constantemente hacia ella durante el desayuno. No podía mirarla un momento sin que sus miradas vinieran enseguida a encontrarse con las mías; me contemplaba con aire pensativo y como si estuviéramos muy lejos uno de otro en lugar de estar sentados an te la misma mesa. Cuando terminamos de desayunar se apoyó con aire decidido en el respaldo de su silla, frunció las cejas, cruzó los brazos y me contempló a su gusto con una fijeza y atención que me confundían extraordinariamente. No había terminado todavía de desayunar y trataba de ocultar mi confusión co miendo; pero mi cuchillo se enredaba entre los dientes del tenedor, que a su vez chocaban con el cuchillo, y cortaba el jamón de una manera tan enérgica que voló por el aire en lugar de tomar el camino de mi boca. Me atragantaba al beber el té, que se empeñaba en ahogarme; por fin renuncié a seguir y me sentí enrojecer bajo el examen escrutador de mi tía.
′Hallo!′ said my aunt, after a long time. -¡Vamos! -dijo después de un silencio.
I looked up, and met her sharp bright glance respectfully. Levanté los ojos y sostuve con respeto sus miradas vivas y penetrantes.
′I have written to him,′ said my aunt. -Le he escrito -dijo mi tía.
′To—?′ -¿A...?
′To your father-in-law,′ said my aunt. ′I have sent him a letter that I′ll trouble him to attend to, or he and I will fall out, I can tell him!′ -A tu padrastro -dijo-. Le he enviado una carta, la que tendrá que atender, sin lo cual tendremos que vemos las caras; se lo prevengo.
′Does he know where I am, aunt?′ I inquired, alarmed. -¿Sabe dónde estoy, tía mía? -pregunté con temor.
′I have told him,′ said my aunt, with a nod. -Se lo he dicho --dijo mi tía mo viendo la cabeza.
′Shall I—be—given up to him?′ I faltered. -¿Y piensa usted... volver a ponerme en sus manos? -pregunté balbuciendo.
′I don′t know,′ said my aunt. ′We shall see.′ -No lo sé --dijo-; ya veremos.
′Oh! I can′t think what I shall do,′ I exclaimed, ′if I have to go back to Mr. Murdstone!′ -¡Oh Dios mío! ¿Qué va a ser de mí -exclamé- si tengo que volver a casa de míster Murdstone?
′I don′t know anything about it,′ said my aunt, shaking her head. ′I can′t say, I am sure. We shall see.′ -No sé nada --dijo mi tía-, no sé nada en absoluto; ya veremos.
My spirits sank under these words, and I became very downcast and heavy of heart. My aunt, without appearing to take much heed of me, put on a coarse apron with a bib, which she took out of the press; washed up the teacups with her own hands; and, when everything was washed and set in the tray again, and the cloth folded and put on the top of the whole, rang for Janet to remove it. She next swept up the crumbs with a little broom (putting on a pair of gloves first), until there did not appear to be one microscopic speck left on the carpet; next dusted and arranged the room, which was dusted and arranged to a hair′s breadth already. When all these tasks were performed to her satisfaction, she took off the gloves and apron, folded them up, put them in the particular corner of the press from which they had been taken, brought out her work-box to her own table in the open window, and sat down, with the green fan between her and the light, to work. Estaba muy abatido; tenía apretado el corazón y el valor me abandonaba. Mi tía, sin ocuparse de mí, sacó del armario un delantal de peto, se lo puso, limpió ella misma las tazas, y después, cuando todo estuvo en orden y puesto en la bandeja, dobló el mantel, colocó encima las tazas y llamó a Janet para que se lo llevara todo. Después se puso guantes para quitar las migas con una escobita, hasta que no se vio en la alfombra ni un átomo de polvo, después de lo cual limpió y arregló la habitación, que a mí me parecía estaba ya en orden perfecto. Cuando terminó todos estos quehaceres a su gusto, se quitó los guantes y el delantal, los dobló, los guardó en el rincón del armario de donde los había sacado y fue a sentarse con su caja de labor al lado de la mesa, cerca de la ventana abierta, y se puso a trabajar detrás del biombo verde, frente a la luz.
′I wish you′d go upstairs,′ said my aunt, as she threaded her needle, ′and give my compliments to Mr. Dick, and I′ll be glad to know how he gets on with his Memorial.′ -¿Quieres subir - me dijo mientras enhebraba la aguja a dar los buenos días de mi parte a míster Dick y decirle que me gustaría saber si su Memoria avanza?
I rose with all alacrity, to acquit myself of this commission. Me levanté vivamente para cumplir su encargo.
′I suppose,′ said my aunt, eyeing me as narrowly as she had eyed the needle in threading it, ′you think Mr. Dick a short name, eh?′ ---Supongo -dijo mi tía, mirándome tan atentamente como a la aguja que acababa de enhebrar-, supongo que el nombre de Dick te parecerá algo corto.
′I thought it was rather a short name, yesterday,′ I confessed. -Es lo que pensaba ayer: que me parece algo corto -respondí.
′You are not to suppose that he hasn′t got a longer name, if he chose to use it,′ said my aunt, with a loftier air. ′Babley—Mr. Richard Babley—that′s the gentleman′s true name.′ -No vayas a creer que no tiene otro, que podría usar si quisiera -dijo mi tía con dignidad-. Babley, míster Ri chard Babley, ese es su verdadero nombre.
I was going to suggest, with a modest sense of my youth and the familiarity I had been already guilty of, that I had better give him the full benefit of that name, when my aunt went on to say: Iba a decir, por un sentimiento de respeto a causa de mi juventud y por la familiaridad, un tanto censurable, que me había tomado, que quizá sería mejor que le llamase por su nombre entero; pero mi tía prosiguió:
′But don′t you call him by it, whatever you do. He can′t bear his name. That′s a peculiarity of his. Though I don′t know that it′s much of a peculiarity, either; for he has been ill-used enough, by some that bear it, to have a mortal antipathy for it, Heaven knows. Mr. Dick is his name here, and everywhere else, now—if he ever went anywhere else, which he don′t. So take care, child, you don′t call him anything BUT Mr. Dick.′ -Pero no le llames en ningún caso así; no puede soportar su nombre; es una peculiaridad suya, aunque no sé si a eso se le podrá llamar siquiera manía. Pero ha sufrido bastante por culpa de personas que llevaban ese mismo nombre para que le repugne mortalmente, Dios lo sabe. Dick es aquí su nombre, y en todas partes ya; es decir, si fuera alguna vez a alguna parte, que no va. Así, ten cuidado, hijo mío, y no le llames nunca más que míster Dick.
I promised to obey, and went upstairs with my message; thinking, as I went, that if Mr. Dick had been working at his Memorial long, at the same rate as I had seen him working at it, through the open door, when I came down, he was probably getting on very well indeed. I found him still driving at it with a long pen, and his head almost laid upon the paper. He was so intent upon it, that I had ample leisure to observe the large paper kite in a corner, the confusion of bundles of manuscript, the number of pens, and, above all, the quantity of ink (which he seemed to have in, in half-gallon jars by the dozen), before he observed my being present. Prometí obedecer y subí a cumplir mi mensaje; y pensaba en el camino que si míster Dick trabajaba en su Memoria desde hacía mucho tiempo con la asiduidad que ponía cuando le vi aquella mañana por la puerta abierta al bajar a desayunar, la Memoria debía de estar acabándose. Le encontré todavía absorto en la misma ocupación, con una larga pluma en la mano y la cabeza casi pegando contra el papel. Estaba tan abstraído que tuve tiempo de fijarme, antes de que se percatara de mi presencia, en una gran cometa que había en un rincón, en numerosos paquetes de manuscritos en desorden, plumas innumerables y, por encima de todo, una inmensa provisión de tinta (por lo menos una docena de botellas de litro alineadas).
′Ha! Phoebus!′ said Mr. Dick, laying down his pen. ′How does the world go? I′ll tell you what,′ he added, in a lower tone, ′I shouldn′t wish it to be mentioned, but it′s a—′ here he beckoned to me, and put his lips close to my ear—′it′s a mad world. Mad as Bedlam, boy!′ said Mr. Dick, taking snuff from a round box on the table, and laughing heartily. -¡Ah Febo! --dijo míster Dick depositando la pluma-, no sé cómo va el mundo; pero te diré una cosa -añadió bajando la voz- : no querría que lo repitieras, pero... Aquí me hizo signos de que me acercara, y hablándome al oído: «El mundo está loco, loco de atar, hijo mío», dijo míster Dick cogiendo tabaco de una caja redonda que había encima de la mesa y riendo de todo corazón.
Without presuming to give my opinion on this question, I delivered my message. Yo cumplí mi menaje sin aventurarme a decir mi parecer sobre aquella cuestión.
′Well,′ said Mr. Dick, in answer, ′my compliments to her, and I—I believe I have made a start. I think I have made a start,′ said Mr. Dick, passing his hand among his grey hair, and casting anything but a confident look at his manuscript. ′You have been to school?′ -Pues bien -dijo míster Dick como respuesta-; salúdala de mi parte y dile que... creo que estoy en buen camino; creo verdaderamente estar en buen camino -dijo míster Dick pasándose la mano por sus cabellos grises y lanzando una mirada inquieta a su manuscrito-. ¿Has estado en el colegio?
′Yes, sir,′ I answered; ′for a short time.′ -Sí, señor -respondí-; una temporada.
′Do you recollect the date,′ said Mr. Dick, looking earnestly at me, and taking up his pen to note it down, ′when King Charles the First had his head cut off?′ I said I believed it happened in the year sixteen hundred and forty-nine. -¿Y recuerdas la fecha -dijo míster Dick mirándome fijamente y cogiendo su pluma- de la muerte del rey Carlos I? Dije que creía que era en 1649.
′Well,′ returned Mr. Dick, scratching his ear with his pen, and looking dubiously at me. ′So the books say; but I don′t see how that can be. Because, if it was so long ago, how could the people about him have made that mistake of putting some of the trouble out of his head, after it was taken off, into mine?′ -Pues bien --dijo míster Dick rascándose la oreja con la pluma y mirándome con expresión de duda-; eso es lo que dicen los libros; pero yo no comprendo cómo puede ser. Si hace tanto tiempo, ¿cómo las gentes que le rodeaban han podido tener la torpeza de meter en mi cabeza un poco de la confusión que había en la suya cuando se la cortaron?
I was very much surprised by the inquiry; but could give no information on this point. Yo me quedé muy sorprendido de la pregunta; pero no pude darle ningún dato sobre el asunto.
′It′s very strange,′ said Mr. Dick, with a despondent look upon his papers, and with his hand among his hair again, ′that I never can get that quite right. I never can make that perfectly clear. But no matter, no matter!′ he said cheerfully, and rousing himself, ′there′s time enough! My compliments to Miss Trotwood, I am getting on very well indeed.′ -Es muy extraño -dijo míster Dick lanzando una mirada de desaliento a sus papeles y volviendo a pasarse las manos por los cabellos-, pero no consigo desembrollar la cuestión. No lo veo claro. Pero poco importa, poco importa -dijo alegremente y más animado-; tenemos tiempo. Saluda a tu tía, y que estoy en muy buen camino.
I was going away, when he directed my attention to the kite. Me iba, cuando llamó mi atención hacia la cometa.
′What do you think of that for a kite?′ he said. -¿Qué te parece esa cometa?
I answered that it was a beautiful one. I should think it must have been as much as seven feet high. Respondí que me parecía muy bonita, y que debía de tener lo menos siete pies de alta.
′I made it. We′ll go and fly it, you and I,′ said Mr. Dick. ′Do you see this?′ -La he hecho yo. La lanzaremos uno de estos días tú y yo --dijo míster Dick-. ¿Ves?
He showed me that it was covered with manuscript, very closely and laboriously written; but so plainly, that as I looked along the lines, I thought I saw some allusion to King Charles the First′s head again, in one or two places. Y me enseñaba que estaba hecha de un papel cubierto de una escritura fina y apretada, pero tan clara, que al dirigir mis miradas sobre sus líneas me pareció ver dos o tres veces alusiones a la cabeza del rey Carlos I.
′There′s plenty of string,′ said Mr. Dick, ′and when it flies high, it takes the facts a long way. That′s my manner of diffusing ′em. I don′t know where they may come down. It′s according to circumstances, and the wind, and so forth; but I take my chance of that.′ -Hay mucho hilo bramante -dijo míster Dick-, y cuando sube muy alta lleva, como es natural, lo escrito muy lejos. Es una manera de propa garlo, no sé dónde puede ir a parar; depende de las circunstancias del viento y demás, y yo lo aprovecho.
His face was so very mild and pleasant, and had something so reverend in it, though it was hale and hearty, that I was not sure but that he was having a good-humoured jest with me. So I laughed, and he laughed, and we parted the best friends possible. Tenía un aspecto tan bueno, tan dulce y tan respetable, a pesar de su apariencia de fuerza y de viveza, que no estaba yo muy seguro de que no fuera una broma para divertirme, y me eché a reír. Él hizo otro tanto, y nos separamos como los mejores amigos del mundo.
′Well, child,′ said my aunt, when I went downstairs. ′And what of Mr. Dick, this morning?′ -Y bien, muchacho - me dijo mi tía cuando baje-. ¿Cómo está míster Dick?
I informed her that he sent his compliments, and was getting on very well indeed. Le respondí que la saludaba, y que la Memoria estaba en muy buen camino.
′What do you think of him?′ said my aunt. -¿Y qué piensas de míster Dick? -me preguntó mi tía.
I had some shadowy idea of endeavouring to evade the question, by replying that I thought him a very nice gentleman; but my aunt was not to be so put off, for she laid her work down in her lap, and said, folding her hands upon it: Tenía ganas de eludir la cuestión, contestando que me parecía muy amable; pero mi tía no se dejaba despistar así. Puso su labor sobre las rodillas y me dijo, cruzando las manos:
′Come! Your sister Betsey Trotwood would have told me what she thought of anyone, directly. Be as like your sister as you can, and speak out!′ -Vamos; tu hermana Betsey Trotwood me habría dicho al momento lo que pensara de cualquier persona. Haz todo lo posible por parecerte a tu hermana, y habla.
′Is he—is Mr. Dick—I ask because I don′t know, aunt—is he at all out of his mind, then?′ I stammered; for I felt I was on dangerous ground. -¿No está míster Dick, no está ...? Le hago esta pregunta porque no sé, no sé, tía, si no tendrá la cabeza un poco mal -balbucí, dándome cuenta de que pisaba en falso.
′Not a morsel,′ said my aunt. -Nada de eso --dijo mi tía.
′Oh, indeed!′ I observed faintly. -¡Oh! -repuse con voz débil.
′If there is anything in the world,′ said my aunt, with great decision and force of manner, ′that Mr. Dick is not, it′s that.′ -Si hay alguien en el mundo que no esté mal de la cabeza, precisamente es míster Dick --dijo mi tía con mucha decisión y energía.
I had nothing better to offer, than another timid, ′Oh, indeed!′ Yo no podía hacer nada mejor que repetir: -¡Oh!
′He has been CALLED mad,′ said my aunt. ′I have a selfish pleasure in saying he has been called mad, or I should not have had the benefit of his society and advice for these last ten years and upwards—in fact, ever since your sister, Betsey Trotwood, disappointed me.′ -Han dicho que estaba loco -prosiguió mi tía---. Tengo un placer egoísta en recordar que han dicho que estaba loco, pues sin ello nunca hubiera tenido la suerte de gozar de su compañía y de sus consejos desde hace más de diez años; a decir verdad, desde que tu hermana Betsey Trotwood me dejó defraudada.
′So long as that?′ I said. -Hace tanto tiempo.
′And nice people they were, who had the audacity to call him mad,′ pursued my aunt. ′Mr. Dick is a sort of distant connexion of mine—it doesn′t matter how; I needn′t enter into that. If it hadn′t been for me, his own brother would have shut him up for life. That′s all.′ -Y bonita gente era la que tenía la audacia de llamarle loco -prosiguió mi tía- Míster Dick era una especie de pariente lejano; pero no tengo necesidad de explicarte esto. Si no hubiera sido por mí, su propio hermano le habría encerrado para toda la vida; eso es todo.
I am afraid it was hypocritical in me, but seeing that my aunt felt strongly on the subject, I tried to look as if I felt strongly too. Me asusta pensar la hipocresía que había en mí cuando, viendo la indignación de mi tía sobre aquel punto, traté de tomar un aire indignado como ella.
′A proud fool!′ said my aunt. ′Because his brother was a little eccentric—though he is not half so eccentric as a good many people—he didn′t like to have him visible about his house, and sent him away to some private asylum-place: though he had been left to his particular care by their deceased father, who thought him almost a natural. And a wise man he must have been to think so! Mad himself, no doubt.′ -¡Un orgulloso idiota! -dijo mi tía-; porque su hermano era un poco excéntrico, aunque no es ni la mitad de excéntrico que la mayoría de la gente; no quería que le vieran en su casa y pensaba enviarle a una casa de salud, aunque le había sido particularmente recomendado por su difunto padre, quien le consideraba casi como un idiota. Y también había que ver al hombre que pensaba así; él sí que estaba loco, estoy segura.
Again, as my aunt looked quite convinced, I endeavoured to look quite convinced also. De nuevo, como mi tía parecía completamente convencida, yo traté de parecerlo también.
′So I stepped in,′ said my aunt, ′and made him an offer. I said, "Your brother′s sane—a great deal more sane than you are, or ever will be, it is to be hoped. Let him have his little income, and come and live with me. I am not afraid of him, I am not proud, I am ready to take care of him, and shall not ill-treat him as some people (besides the asylum-folks) have done." After a good deal of squabbling,′ said my aunt, ′I got him; and he has been here ever since. He is the most friendly and amenable creature in existence; and as for advice!—But nobody knows what that man′s mind is, except myself.′ -Entonces yo no lo consentí, y le hice una proposición; le dije: «Su hermano está completamente cuerdo y es infinitamente más sensato que usted es ni lo será nunca, al menos así lo espero; concédale una pequeña pensión y que se venga a vivir a mi casa. A mí no me asusta; no soy vanidosa, y estoy dispuesta a cuidarle, y no le maltrataré, como podrían hacerlo, sobre todo, en un manicomio». Después de innumerables dificultades -continuó mi tía- lo conseguí, y está aquí desde entonces. Y es el mejor amigo, el hombre más amable, la criatura con quien mejor se puede vivir en el mundo. En cuanto a los consejos .... nadie sabe apreciar ni conocer el espíritu de este hombre como yo.
My aunt smoothed her dress and shook her head, as if she smoothed defiance of the whole world out of the one, and shook it out of the other. Mi tía se sacudió un poco el vestido, moviendo la cabeza, como si con aquellos dos movimientos desafiara al mundo entero.
′He had a favourite sister,′ said my aunt, ′a good creature, and very kind to him. But she did what they all do—took a husband. And HE did what they all do—made her wretched. It had such an effect upon the mind of Mr. Dick (that′s not madness, I hope!) that, combined with his fear of his brother, and his sense of his unkindness, it threw him into a fever. That was before he came to me, but the recollection of it is oppressive to him even now. Did he say anything to you about King Charles the First, child?′ -Tenía una hermana que era su favorita -continuó---, una criatura muy buena y muy cariñosa para él; pero hizo como todas las mujeres, y se casó, y el marido hizo lo que hacen todos, y la hizo desgraciada. El efecto de su desgracia sobre míster Dick (y no es locura), unido con el temor que le inspiraba su hermano y el sentimiento de la dureza con que le trataban, fue tal que le dio una fiebre cerebral; fue antes de que se instalara en mi casa; pero aquel recuerdo le resulta penoso todavía. ¿Te ha hablado del rey Carlos I?
′Yes, aunt.′ -Sí, tía.
′Ah!′ said my aunt, rubbing her nose as if she were a little vexed. ′That′s his allegorical way of expressing it. He connects his illness with great disturbance and agitation, naturally, and that′s the figure, or the simile, or whatever it′s called, which he chooses to use. And why shouldn′t he, if he thinks proper!′ -¡Ah! --dijo frotándose la nariz, un poco contrariada-; es su manera alegórica de expresarlo, pues lo une en su espí ritu con una gran conmoción, lo que es bastante natural, y es como una figura de la cual se sirve, una comparación, y ¿por qué no lo ha de hacer así, si le parece bien?
I said: ′Certainly, aunt.′ Ciertamente, tía -dije.
′It′s not a business-like way of speaking,′ said my aunt, ′nor a worldly way. I am aware of that; and that′s the reason why I insist upon it, that there shan′t be a word about it in his Memorial.′ -No es así como se expresa la gente por lo general, ni es ese el lenguaje que se emplea en negocios, ya lo sé; por eso insisto para que no lo ponga en su Memoria.
′Is it a Memorial about his own history that he is writing, aunt?′ -¿Es que... es una Memoria sobre su propia vida lo que escribe, tía?
′Yes, child,′ said my aunt, rubbing her nose again. ′He is memorializing the Lord Chancellor, or the Lord Somebody or other—one of those people, at all events, who are paid to be memorialized—about his affairs. I suppose it will go in, one of these days. He hasn′t been able to draw it up yet, without introducing that mode of expressing himself; but it don′t signify; it keeps him employed.′ -Sí, pequeño -respondió frotándose de nuevo la na riz-. Está haciendo una Memoria para asuntos suyos, diri gida al lord Chambelan o al lord no sé cuántos; en fin, a uno de esos a quienes se paga para que reciban Memorias. Supongo que la enviará uno de estos días; todavía no ha conseguido redactarla sin mezclar en ella la alegoría; pero ¡qué más da!, así se entretiene.
In fact, I found out afterwards that Mr. Dick had been for upwards of ten years endeavouring to keep King Charles the First out of the Memorial; but he had been constantly getting into it, and was there now. El caso es que después descubrí que míster Dick trataba desde hacía diez años de impedir al rey Carlos I que apareciese en su Memoria, sin conseguirlo.
′I say again,′ said my aunt, ′nobody knows what that man′s mind is except myself; and he′s the most amenable and friendly creature in existence. If he likes to fly a kite sometimes, what of that! Franklin used to fly a kite. He was a Quaker, or something of that sort, if I am not mistaken. And a Quaker flying a kite is a much more ridiculous object than anybody else.′ -Repito -dijo mi tía- que nadie conoce el espíritu de ese hombre como yo; es el más cariñoso y fácil de llevar. ¿Que le gusta lanzar una cometa de vez en cuando? ¿Eso qué significa? Franklin también soltaba cometas y era cuáquero o algo parecido, si no me equivoco, y un cuáquero soltando cometas es mucho más ridículo que otro hombre cualquiera.
If I could have supposed that my aunt had recounted these particulars for my especial behoof, and as a piece of confidence in me, I should have felt very much distinguished, and should have augured favourably from such a mark of her good opinion. But I could hardly help observing that she had launched into them, chiefly because the question was raised in her own mind, and with very little reference to me, though she had addressed herself to me in the absence of anybody else. Si hubiera podido suponer que mi tía me contaba aq uellos detalles para mi educación personal o por darme una prueba de confianza, me habría sentido muy halagado y habría sacado pronósticos favorables de semejante favor. Pero no podía hacerme ilusiones; era evidente para mí que si se metía en aquellas explicaciones era porque la cuestión se presentaba, a pesar suyo, en su espíritu, y era a sí misma a quien se dirigía y no a mí, aunque pareciera que me dedicaba su dis curso, en ausencia de mejor interlocutor.
At the same time, I must say that the generosity of her championship of poor harmless Mr. Dick, not only inspired my young breast with some selfish hope for myself, but warmed it unselfishly towards her. I believe that I began to know that there was something about my aunt, notwithstanding her many eccentricities and odd humours, to be honoured and trusted in. Though she was just as sharp that day as on the day before, and was in and out about the donkeys just as often, and was thrown into a tremendous state of indignation, when a young man, going by, ogled Janet at a window (which was one of the gravest misdemeanours that could be committed against my aunt′s dignity), she seemed to me to command more of my respect, if not less of my fear. Al mismo tiempo debo decir que la generosidad con que defendía a míster Dick no solamente me inspiraba muchas esperanzas egoístas, sino que también despertaba en mi corazón cierto afecto hacia ella. Creo que empezaba a darme cuenta de que, a pesar de todas sus excentricidades y extrañas fantasías, era una persona que merecía respeto y confianza. Aunque estaba lo mismo de animada que la víspera contra los burros, y fuese violenta su indignación cuando se precipitaba al jardín para defender el césped si veía que un joven al pasar le ponía los ojos tiernos a Janet, sentada en su ventana (lo que era una de las ofensas más grandes que se podía hacer a la dignidad de mi tía), me era imposible, sin embargo, no sentir cada vez más respeto hacia ella y menos temor.
The anxiety I underwent, in the interval which necessarily elapsed before a reply could be received to her letter to Mr. Murdstone, was extreme; but I made an endeavour to suppress it, and to be as agreeable as I could in a quiet way, both to my aunt and Mr. Dick. The latter and I would have gone out to fly the great kite; but that I had still no other clothes than the anything but ornamental garments with which I had been decorated on the first day, and which confined me to the house, except for an hour after dark, when my aunt, for my health′s sake, paraded me up and down on the cliff outside, before going to bed. At length the reply from Mr. Murdstone came, and my aunt informed me, to my infinite terror, that he was coming to speak to her herself on the next day. On the next day, still bundled up in my curious habiliments, I sat counting the time, flushed and heated by the conflict of sinking hopes and rising fears within me; and waiting to be startled by the sight of the gloomy face, whose non-arrival startled me every minute. Esperaba con extraordinaria ansiedad la respuesta de míster Murdstone; pero hacía grandes esfuerzos para disimularlo y por serles simpático a mi tía y a míster Dick. Tenía que salir con este último a lanzar la gran cometa; pero como no tenía más trajes que el indumento un poco extravagante con que me había adornado mi tía en el primer momento, me veía obligado a permanecer en casa, excepto una hora después de oscurecer, que mi tía me hacía dar un paseo para mi salud por delante del jardín antes de meterme en la cama. Por último llegó la respuesta de míster Murdstone. Mi tía me informó, con gran terror por mi parte, que iba a venir a ha blarle en persona al día siguiente. Al otro día todavía estaba con mi curioso indumento y contaba las horas tembloroso y muy preocupado en lucha con mis esperanzas, que sentí debilitarse, y mis temores, que podían conmigo, esperando a cada momento sentirme estremecer a la vista de su sombrío rostro y muy impaciente porque no llegaba.
MY aunt was a little more imperious and stern than usual, but I observed no other token of her preparing herself to receive the visitor so much dreaded by me. She sat at work in the window, and I sat by, with my thoughts running astray on all possible and impossible results of Mr. Murdstone′s visit, until pretty late in the afternoon. Our dinner had been indefinitely postponed; but it was growing so late, that my aunt had ordered it to be got ready, when she gave a sudden alarm of donkeys, and to my consternation and amazement, I beheld Miss Murdstone, on a side-saddle, ride deliberately over the sacred piece of green, and stop in front of the house, looking about her. Mi tía estaba un poco más agresiva y severa que de costumbre; en ninguna otra cosa se le notaba que se preparase a recibir al que tanto temor me inspiraba a mí. Trabajaba delante de la ventana, y yo, sentado a su lado, reflexionaba en los resultados posibles a imposibles de la visita de míster Murdstone. La tarde avanzaba y la comida había sido retrasada indefinidamente; pero mi tía, impaciente ya, acababa de decir que la sirvieran, cuando lanzó un grito de alarma a la vista de un burro. ¡Cuál no sería mi consternación al ver a miss Murdstone, montada en él, atravesar con paso decidido el césped sagrado, detenerse enfrente de la casa y mirar a su alrededor!
′Go along with you!′ cried my aunt, shaking her head and her fist at the window. ′You have no business there. How dare you trespass? Go along! Oh! you bold-faced thing!′ -¡Váyase usted; no tiene nada que hacer aquí! -gritaba mi tía sacudiendo su cabeza y su puño por la ventana-. ¿Cómo se atreve usted? ¡Que se marche! ¡Oh, qué descaro!
MY aunt was so exasperated by the coolness with which Miss Murdstone looked about her, that I really believe she was motionless, and unable for the moment to dart out according to custom. I seized the opportunity to inform her who it was; and that the gentleman now coming near the offender (for the way up was very steep, and he had dropped behind), was Mr. Murdstone himself. Mi tía estaba tan exasperada por la frescura con que miss Murdstone miraba a su alrededor, que creí que perdía el movimiento y se quedaba incapaz de salir al ataque como de costumbre. Aproveché la oportunidad para informarle de quiénes eran aquella señora y aquel caballero que se acercaban a ella, pues el camino era una pendiente y el señor que se había quedado detrás era míster Murdstone en persona.
′I don′t care who it is!′ cried my aunt, still shaking her head and gesticulating anything but welcome from the bow-window. ′I won′t be trespassed upon. I won′t allow it. Go away! Janet, turn him round. Lead him off!′ and I saw, from behind my aunt, a sort of hurried battle-piece, in which the donkey stood resisting everybody, with all his four legs planted different ways, while Janet tried to pull him round by the bridle, Mr. Murdstone tried to lead him on, Miss Murdstone struck at Janet with a parasol, and several boys, who had come to see the engagement, shouted vigorously. But my aunt, suddenly descrying among them the young malefactor who was the donkey′s guardian, and who was one of the most inveterate offenders against her, though hardly in his teens, rushed out to the scene of action, pounced upon him, captured him, dragged him, with his jacket over his head, and his heels grinding the ground, into the garden, and, calling upon Janet to fetch the constables and justices, that he might be taken, tried, and executed on the spot, held him at bay there. This part of the business, however, did not last long; for the young rascal, being expert at a variety of feints and dodges, of which my aunt had no conception, soon went whooping away, leaving some deep impressions of his nailed boots in the flower-beds, and taking his donkey in triumph with him. -¡Me tiene sin cuidado quiénes sean! -exclamó mi tía sacudiendo todavía la cabeza y gesticulando desde la ventana todo lo contrario de una bienvenida- ¡Que no hubieran contravenido mis órdenes! ¡No lo consentiré! ¡Que se marchen! Janet, ¡échalos, échalos! Yo, oculto detrás de mi tía, vi una especie de combate. El burro, con sus cuatro patas plantadas en el suelo, resistía a todo el mundo. Janet le tiraba de la brida para hacerle dar la vuelta. Míster Murdstone trataba de hacerle avanzar; miss Murdstone pegaba a Janet con su sombrilla, y muchos chiquillos acudían al ruido, gritando con todas sus fuerzas. De pronto mi tía, reconociendo entre ellos al pequeño malhechor encargado de conducir los asnos, que era uno de sus enemigos más encarnizados, aunque apenas tenía trece años, se precipitó en el teatro del combate, le cogió y le arrastró al jardín, con la chaqueta por encima de la cabeza y los talones arañando el suelo. Después llamó a Janet para que fuera a llamar a la policía con el objeto de que le cogieran y juzgaran allí mismo, y lo retuvo ante su vista. Pero esta escena dio fin a la comedia, pues el golfillo, que sabía muchas tretas de las que mi tía no tenía ni idea, encontró pronto medio de escapar, dejando las huellas de sus zapatones en los arriates y montándose en el burro triunfantemente.
Miss Murdstone, during the latter portion of the contest, had dismounted, and was now waiting with her brother at the bottom of the steps, until my aunt should be at leisure to receive them. My aunt, a little ruffled by the combat, marched past them into the house, with great dignity, and took no notice of their presence, until they were announced by Janet. Miss Murdstone había desmontado cuando terminó el combate y esperaba con su hermano, al pie de los escalones, a que mi tía pudiera recibirlos. Un poco agitada todavía por la lucha, mi tía pasó por su lado con gran dignidad y no se preocupó de su presencia hasta que Janet los anunció.
′Shall I go away, aunt?′ I asked, trembling. -¿Debo marcharme, tía? -pregunté temblando.
′No, sir,′ said my aunt. ′Certainly not!′ With which she pushed me into a corner near her, and fenced Me in with a chair, as if it were a prison or a bar of justice. This position I continued to occupy during the whole interview, and from it I now saw Mr. and Miss Murdstone enter the room. -No, señor; ciertamente que no. Y me empujó hacia un rincón a su lado. Después hizo una especie de valla con sillas, como si fuera una prisión o una barra de justicia, y continué ocupando esta posición durante toda la entrevista, y desde allí vi entrar a míster y a miss Murdstone en la habitación.
′Oh!′ said my aunt, ′I was not aware at first to whom I had the pleasure of objecting. But I don′t allow anybody to ride over that turf. I make no exceptions. I don′t allow anybody to do it.′ -¡Oh! -dijo mi tía- En el primer momento no sabía a quiénes tenía el gusto de hacer reproches; pero, ¿saben ustedes?, no le permito a nadie que pase con burros por esa praderita, y no hago excepciones; no lo permito a nadie.
′Your regulation is rather awkward to strangers,′ said Miss Murdstone. -Es una regla nada cómoda para los extraños -dijo miss Murdstone.
′Is it!′ said my aunt. -Sí, ¿eh? --dijo mi tía.
Mr. Murdstone seemed afraid of a renewal of hostilities, and interposing began: Míster Murdstone pareció temer que se renovaran las hostilidades, y se interpuso, empezando:
′Miss Trotwood!′ -¿Miss Trotwood?
′I beg your pardon,′ observed my aunt with a keen look. ′You are the Mr. Murdstone who married the widow of my late nephew, David Copperfield, of Blunderstone Rookery!—Though why Rookery, I don′t know!′ -Usted dispense -observó mi tía con una mirada penetrante-. ¿Usted es míster Murdstone, que se casó con la viuda de mi difunto sobrino David Copperfield de Bloonderstone Rookery? Pero, ¿por qué Rookery? No lo sé.
′I am,′ said Mr. Murdstone. -Yo soy -dijo míster Murdstone.
′You′ll excuse my saying, sir,′ returned my aunt, ′that I think it would have been a much better and happier thing if you had left that poor child alone.′ -Usted me dispensará si le digo, caballero -repuso mi tía-, que pienso que habría sido mucho mejor y más oportuno que no se hubiera usted ocupado para nada de aquella pobre niña.
′I so far agree with what Miss Trotwood has remarked,′ observed Miss Murdstone, bridling, ′that I consider our lamented Clara to have been, in all essential respects, a mere child.′ -Soy de la opinión de miss Trotwood, -dijo miss Murdstone irguiéndose- ya que considero, en efecto, a nuestra pobre Clara como una niña en todos los sentidos más esenciales.
′It is a comfort to you and me, ma′am,′ said my aunt, ′who are getting on in life, and are not likely to be made unhappy by our personal attractions, that nobody can say the same of us.′ -Es una felicidad para usted y para mí, señora -dijo mi tía-, el que avanzamos por la vida sin peligro de que nos hagan desgraciadas por nuestros atractivos personales y el que nadie pueda decir de nosotras otro tanto.
′No doubt!′ returned Miss Murdstone, though, I thought, not with a very ready or gracious assent. ′And it certainly might have been, as you say, a better and happier thing for my brother if he had never entered into such a marriage. I have always been of that opinion.′ -Sin duda -dijo miss Murdstone, aunque pienso que no muy dispuesta a convenir en ello de buena gana-. Y ciertamente habría sido, como usted dice, mucho mejor para mi hermano si nunca se hubiera metido en semejante matrimo nio. Yo siempre he sido de esa opinión.
′I have no doubt you have,′ said my aunt. ′Janet,′ ringing the bell, ′my compliments to Mr. Dick, and beg him to come down.′ -No cabe duda -dijo mi tía- Janet (llamó a la campanilla): mis saludos a míster Dick, y que le ruego que baje.
Until he came, my aunt sat perfectly upright and stiff, frowning at the wall. When he came, my aunt performed the ceremony of introduction. Hasta que llegó, mi tía, más derecha que nunca, guardó silencio, mirando a la pared, con el ceño fruncido. Cuando llegó, procedió a la ceremonia de la presentación:
′Mr. Dick. An old and intimate friend. On whose judgement,′ said my aunt, with emphasis, as an admonition to Mr. Dick, who was biting his forefinger and looking rather foolish, ′I rely.′ -Míster Dick, un antiguo a íntimo amigo, con cuyo juicio cuento -dijo mi tía con énfasis, y como avisando a mister Dick, que se mordía las uñas con aire atontado.
Mr. Dick took his finger out of his mouth, on this hint, and stood among the group, with a grave and attentive expression of face. Míster Dick se sacó los dedos de la boca y permaneció de pie en medio del grupo con mucha gravedad, dispuesto a demostrar la más profunda atención.
My aunt inclined her head to Mr. Murdstone, who went on: Mi tía hizo un signo de cabeza a míster Murdstone, que continuó:
′Miss Trotwood: on the receipt of your letter, I considered it an act of greater justice to myself, and perhaps of more respect to you-′ -Miss Trotwood: al recibir su carta, consideré como un deber para mí y una demostración de respeto hacia usted...
′Thank you,′ said my aunt, still eyeing him keenly. ′You needn′t mind me.′ -Gracias --dijo mi tía, mirándole a la cara-; pero no se preocupe por mí.
′To answer it in person, however inconvenient the journey,′ pursued Mr. Murdstone, ′rather than by letter. This unhappy boy who has run away from his friends and his occupation—′ -El venir a contestarle en persona, por mucha molestia que el viaje pudiera ocasionarme, mejor que escribiendo. El desgraciado niño que ha huido lejos de sus amigos y de sus ocupaciones...
′And whose appearance,′ interposed his sister, directing general attention to me in my indefinable costume, ′is perfectly scandalous and disgraceful.′ -Y cuyo aspecto -dijo su hermana, llamando la atención general sobre mi vestimenta-, es tan chocante y tan escandaloso...
′Jane Murdstone,′ said her brother, ′have the goodness not to interrupt me. This unhappy boy, Miss Trotwood, has been the occasion of much domestic trouble and uneasiness; both during the lifetime of my late dear wife, and since. He has a sullen, rebellious spirit; a violent temper; and an untoward, intractable disposition. Both my sister and myself have endeavoured to correct his vices, but ineffectually. And I have felt—we both have felt, I may say; my sister being fully in my confidence—that it is right you should receive this grave and dispassionate assurance from our lips.′ -Jane -dijo su hermano-, ten la bondad de no interrumpirme. Este desgraciado niño, miss Trotwood, ha sido en nuestra casa la causa de muchas contrariedades y disturbios domésticos durante la vida de mi querida mujer, y también después. Tiene un carácter sombrío y se rebela contra toda autoridad. En una palabra, es intratable. Mi hermana y yo hemos tratado de corregirle sus vicios, pero sin resultado, y los dos hemos sentido, pues tengo plena confianza en mi hermana, que era justo que recibiera usted de nuestros labios esta declaración sincera, hecha sin rabia y sin cólera.
′It can hardly be necessary for me to confirm anything stated by my brother,′ said Miss Murdstone; ′but I beg to observe, that, of all the boys in the world, I believe this is the worst boy.′ -Mi hermano no necesita mi testimonio para confirmar el suyo, y sólo pido permiso para añadir que entre todos los niños del mundo no creo que haya otro peor.
′Strong!′ said my aunt, shortly. -Es fuerte -dijo mi tía secamente.
′But not at all too strong for the facts,′ returned Miss Murdstone. -No es demasiado fuerte si se tienen en cuenta los hechos - insistió miss Murdstone.
′Ha!′ said my aunt. ′Well, sir?′ -¡Ah! -dijo mi tía- ¿Y bien, caballero?
′I have my own opinions,′ resumed Mr. Murdstone, whose face darkened more and more, the more he and my aunt observed each other, which they did very narrowly, ′as to the best mode of bringing him up; they are founded, in part, on my knowledge of him, and in part on my knowledge of my own means and resources. I am responsible for them to myself, I act upon them, and I say no more about them. It is enough that I place this boy under the eye of a friend of my own, in a respectable business; that it does not please him; that he runs away from it; makes himself a common vagabond about the country; and comes here, in rags, to appeal to you, Miss Trotwood. I wish to set before you, honourably, the exact consequences—so far as they are within my knowledge—of your abetting him in this appeal.′ -Yo tengo mi opinión particular sobre la manera de educarle -repuso míster Murdstone, cuya frente se oscurecía cada vez más a medida que mi tía le miraba con mayor fijeza-. Y mis ideas están formadas en parte por lo que sé de su carácter y en parte por el conocimiento de mis recursos. No tengo que responder a nadie más que a mí mismo; he obrado, por lo tanto, de acuerdo con mis ideas, y no tengo nada que añadir. Me bastará decir que había colocado al niño, bajo la vigilancia de uno de mis amigos, en un comercio honroso. ¿Que esa situación no le conviene? ¿Que huye? ¿Que va como un vagabundo por las carreteras y viene aquí en andrajos a dirigirse a usted, miss Trotwood? Yo deseo poner ante su vista las consecuencias inevitables del apoyo que usted pudiera darle en estas circunstancias.
′But about the respectable business first,′ said my aunt. ′If he had been your own boy, you would have put him to it, just the same, I suppose?′ -Empecemos por tratar la cuestión de la colocación honrosa. Si hubiera sido su propio hijo, ¿le habría colocado usted de la misma manera?
′If he had been my brother′s own boy,′ returned Miss Murdstone, striking in, ′his character, I trust, would have been altogether different.′ -Si hubiera sido el hijo de mi hermano -dijo miss Murdstone, interviniendo en la discusión-, su carácter ha bría sido completamente diferente.
′Or if the poor child, his mother, had been alive, he would still have gone into the respectable business, would he?′ said my aunt. -Si aquella pobre niña, su difunta madre, hubiera vivido, ¿le habrían cargado también con esas honrosas ocupaciones? - insistió mi tía.
′I believe,′ said Mr. Murdstone, with an inclination of his head, ′that Clara would have disputed nothing which myself and my sister Jane Murdstone were agreed was for the best.′ -Creo -dijo míster Murdstone con un movimiento de cabeza- que Clara no habría puesto nunca resistencia a lo que mi hermana y yo hubiéramos decidido.
Miss Murdstone confirmed this with an audible murmur. Miss Murdstone confirmó con un gruñido lo que su hermano acababa de decir.
′Humph!′ said my aunt. ′Unfortunate baby!′ -¡Hum! -dijo mi tía-. ¡Desgraciado niño!
Mr. Dick, who had been rattling his money all this time, was rattling it so loudly now, that my aunt felt it necessary to check him with a look, before saying: Míster Dick hacía sonar su dinero en el bolsillo desde hacía mucho rato, se entregaba a aquella ocupación con tal ahínco, que mi tía creyó necesario imponerle silencio con una mirada antes de decir:
′The poor child′s annuity died with her?′ -¿Y la pensión de aquella pobre niña, se extinguió con ella?
′Died with her,′ replied Mr. Murdstone. -Se extinguió con ella -replicó míster Murdstone.
′And there was no settlement of the little property—the house and garden—the what′s-its-name Rookery without any rooks in it—upon her boy?′ -¿Y su pequeña propiedad, la casita y el jardín, ese yo no sé qué de Rookery sin cuervos, no ha sido legado a su hijo?
′It had been left to her, unconditionally, by her first husband,′ Mr. Murdstone began, when my aunt caught him up with the greatest irascibility and impatience. -Su primer marido se lo dejó sin condiciones -empezó a decir míster Murdstone, cuando mi tía le interrumpió con impaciencia y cólera visibles:
′Good Lord, man, there′s no occasion to say that. Left to her unconditionally! I think I see David Copperfield looking forward to any condition of any sort or kind, though it stared him point-blank in the face! Of course it was left to her unconditionally. But when she married again—when she took that most disastrous step of marrying you, in short,′ said my aunt, ′to be plain—did no one put in a word for the boy at that time?′ -¡Dios mío, ya lo sé! ¡Le fue dejado sin condiciones! Conocía muy bien a David Copperfield y sé que no era hombre que previera la menor dificultad aunque la hubiera tenido ante los ojos. No hay duda que se lo dejó sin condiciones; pero al volver ella a casarse, cuando tuvo la desgracia de casarse con usted; en una palabra -dijo mi tía, y para hablar francamente-, nadie ha dicho entonces una palabra en favor de este niño.
′My late wife loved her second husband, ma′am,′ said Mr. Murdstone, ′and trusted implicitly in him.′ -Mi pobre mujer amaba a su segundo marido, señora, y tenía plena confianza en él ---dijo mister Murdstone.
′Your late wife, sir, was a most unworldly, most unhappy, most unfortunate baby,′ returned my aunt, shaking her head at him. ′That′s what she was. And now, what have you got to say next?′ -Su mujer, caballero, era una pobre niña muy desgraciada, que no conocía el mundo -respondió mi tía sacudiendo la cabeza---. Eso es lo que era. Y ahora veamos: ¿qué nos tiene usted que decir?
′Merely this, Miss Trotwood,′ he returned. ′I am here to take David back—to take him back unconditionally, to dispose of him as I think proper, and to deal with him as I think right. I am not here to make any promise, or give any pledge to anybody. You may possibly have some idea, Miss Trotwood, of abetting him in his running away, and in his complaints to you. Your manner, which I must say does not seem intended to propitiate, induces me to think it possible. Now I must caution you that if you abet him once, you abet him for good and all; if you step in between him and me, now, you must step in, Miss Trotwood, for ever. I cannot trifle, or be trifled with. I am here, for the first and last time, to take him away. Is he ready to go? If he is not—and you tell me he is not; on any pretence; it is indifferent to me what—my doors are shut against him henceforth, and yours, I take it for granted, are open to him.′ -Únicamente esto, miss Trotwood -repuso él-. Estoy dispuesto a llevarme a David sin condiciones, para hacer de él lo que me convenga. No he venido para hacer promesas ni para comprometerme a nada. Usted quizá, miss Trotwood, tiene alguna intención en animarle en su huida y en escuchar sus quejas. Sus modales (debo decirlo) no me parecen muy conciliadores, y me lo hacen suponer. Le prevengo, por lo tanto, que si se interpone usted en esta ocasión entre él y yo, es asunto terminado. Si interviene usted, miss Trotwood, su intervención tiene que ser definitiva. No hablo en broma, y no hay que jugar conmigo. Estoy dispuesto a llevármele por primera y última vez. ¿Está él dispuesto a seguirme? Si no lo está, si usted me dice que no lo está, bajo cualquier pretexto que sea, poco me importa; en ese caso mi puerta se le cierra para siempre y consideraré como convenido que la suya le queda abierta.
To this address, my aunt had listened with the closest attention, sitting perfectly upright, with her hands folded on one knee, and looking grimly on the speaker. When he had finished, she turned her eyes so as to command Miss Murdstone, without otherwise disturbing her attitude, and said: Mi tía había escuchado este discurso con la máxima atención, más tiesa que nunca, con las manos cruzadas encima de las rodillas y los ojos fijos en su interlocutor. Cuando hubo terminado, miró a miss Murdstone sin cambiar de actitud, y dijo:
′Well, ma′am, have YOU got anything to remark?′ -¿Y usted, señorita, tiene algo que añadir?
′Indeed, Miss Trotwood,′ said Miss Murdstone, ′all that I could say has been so well said by my brother, and all that I know to be the fact has been so plainly stated by him, that I have nothing to add except my thanks for your politeness. For your very great politeness, I am sure,′ said Miss Murdstone; with an irony which no more affected my aunt, than it discomposed the cannon I had slept by at Chatham. -Verdaderamente, miss Trotwood, todo lo que pudiera decir ha sido tan bien expresado por mi hermano, y todos los hechos que pudiera recordar han sido expuestos por él tan claramente, que no tengo más que dar las gracias por su amabilidad, o mejor dicho por su excesiva amabilidad -añadió miss Murdstone con una ironía que no turbó a mi tía más de lo que hubiera desconcertado al cañón al lado del cual me había yo dormido en Chathan.
′And what does the boy say?′ said my aunt. ′Are you ready to go, David?′ -Y el niño ¿qué dice? -repuso mi tía-. David, ¿estás dispuesto a partir?
I answered no, and entreated her not to let me go. I said that neither Mr. nor Miss Murdstone had ever liked me, or had ever been kind to me. That they had made my mama, who always loved me dearly, unhappy about me, and that I knew it well, and that Peggotty knew it. I said that I had been more miserable than I thought anybody could believe, who only knew how young I was. And I begged and prayed my aunt—I forget in what terms now, but I remember that they affected me very much then—to befriend and protect me, for my father′s sake. Contesté que no, y le rogué que no consintiera en que me llevasen. Dije que míster y miss Murdstone no me habían querido nunca; que nunca habían sido buenos para mí; que sabía que habían hecho muy desgraciada a mi madre, que me amaba tanto, y que Peggotty también lo sabía. Dije que ha bía sufrido mucho, más de lo que se podía suponer al considerar lo pequeño que era. Y rogaba y suplicaba a mi tía (no recuerdo las frases, pero sé que estaba muy conmovido) que me protegiera y defendiera por amor a mi padre.
′Mr. Dick,′ said my aunt, ′what shall I do with this child?′ -Míster Dick -dijo mi tía---, ¿qué le parece a usted que haga con este niño?
Mr. Dick considered, hesitated, brightened, and rejoined, ′Have him measured for a suit of clothes directly.′ Míster Dick reflexionó, dudó, y después, con expresión radiante, dijo: Haga que le tomen medida cuanto antes para un traje completo.
′Mr. Dick,′ said my aunt triumphantly, ′give me your hand, for your common sense is invaluable.′ Having shaken it with great cordiality, she pulled me towards her and said to Mr. Murdstone: -Míster Dick -dijo mi tía con expresión de triunfo-, deme usted la mano. Su buen sentido es de un valor inapreciable. Después, habiendo estrechado vivamente la mano de míster Dick, me atrajo hacia sí, diciendo a míster Murdstone:
′You can go when you like; I′ll take my chance with the boy. If he′s all you say he is, at least I can do as much for him then, as you have done. But I don′t believe a word of it.′ -Puede usted marcharse cuando quiera; me quedo con el niño. Si fuera como ustedes dicen, siempre estaría a tiempo de hacer lo que ustedes han hecho; pero no creo ni una pala bra de ello.
′Miss Trotwood,′ rejoined Mr. Murdstone, shrugging his shoulders, as he rose, ′if you were a gentleman—′ -Miss Trotwood -respondió míster Murdstone-, si fuera usted un hombre...
′Bah! Stuff and nonsense!′ said my aunt. ′Don′t talk to me!′ -¡Bah!, tonterías --dijo mi tía-; cállese usted.
′How exquisitely polite!′ exclaimed Miss Murdstone, rising. ′Overpowering, really!′ -¡Qué exquisita educación! --exclamó miss Murdstone levantándose-. ¡Verdaderamente es demasiado!
′Do you think I don′t know,′ said my aunt, turning a deaf ear to the sister, and continuing to address the brother, and to shake her head at him with infinite expression, ′what kind of life you must have led that poor, unhappy, misdirected baby? Do you think I don′t know what a woeful day it was for the soft little creature when you first came in her way—smirking and making great eyes at her, I′ll be bound, as if you couldn′t say boh! to a goose!′ -¿Cree usted que no sé -dijo mi tía, haciéndose la sorda a lo que decía la hermana y dirigiéndose al hermano con expresión de desdén-, cree usted que no sé la vida que ha hecho llevar a aquella pobre niña, tan mal inspirada? ¿Cree usted que no sé qué día nefasto fue para la dulce cria tura aquel en que le conoció, sonriendo y poniéndole los ojos tiernos? ¡Estoy segura! ¡Como si fuera usted capaz de decir una palabra cariñosa a un niño!
′I never heard anything so elegant!′ said Miss Murdstone. -Nunca he oído lenguaje más elegante -dijo miss Murdstone.
′Do you think I can′t understand you as well as if I had seen you,′ pursued my aunt, ′now that I DO see and hear you—which, I tell you candidly, is anything but a pleasure to me? Oh yes, bless us! who so smooth and silky as Mr. Murdstone at first! The poor, benighted innocent had never seen such a man. He was made of sweetness. He worshipped her. He doted on her boy—tenderly doted on him! He was to be another father to him, and they were all to live together in a garden of roses, weren′t they? Ugh! Get along with you, do!′ said my aunt. -¿Cree usted que no comprendo su juego lo mismo que si lo viera -continuó mi tía---, ahora que le veo y que le oigo, y que, a decir verdad, es todo menos un placer para mí? ¡Ah! Ciertamente no había nadie más dulce ni más sumiso que usted en aquella época. La pobre inocente no había visto nunca un cordero semejante. ¡Era tan bueno! Adoraba a la madre; tenía verdadera debilidad por el hijo; una verdadera ceguera. Sería para él un segundo padre, y todo consistiría en vivir juntos en un paraíso de rosas, ¿no es así? ¡Vamos, vamos, déjeme en paz! --dijo mi tía.
′I never heard anything like this person in my life!′ exclaimed Miss Murdstone. -En mi vida he visto una mujer semejante --exclamó miss Murdstone.
′And when you had made sure of the poor little fool,′ said my aunt—′God forgive me that I should call her so, and she gone where YOU won′t go in a hurry—because you had not done wrong enough to her and hers, you must begin to train her, must you? begin to break her, like a poor caged bird, and wear her deluded life away, in teaching her to sing YOUR notes?′ -Y cuando ya tuvo cogida a aquella pobre insensata --continuó mi tía---, y Dios me perdone por llamar así a una criatura que ya está donde usted no tiene prisa por reunirse con ella; como si todavía no les hubiera hecho usted bastante daño a ella y a los suyos, se puso usted a educarla, ¿no es así? Empezó el trabajo de educarla y la enjauló como a un pobre pajarillo para hacerle olvidar su vida pasada y enseñarle a cantar las notas de usted.
′This is either insanity or intoxication,′ said Miss Murdstone, in a perfect agony at not being able to turn the current of my aunt′s address towards herself; ′and my suspicion is that it′s intoxication.′ -Es locura o embriaguez --dijo miss Murdstone, desesperada de no poder atraer hacia sí el torrente de invectivas de mi tía-, y sospecho que más bien es embriaguez.
Miss Betsey, without taking the least notice of the interruption, continued to address herself to Mr. Murdstone as if there had been no such thing. Miss Betsey, sin prestar atención a la interrupción, continuó dirigiéndose a míster Murdstone y sacudiendo un dedo:
′Mr. Murdstone,′ she said, shaking her finger at him, ′you were a tyrant to the simple baby, and you broke her heart. She was a loving baby—I know that; I knew it, years before you ever saw her—and through the best part of her weakness you gave her the wounds she died of. There is the truth for your comfort, however you like it. And you and your instruments may make the most of it.′ -Sí, míster Murdstone. Usted se hizo el tirano de aquella inocente niña y le rompió el corazón. Tenía un alma tierna, lo sé, lo sabía muchos años antes de que usted la conociera, y usted supo escoger su parte débil para darle los golpes por los que ha muerto. Esa es la verdad, le guste o no, haga usted lo que haga y le hayan servido los que le hayan servido de instrumentos.
′Allow me to inquire, Miss Trotwood,′ interposed Miss Murdstone, ′whom you are pleased to call, in a choice of words in which I am not experienced, my brother′s instruments?′ -Permítame preguntarle, miss Trotwood -dijo miss Murdstone-, a quién llama usted, con una elección de expresiones a que no estoy acostumbrada, los instrumentos de mi hermano.
′It was clear enough, as I have told you, years before YOU ever saw her—and why, in the mysterious dispensations of Providence, you ever did see her, is more than humanity can comprehend—it was clear enough that the poor soft little thing would marry somebody, at some time or other; but I did hope it wouldn′t have been as bad as it has turned out. That was the time, Mr. Murdstone, when she gave birth to her boy here,′ said my aunt; ′to the poor child you sometimes tormented her through afterwards, which is a disagreeable remembrance and makes the sight of him odious now. Aye, aye! you needn′t wince!′ said my aunt. ′I know it′s true without that.′ Miss Betsey, persistiendo en una sordera inquebrantable, reanudó su discurso: -Estaba a la vista, desde muchos años antes de que usted la conociera (y está por encima de la razón humana) el comprender por qué ha entrado en los planes misteriosos de la Providencia el que usted la conociera; era natural que aquella pobre criatura volviera a casarse un día; pero yo esperaba que no le saliera tan mal. Era en la época en que trajo al mundo a este niño, a este pobre niño, de quien usted se ha servido para martirizarla, lo que es ahora un recuerdo tan desagradable, que le hace aborrecer su presencia. Sí, sí; no necesita usted extremecerse --continuó mi tía-. Estoy convencida sin necesidad de eso.
He had stood by the door, all this while, observant of her with a smile upon his face, though his black eyebrows were heavily contracted. I remarked now, that, though the smile was on his face still, his colour had gone in a moment, and he seemed to breathe as if he had been running. Míster Murdstone permanecía todo el tiempo de pie al lado de la puerta, mirándola fijamente con la sonrisa en los labios, pero con las cejas fruncidas. Observé entonces que, aunque continuaba sonriendo, había palidecido de pronto y parecía respirar con dificultad.
′Good day, sir,′ said my aunt, ′and good-bye! Good day to you, too, ma′am,′ said my aunt, turning suddenly upon his sister. ′Let me see you ride a donkey over my green again, and as sure as you have a head upon your shoulders, I′ll knock your bonnet off, and tread upon it!′ -Que usted lo pase bien, caballero -dijo mi tía- Adiós. Buenos días, señorita -continuó volviéndose bruscamente hacia la hermana-. Si vuelvo a verla alguna vez pasar en burro por mi praderita, le aseguro, como que tiene usted cabeza encima de los hombros, que le arranco el sombrero y lo pateo.
It would require a painter, and no common painter too, to depict my aunt′s face as she delivered herself of this very unexpected sentiment, and Miss Murdstone′s face as she heard it. But the manner of the speech, no less than the matter, was so fiery, that Miss Murdstone, without a word in answer, discreetly put her arm through her brother′s, and walked haughtily out of the cottage; my aunt remaining in the window looking after them; prepared, I have no doubt, in case of the donkey′s reappearance, to carry her threat into instant execution. Sería necesario un pintor, y un pintor de talento excepcional, para dar idea del rostro de mi tía al hacer aquella decla ración inesperada, y del de miss Murdstone al oírla. Pero el gesto no era menos elocuente que las palabras, en vista de lo cual miss Murdstone cogió discretamente el brazo de su hermano y salió majestuosa de la casa. Mi tía, desde la ventana, los miraba alejarse, dispuesta sin ninguna duda a poner al instante su amenaza en ejecución en el caso de que el burro reapareciera.
No attempt at defiance being made, however, her face gradually relaxed, and became so pleasant, that I was emboldened to kiss and thank her; which I did with great heartiness, and with both my arms clasped round her neck. I then shook hands with Mr. Dick, who shook hands with me a great many times, and hailed this happy close of the proceedings with repeated bursts of laughter. No habiendo intentado ellos responder al desafío, el rostro de mi tía se dulcificó poco a poco, tanto que me atreví a darle las gracias y a abrazarla, lo que hice con todo mi corazón echando mis brazos alrededor de su cuello. Después di un apretón de manos a míster Dick, que quiso repetir la ceremonia muchas veces seguidas, y que saludó el feliz término del asunto con repetidas carcajadas.
′You′ll consider yourself guardian, jointly with me, of this child, Mr. Dick,′ said my aunt. -Usted se considerará a medias conmigo como tutor de este niño, míster Dick --dijo mi tía.
′I shall be delighted,′ said Mr. Dick, ′to be the guardian of David′s son.′ -Estaré encantado de ser el tutor del hijo de David.
′Very good,′ returned my aunt, ′that′s settled. I have been thinking, do you know, Mr. Dick, that I might call him Trotwood?′ -Muy bien -dijo mi tía-; es cosa convenida. Pensaba en algo, míster Dick: ¿Podría llamarle Trotwood?
′Certainly, certainly. Call him Trotwood, certainly,′ said Mr. Dick. ′David′s son′s Trotwood.′ -Ciertamente, ciertamente; llámele Trotwood -dijo míster Dick-. Trotwood, hijo de David.
′Trotwood Copperfield, you mean,′ returned my aunt. -¿Quiere usted decir Trotwood Copperfield? -preguntó mi tía.
′Yes, to be sure. Yes. Trotwood Copperfield,′ said Mr. Dick, a little abashed. -Sí, sin duda; Trotwood Copperfield -dijo, un poco avergonzado.
My aunt took so kindly to the notion, that some ready-made clothes, which were purchased for me that afternoon, were marked ′Trotwood Copperfield′, in her own handwriting, and in indelible marking-ink, before I put them on; and it was settled that all the other clothes which were ordered to be made for me (a complete outfit was bespoke that afternoon) should be marked in the same way. Mi tía estaba tan contenta con su idea, que ella misma marcó con tinta indeleble las camisas que me compraron aquel mismo día, antes de que me pusiera ninguna; y se decidió que el resto de mi ropa, que también encargó aquel mismo día, llevaría la misma marca.
Thus I began my new life, in a new name, and with everything new about me. Now that the state of doubt was over, I felt, for many days, like one in a dream. I never thought that I had a curious couple of guardians, in my aunt and Mr. Dick. I never thought of anything about myself, distinctly. The two things clearest in my mind were, that a remoteness had come upon the old Blunderstone life—which seemed to lie in the haze of an immeasurable distance; and that a curtain had for ever fallen on my life at Murdstone and Grinby′s. No one has ever raised that curtain since. I have lifted it for a moment, even in this narrative, with a reluctant hand, and dropped it gladly. The remembrance of that life is fraught with so much pain to me, with so much mental suffering and want of hope, that I have never had the courage even to examine how long I was doomed to lead it. Whether it lasted for a year, or more, or less, I do not know. I only know that it was, and ceased to be; and that I have written, and there I leave it. Y así empezó mi nueva vida, con nombre nuevo y todo nuevo. Ahora que mi incertidumbre había pasado, me pareció durante varios días que vivía en un sueño. No se me ocurrió pensar ni por un momento en la curiosa pareja de tutores que eran mi tía y míster Dick. Nunca pensaba en mí de una manera clara. Las dos únicas cosas que veía concisas en mi espíritu eran mi remota y antigua vida en Bloonderstone, que me parecía que cada vez estaba más lejos, y la sensación de que una cortina había caído para siempre sobre mi vida en la casa Murdstone y Grimby. Nadie ha levantado después esa cortina; sólo yo ahora un momento y con mano tímida y temblorosa, para este relato, y la he vuelto a dejar caer con alegría. El recuerdo de aquella existencia está unido en mi espíritu a tal dolor, a tal sufrimiento moral y a una desesperanza tan absoluta, que nunca he tenido valor de examinar cuánto había durado mi suplicio. Si fue un año o más o menos, no lo sé. únicamente sé que fue y dejó de ser, y que ahora lo he escrito para no volver nunca a recordarlo.